A Yanina la mataron, lo confirmó la Corte Suprema de Justicia de la Nación.
La mataron a pesar de la justicia chaqueña que sin investigar, dijo que fue “MUERTE NATURAL”.
A Yanina la mataron, “la encontraron muerta” el 21 de marzo de 2015, tirada en su cama al lado de su bebé de 6 meses, en el departamento donde vivía con su pareja.
La mataron, aunque dijeron que su fractura de cráneo, signos de asfixia, moretones y sangre en las uñas, resultaron en una “muerte súbita”.
La mataron y la volvieron a matar, cuando archivaron la causa sin el informe de la autopsia.
La mataron y la volvieron a matar, cada jueves que su papá iba al juzgado para saber ¿de qué, porqué murió su hija?! Y en el juzgado le respondía ¿para qué quiere saber?
La mataron y la volvieron a matar, cuando su padre falleció SIN JUSTICIA.
La mataron y la volvieron a matar cuando citaron a su padre para que declare, cuando él había fallecido hacía 1 año y medio.
La mataron y la volvieron a matar, cada vez que su familia golpeaba puertas en la “justicia” y le respondían “confiamos en nuestros peritos”.
La familia de Yanina no dejó de luchar hasta saber la verdadera causa de su muerte. Ayer, después de 4 años y 8 meses la CSJN confirmó que fue asesinato.
La guarda del bebé de Yanina estaba a cargo del progenitor, desde ayer detenido por ser el principal sospechoso del homicidio (habrá que ver la carátula porque en esa fecha aún no existía la figura de femicidio).
Todavía falta la etapa del juicio, y que la custodia del niño quede a cargo de la abuela materna.
Golpearon todas las puertas, y por suerte, no todas se cerraron. Hoy la familia de Yanina agradece a todos aquellos que les dijeron “Yo Sí te creo”.
Al Dr. Rolando Nuñez, (fallecido recientemente), quien fuera el titular del ex Centro de Estudios Nelson Mandela. A los medios de comunicación, al movimiento de mujeres y feministas que venimos acompañando su reclamo de verdad y justicia en todas las marchas, a las pibas que vendieron pastelitos, rifas, hicieron colectas y otras actividades para juntar la plata para los abogados y peritos. A funcionarias del gobierno que se va, a funcionarias del gobierno que viene. A las mamás con sus bebés que cortaron la calle ayer para lograr que se lea el informe de la pericia.
A todxs los que de alguna manera aportamos nuestro granito de arena para que el grito de justicia, no lo hagan solas.
Pero el mérito, el enorme logro después de 4 años y 8 meses, es absolutamente gracias a esa familia, son esas mujeres, su madre y hermanas las que encabezaron esta lucha, las que movieron cielo y tierra, las que tenían y tienen sed de justicia. Han dado un verdadero ejemplo de cómo debe luchar una hermana, una madre, una familia, cuando te arrancan una vida. Y le han dado una lección a la justicia chaqueña: ya no tendrán la comodidad de nuestro silencio.
Y sobre todo han dado un verdadero ejemplo de confianza en las personas que sí creímos en ellas.
El agradecimiento es para ustedes compañeras, porque dieron vuelta el viento de tanto soplar, porque en cada uno de nosotrxs, YANINA VIVE y LA LUCHA SIGUE.
Escribe Gisela Gutiérrez
