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11 de septiembre de 2024

Marchas frente al Congreso y en otras ciudades

A los jubilados veto, gases y palos

El miércoles 4 las organizaciones de jubiladas, jubilados y pensionados volvieron a manifestar frente al Congreso contra el veto presidencial al aumento de sus haberes. Las fuerzas represivas al mando de Patricia Bullrich volvieron a gasear y golpear a los manifestantes. La jornada se replicó en varias ciudades del país.

En CABA, las y los jubilados se concentraron frente al Congreso acompañados de organizaciones sindicales, movimientos sociales como la CCC y la UTEP, y partidos políticos, entre ellos nuestro PCR y su JCR.

Mientras dentro de la Cámara de Diputados el jefe de Gabinete Guillermo Francos mentía descaradamente sobre el plan económico, diciendo que los haberes jubilatorios aumentaron “en términos reales un 9%”, la Policía Federal, la Gendarmería, la Prefectura y la Policía de Seguridad Aeroportuaria desplegaban un violento operativo represivo en la calle.

Otra vez, como el miércoles 28, las fuerzas represivas golpearon con palos y escudos, y rociaron con gas pimienta, a manifestantes sin importar su edad.

Como denunciaron en el momento, con rociadores que valen más que una jubilación mínima, reprimieron en los alrededores del Congreso con el saldo de cerca de 30 afectados, incluso dos que tuvieron que ser trasladados a un hospital.

Frente a la represión, diputados opositores reclamaron que se levante la sesión, y ante la negativa oficialista, se retiraron y la dejaron sin quórum.

Francos, en su informe, defendió el veto presidencial diciendo que los que votaron el aumento de un 8,1% son irresponsables, y avanzó con el planteo de fondo de esta política genocida hacia los mayores, criticando la moratoria que permitió las jubilaciones de trabajadores a los que sus patrones no les hicieron los aportes.

La ministra Bullrich se jactó del operativo represivo, festejando los golpes y el ataque con gas lacrimógeno a los jubilados con un “¡Vamos a fondo contra los violentos!”. “Yo en patas y hambreado, soy la violencia. Ellos, armados, hablan de paz”, diría Rafael Amor.

 

Testimonios de jubiladas y jubilados frente al Congreso

Una compañera adulta mayor, María, de la zona sudoeste de CABA, que quiere jubilarse, nos decía: “nos presentan muchos inconvenientes para jubilarnos, no te anotan años que trabajaste. Yo ingresé en la CCC en el 2012, y a partir de ahí tengo los registros, pero me faltan de los años anteriores, y el tema de la moratoria viene muy complicado”.

De la misma zona, un compañero peruano, José, residente desde hace catorce años en la Argentina, cuenta que “yo no alcanzo a jubilarme ni tener pensión, porque no me alcanzan los años de residencia. Hay mucha gente en esta situación, y sólo les dan una pensión a los que tienen más de 20 años de residencia. Y esa pensión sabemos que no alcanza para nada.

Este presidente es un chanta, dice que hay superávit fiscal, que la inflación está en 4%, pero eso no se siente en la gente. Yo alquilo, y pago el doble, pagaba 20, ahora pago 40. Porque yo no puedo vivir en provincia, porque estoy en la cooperativa de la CCC, que me ayuda, y hago changas y estudio.

La compañera Graciela, de la Zona Norte de CABA, nos aseguró que “Los jubilados, hasta el año pasado, estábamos medianamente bien. A partir de que asumió este presidente, todo para peor. Yo soy jubilada y tengo que seguir trabajando. No tengo hijos chicos, pero tengo que pagar los impuestos, la comida. A mí nadie me regala nada. Quiero que esto se revierta. Mis pares se están muriendo. No tienen para la Sube, ni para los medicamentos, y no les dan los que les corresponde. Yo tomo 9 medicamentos. Estoy procesando un ACV, y me sacaron el medicamento principal. Nos sacaron el dentista, y yo no puedo ponerme los dientes que me faltan.

“Vine acá a ponerle el hombro a las jubilados, jubilados, y a todas las personas que también van a ser jubilados. Tenemos que ponernos la mano en el pecho y decir ¡Basta!, porque nos estamos muriendo, y no sólo los jubilados, también los niños”.

Osvaldo, del MIJP de la CCC de La Plata, nos dice en primer lugar que las y los jubilados están movilizando “por el veto que hizo este señor que tenemos como presidente, que daba un mísero aumento. Además, por el gran ajuste que viene haciendo. La canasta básica de un jubilado está arriba de 700 mil pesos, y un jubilado de la mínima, con el bono, gana 295 mil pesos.

Osvaldo, sobre los medicamentos, nos da el ejemplo: “Yo, con el 50% de descuento, pagaba un medicamento $8 mil. Ahora lo fui a buscar y me salió más de $20 mil. Una locura”.

Es un drama lo que estamos viviendo. En mi casa vivimos 9 personas. Tres niños menores. Y vivimos de mi jubilación mínima, de la pensión por invalidez que tiene mi compañera y lo que puede aportar alguna changa. Y tenemos que comprar entre 2 y tres kilos de pan, y duele hasta dar ganas de llorar que tenemos que mezquinar el pan a los niños.

Por eso hay mucha gente mayor viniendo a los merenderos y comedores. Aumentó en un 50% en estos ocho meses la cantidad de gente, y de eso entre el 30 y el 40% son adultos mayores. Y con el agravante que del gobierno nacional no mandan alimentos y los dejan pudrir en los galpones.

Más de un millón de chicos se van sin cenar a dormir. Por eso hay que seguir peleando, toda la vida, hasta que nos quede resto. No sé si voy a lograr el objetivo, pero es una enseñanza que le dejamos a los que vienen

Adela, compañera dirigente del MIJP CCC en la Multisectorial en Defensa de la Seguridad Social de CABA, le decía a nuestro semanario que “Movilizamos porque este señor no nos quiere dar ni 20 mil pesos. Eso es lo que se votó en el Congreso. Y lo vetó totalmente. Encima, han sacado la cobertura en medicamentos, que para nosotros implican gastos de 50 a 100 mil pesos todos los meses.

El 75% de los jubilados en septiembre va a cobrar 300 mil pesos, porque dan un bono congelado en $70 mil. Es realmente una miseria. Estamos haciendo fuerza para que diputados y senadores paren el veto y ratifiquen la ley.

Estamos movilizando con todos los sectores populares. Además estamos en una campaña por un millón de firmas contra el veto, y vamos a confluir el miércoles 11 con sectores de la CGT, las dos CTA, movimientos sociales y partidos, en una gran movilización. Y se está preparando una actividad para el 20 de septiembre, que es el Día del Jubilado, en la que participen todos, nuestros hijos, nuestros nietos, todo el pueblo.

Hay que pararle la mano a este gobierno, para poder dejar de ser pobres. Este señor le baja los impuestos a los ricos, permite el blanqueo de los que sacaron la plata del país, y a nosotros nos veta un aumento de 20 mil pesos.

 

hoy N° 2026 11/09/2024