1. La disputa imperialista y la guerra mundial Como señaló la reciente reunión del Comité Central del PCR, se profundiza la disputa imperialista y crece la amenaza de una tercera guerra mundial. La reunión del G7, integrado por Estados Unidos, Alemania, Francia, Reino Unido, Japón, Italia y Canadá, y de la OTAN, encabezada por EEUU, celebró la incorporación de Finlandia y Suecia a esa alianza militar, que cerró la frontera norte con Rusia y fortaleció el dominio de Occidente en el Mar Báltico. En una cumbre realizada en Japón, los dirigentes del G7 anunciaron nuevas medidas en su política de enfrentar al imperialismo ruso usando como escudo al pueblo ucraniano. Ahora, EEUU anunció que había entregado a Ucrania las poderosas “bombas de racimo”. Un arma cuyos proyectiles se abren en el aire y liberan decenas de explosivos más pequeños, explotando y dispersando pequeñas bombas que destruyen todo y matan sin distinción en un radio de hasta 400 metros. Un arma prohibida en 111 países. El ejército invasor ruso las viene usando hace rato, aunque lo niega. Putin contestó la decisión yanqui diciendo: “Tenemos suficientes bombas de racimo y las usaremos si es necesario”. China y Rusia han acordado profundizar su relación estratégica y consideran que esa alianza es la que debe encabezar “el mundo multipolar”. Dimitri Medvedev, expresidente ruso y vocero de Putin, dijo que Occidente está “completamente loco”, que la guerra de Ucrania “continuaría durante mucho más tiempo”, y que “se acerca la Tercera Guerra Mundial”.   2. “Unos…