1. La verdadera cara del gobierno de Macri
Tarifazos, despidos, cierres de fábricas y comercios; violencia contra las mujeres y abandono de los castigados por las catástrofes.
Las facturas con los tarifazos en el gas, el agua, la electricidad y los boletos del transporte van llegando, impagables, a los hogares populares. Solo en la Capital Federal hay 40.000 familias sin electricidad: Macri mintió cuando dijo que había acabado con la crisis energética. Al mismo tiempo que empobrece al pueblo, el gobierno se endeuda con intereses del 56%: un regalo a los usureros y especuladores.
Sólo en los últimos 12 meses hubo 172.000 despidos de trabajadores en blanco, y más del doble si se suman los trabajadores en negro. Más los tarifazos y la inflación, son cientos de miles de familias que el gobierno empuja a la pobreza. Cada día cierran 25 pequeñas y medianas empresas y comercios, y quedan en la calle cientos de trabajadores. Mintió Macri cuando dijo que su gobierno garantizaba pobreza cero con trabajo de calidad.
Cada día que pasa hay un nuevo femicidio, y muchas mujeres más son golpeadas y abusadas. Pero en el presupuesto de Macri para acabar con esa violencia, una mujer vale menos que un alfajor.
Las lluvias siguen castigando el Noreste, el Litoral y Santa Fe. Etchevehere, secretario de Agroindustria, frente a la catástrofe de miles y miles de trabajadores y campesinos, le tira el paquete a las provincias. El negocio de Etchevehere es la venta de vacas, y gana plata con los animales que los productores agrarios inundados tienen que malvender.
2. La disputa imperialista por sus “patios traseros”
Crece la disputa de las potencias imperialistas por nuestros países latinoamericanos, principalmente entre Estados Unidos, Rusia y China.
Cada semana, el imperialismo yanqui y el inglés aprietan más la horca financiera sobre Venezuela; actúan en la política de ese país como si fuera su patio trasero, y lo amenazan con una invasión militar. Lo acompañan reaccionarios como Macri y Bolsonaro, el presidente de Brasil. Los sufrimientos del pueblo de Venezuela son brutales.
Los imperialismos de Rusia y de China, en disputa con esas potencias, aprovechan la debilidad de Venezuela, han acaparado grandes yacimientos petroleros y endeudaron a Venezuela. Se cobran esa deuda –de 17.000 millones de dólares los rusos y 60.0000 millones los chinos–, con oro y petróleo. China se lleva 400.000 barriles de petróleo por día.
La feroz disputa imperialista por Venezuela, para el fascista yanqui Trump, sería el primer paso para seguir después contra Nicaragua y Cuba. Además, la militarización del gobierno brasileño de Bolsonaro, y la tendencia en Latinoamérica al uso de las Fuerzas Armadas en “la seguridad” y contra “los enemigos internos”, son hechos que tienen mucho que ver con el endurecimiento de la disputa interimperialista, particularmente entre Estados Unidos, y Rusia y China. Macri nos mete adentro de esa pelea.
No hay imperialismo bueno, todos son chupasangre de nuestros países y nuestros pueblos.
3. Vamos por un paro nacional activo y multisectorial
Con la unidad para la lucha, desde las asambleas y cuerpos de delegados.
La lucha contra los tarifazos se sigue multiplicando, con las multisectoriales para la confluencia de la lucha, y con los ruidazos que se multiplican en los barrios de cada ciudad.
La CCC, la CTEP y Somos Barrios de Pie preparan una gran jornada nacional el 13/02, con una movilización en la avenida 9 de Julio de la Capital Federal, contra el hambre y los tarifazos, por las cuatro leyes de la emergencia social, como parte de su lucha por Tierra, Techo y Trabajo. ¡Vamos con ellos!
Crece, también la lucha contra los despidos y cierres de fábricas, con los obreros defendiendo sus puestos o fuentes de trabajo; y las miles de pequeñas y medianas industrias y comercios ahorcadas por la política macrista.
El ajuste macrista corta ancho. Golpea al pobre que Macri le aumentó la luz de $70 a $2.500 y ahorca a pequeños y medianos productores del campo y la ciudad. La burguesía nacional no puede pagar tarifas millonarias y soportar las importaciones subsidiadas por la devaluación del peso que impuso Macri con su pacto con el FMI.
En la calle confluyen actos multisectoriales, los ruidazos, los verdurazos y los panazos.
El movimiento obrero -estatal y privado- tiene por delante las paritarias, en las que el macrismo se juega a profundizar el hachazo que recibieron los salarios el año pasado. Y a cumplir con lo que acordó con el FMI: volver a la carga con la reforma laboral y el aumento de la edad para jubilarse.
4. Un gran frente electoral que derrote a Macri y su política reaccionaria
La situación del pueblo y de la patria es desesperante. Derrotar la política macrista en las calles y en las urnas, es una necesidad del pueblo.
En medio de la crisis social y económica, y la rebeldía contra los tarifazos, Macri hizo una jugada clave para su plan de ser reelecto este año: acordó con Vidal y Larreta unificar las elecciones nacionales con las de Buenos Aires y la CABA. Piensa que las elecciones adelantadas en provincias gobernadas por la oposición, crearán un clima político favorable a la polarización: “Macri o Venezuela”.
El peronismo marcha a definiciones. A fin de febrero, el PJ marcha a su congreso nacional y también en Buenos Aires. Gioja y Grey han manifestado su disposición a construir frentes con Unidad Ciudadana y otras fuerzas dispuestas a la unidad para derrotar a Macri.
A la salida de este hoy se habrá realizado el lanzamiento de Alternativa Federal, en Mar del Plata, con Schiaretti, Urtubey y otros gobernadores, Pichetto, Massa, sectores del socialismo y Libres del Sur. No participaría el tucumano Manzur, que busca unir fuerzas en internas para cerrar el paso al macrismo; lo mismo se conversa en otras provincias.
Somos parte de Los Cayetanos, también de En marcha y de las 17 fuerzas sociales y políticas del gran acto de Atlanta. En todas ellas recogimos el programa que está en las calles y enarbolamos las banderas antiimperialistas y democráticas. Llevando esas banderas a las masas, trabajamos por la unidad para derrotar a la política macrista. A los que no quieren esa unidad los dejamos en evidencia en las calles y en lo electoral, porque a Macri tenemos que derrotarlo en las calles y en las elecciones.
Escribe Ricardo Fierro
