1. La pandemia y la organización de las masas
La pandemia sigue avanzando en el mundo. Los países imperialistas, pese a lo señalado por la Organización Mundial de la Salud (OMS), priorizan aplicar una tercera dosis, incumpliendo los contratos acordados. Oprimen y discriminan a los países dependientes como el nuestro. En África apenas el 2% está vacunado. Demoran los envíos violando los contratos. Y dejan que se venzan millones de dosis.
En la Argentina, hace 12 semanas que descienden los contagios del Covid. Al mismo tiempo, al 22/8, hay 174 casos con la variante Delta, la mayoría son viajeros o relacionados con viajeros, pero crecen casos de transmisión local, un paso previo a la circulación comunitaria.
El total de casos en nuestro país desde que comenzó la pandemia es de 5.139.966, pudieron recuperarse 4.822.420 personas y fallecieron 110.609.
Llegaron a la Argentina 47.095.955 dosis, se aplicaron 38.983.217. De ese total, 27.190.311 personas fueron vacunadas con 1 dosis y 11.792.906 con dos dosis. Las unidades de Terapia Intensiva de todo el país tienen ocupadas 3.377 camas, un 48,8% a nivel nacional.
Para acelerar la vacunación es necesario avanzar en el protagonismo del pueblo y su organización. Seguimos impulsando comités de crisis, las y los promotores de salud, la incorporación de jóvenes voluntarios, etc.
Y seguimos la pelea exigiendo al gobierno que destine los fondos necesarios para la vacuna nacional.
2. Crece la lucha popular
La inflación sigue castigando al pueblo sin piedad. El 68% de menores de 14 años son pobres.
La situación de los barrios populares se agrava semana a semana.
En medio de la pandemia, a más de un año y medio de la asunción del nuevo gobierno, el costo de la canasta básica alimentaria aumentó 86%.
Con el aumento de los precios de los alimentos el poder de compra del salario es el más bajo en los últimos 10 años. Las asignaciones sociales no alcanzan. Y los jubilados si compran los remedios, no tienen para comer.
Así no se puede resolver la brutal crisis sanitaria, social y productiva que sufrimos a lo largo y ancho del país.
Plata hay, pero se destina al pago de la deuda fraudulenta del macrismo o va al bolsillo de un puñado de monopolios, bancos y latifundistas en su mayoría extranjeros.
En respuesta a esta situación las y los trabajadores de Mondelez en las plantas de Pacheco, Victoria y Villa Mercedes, bloquearon los portones, y conquistaron importantes reclamos por sus condiciones de trabajo y otras. Las y los trabajadores del Astillero Río Santiago junto a los reclamos por sus reivindicaciones luchan por recuperar la soberanía de la industria naval y de nuestras aguas fluviales y marítimas. También luchan los obreros de Acindar de Villa Constitución con sus reclamos.
En el Chaco sigue la lucha de campesinos y originarios del predio comunitario Ex Campo Burión. Es parte del genocidio silencioso de las comunidades originarias y campesinas. Les roban sus tierras y las hacinan en las villas. Pero se rebelan ante esa situación defendiendo sus tierras y territorios.
El 18/8 organizaciones sociales y políticas se movilizaron en el Chaco reclamando basta de hambre y basta de impunidad, represión y el gatillo fácil.
Pelean las mujeres, se organizan en los barrios con sus promotoras contra la violencia que sufren. Lucha la JCR junto a los movimientos de jóvenes, para que todos los pibes y pibas puedan acceder a educación, deporte, cultura y salud.
Frente a la pandemia y la crisis social, se avanza en la unidad de las masas populares y los trabajadores de la cultura.
Fue importante la extraordinaria jornada nacional del 7 de agosto, que plantó las banderas del pueblo en la agenda social y política. Convocada por las fuerzas sociales y políticas que se pusieron al hombro la lucha contra el hambre derrotando al macrismo en las calles, pelearon por el Frente de Todos, y siguen luchando por pan, tierra, techo y trabajo para todas y todos.
Luchamos para que los pesos y dólares que entran sean destinados a las emergencias populares.
Al calor de la lucha por las necesidades más urgentes crece un gran movimiento con multisectoriales y se abre un gran debate de masas, por el no pago de la deuda externa fraudulenta y la recuperación de la soberanía nacional del Paraná, el Río de la Plata, el litio, el petróleo, etc.
3. Por una gran campaña política de masas. Votamos al Frente de Todos.
Cuando faltan un poco más de dos semanas para las PASO se recalentó la campaña electoral. Proliferan las encuestas y análisis de las consecuencias del error sanitario y político del presidente.
El macrismo trata de montarse sobre esa situación e imponerla como centro del debate electoral. Mauricio Macri sigue jugando. Ahora anuncia que su campaña se centra en CABA, Córdoba, Santa Fe y algunos lugares de la Provincia de Buenos Aires. La UCR gana terreno con la candidatura de Manes y otras figuras en varias provincias. Lilita Carrió debió dar un paso al costado al difundirse su cumpleaños con 70 personas en medio de la pandemia.
Se hizo pública la denuncia de Esmeralda Mitre. Dice que disputa por “recuperar las acciones de La Nación que le robaron a mi padre”. Y cuenta que Macri puso 15 millones de dólares para salvar de la quiebra a los Saguier, dueños de La Nación. Como se ve, el apoyo de este medio a Macri no es gratis.
El PCR-PTP y su Juventud, junto a la CCC y los movimientos en los que participamos, impulsamos una gran campaña política a favor del Frente de Todos con nuestras 10 medidas, dirigida a los centros de concentración, zonas agrarias, lugares de trabajo, colegios, universidades y en los barrios. Escuchando, y discutiendo el voto, golpeando centralmente al macrismo y al sector más reaccionario que está detrás.
4. La derrota de Estados Unidos en Afganistán
La invasión de las fuerzas de los EEUU y la OTAN en Afganistán y la caída de los talibanes fue en el 2001. Veinte años después los talibanes recuperaron ciudades importantes y su capital Kabul(ver artículo en página 11).
Además de su situación estratégica, Afganistán posee reservas de cobre, hierro, litio, tierras raras, etc. Antes de la ofensiva, una delegación de talibanes visitó Rusia, Turkmenistán, Pakistán y China. Con China habría acordado invertir en una mina de cobre.
En otro contexto internacional los yanquis fueron derrotados en Vietnam en 1975.
La actual situación en Afganistán es una muestra de la política del imperialismo yanqui, de la creciente disputa interimperialista y de que crecen los factores de guerra.
En América latina se agrava la crisis política en Brasil. La Corte Suprema rechazó el intento de modificar el sistema electoral, y ordenó el allanamiento de dirigentes bolsonaristas. Los acusa de llamar a “sitiar” a Brasilia (la capital brasileña) con camiones el 7 de septiembre, “invadir” la Corte Suprema, “romper todo y sacar a esos tipos a la fuerza”. Ese mismo día Bolsonaro convocó a una ceremonia militar en el centro de Brasilia.
Al mismo tiempo, se multiplican las movilizaciones populares en repudio al gobierno brasileño.
5. En medio de la campaña electoral. Crecer, acumular y organizar
Esta no es una campaña electoral más. El pueblo sufre con la pandemia, el hambre, el hacinamiento, la expulsión de tierras, la falta de trabajo, los bajos salarios y el ajuste a los jubilados, la quiebra de las Pymes, y más.
Hay descontento en las masas populares: luchan para salir de esta situación tan penosa y no quieren volver atrás.
El PCR y su JCR, la CCC y demás fuerzas en las que participamos, en medio de un gran debate político nos ponemos al hombro la campaña, escuchando a las masas y discutiendo el voto al Frente de Todos, con la propuesta de 10 puntos de nuestro programa para salir de esta situación.
Nosotros ubicamos lo electoral como un instrumento que le permite al pueblo avanzar. Pero no ilusionamos a las masas que a través del camino electoral se va a resolver un pan para cada boca, un techo para poder vivir, tierra para trabajar, salud, educación y trabajo para todos los que habitan nuestro suelo. Y entendemos que el frente político y el Partido son clave para que un día el pueblo alzado pueda destruir este aparato estatal que nos oprime y construir un nuevo Estado de los obreros, los campesinos, los intelectuales y todos los sectores populares, y pasen a tener la sartén por el mango.
Hacemos campaña acumulando fuerzas para abrir un camino que lleve al pueblo a acabar con la dependencia y el latifundio oligárquico.
Escriben Jacinto Roldán y Ricardo Fierro
