Como continuidad de la lucha arrancada desde abajo, iniciada el 31 de marzo por un digno aumento salarial al costo de vida patagónico y el nuevo Convenio Colectivo, se realizó en Cañadón Seco, norte de Santa Cruz, una gran asamblea petrolera con la participación de 5.000 trabajadores que le dieron un golpe mortal al “Chako” Segovia; poniendo como condición su renuncia o expulsión, para suspender la medida de fuerza de 20 días de paros y piquetes, y reclamando un urgente aumento salarial. A su vez dieron un plazo de 90 días para la terminación del convenio colectivo de trabajo, sobre la base del anteproyecto del 2008. Los petroleros dan un gran paso en la lucha por la recuperación del sindicato petrolero para ponerlo al servicio de los trabajadores.
A la vez le dio un voto de confianza a la conducción de la lucha integrada por mas de 120 delegados de Las Heras, Truncado y Caleta Olivia, algunos más de la zona austral y parte de la comisión directiva del Sindicato Petrolero, encabezada por el secretario adjunto Retamozo.
Es esta gran firmeza y unidad de la gran masa petrolera, que desconoció la conciliación obligatoria, y las presiones para levantar el paro, la que obligó al gobernador Peralta –duramente golpeado por la masiva respuesta a la brutal represión kirchnerista a los docentes de Adosac y estatales de ATE, y las movilizaciones solidarias en todo el país–, a soltarle la mano a su amigo “Chako” Segovia, ante la negativa de éste a renunciar, condición de los trabajadores petroleros para suspender la lucha.
En esta situación de 23 días de paro masivo, arrancado desde abajo, pasándole por arriba a la traición del “Chaco” Segovia que “levantó el paro” –encabezado por los cuerpos de delegados con una parte de Comisión Directiva–, el gobierno kirchnerista, con Tomada a la cabeza deciden la intervención del Sindicato Petrolero Santa Cruz, con la complicidad de la Federación de Roberti.
Repudiamos toda intervención al sindicato petrolero por parte del gobierno kirchnerista y de su gobernador Peralta, fieles defensores del saqueo petrolero de Repsol-YPF, a través de los Eskenazi, Sinopec (ex-OXI) y Pan American Energy, de la superexplotación en turnos de 12, 14 y 16 horas de trabajo, insalubridad, suspensiones, despidos constantes, stand by de centenares de trabajadores, y salarios por debajo del costo de la canasta familiar real patagónica, y la falta de un convenio colectivo, decidido y discutido por todos los trabajadores petroleros.
Fuera la intervención kirchnerista
A los 25 días de paro petrolero, con el Sindicato Petrolero Santa Cruz intervenido por el gobierno K y continuando la medida de fuerza, se realizaron dos reuniones.
Una en Comodoro Rivadavia, entre el gobernador de Santa Cruz Daniel Peralta, el intendente de Caleta Olivia Cotillo, Carlos Flaquier (que fuera tesorero del Sindicato Petrolero Chubut), el interventor designado por la Federación de Petroleros (Roberti), y representantes de los dos sectores de la conducción sindical, el del “Chako” Segovia y la oposición encabezada por Rubén Retamozo.
En el Ministerio de Trabajo de la Nación en Buenos Aires, se reunieron las cámaras empresarias petroleras, con 6 delegados elegidos por los trabajadores petroleros: 2 por localidad, y dirigentes de la Federación. Allí se discutió: el rechazo a la intervención; el cobro de los días caídos; los 25.000 pesos en 6 cuotas; el aumento salarial; y la designación de nuevos paritarios para tratar el anteproyecto de nuevo Convenio Colectivo en un plazo de 90 días, donde se tratará además del aumento salarial, un punto fundamental como son los turnos de 8 horas de trabajo, exigidos en todas las asambleas, y no de 12 horas como en perforación y otros sectores.
Al cierre de esta edición (26/4), los trabajadores se reunían en asamblea en Cañadón Seco, para discutir el acta firmada en el Ministerio de Trabajo.
Son los petroleros de Santa Cruz, con sus cuerpos de delegados, asambleas, paros y piquetes, los que van a terminar de echar a su secretario general Segovia, eligiendo democráticamente su dirección para seguir la lucha.
¡Fuera la intervención kirchnerista en el sindicato petrolero! El sindicato petrolero es de los trabajadores con sus cuerpos de delegados a la cabeza, ni del gobierno K, ni de Repsol (Eskenazi-K) y las empresas!
¡Luchemos por la unidad multisectorial de los trabajadores petroleros, docentes, estatales y todo el pueblo santacruceño para torcerle el brazo a la represión y el saqueo de Cristina Kirchner y Peralta!
