Arnoldo Gómez: Hoy desocultemos lo que Macri plantea en su libro sobre política internacional. Tengamos en cuenta que él reafirma querer volver para continuar en un todo con sus posiciones.
Él sintetiza su política como una inserción inteligente en el mundo de la que pondera que dice que: “…separaba claramente una visión antigua de otra moderna y contemporánea” completando que: “lo fundamental es que hayamos dado el paso político que fue llegar a un acuerdo con todos los líderes de la Unión Europea”, y como su gran logro: “lograr el acuerdo entre el Mercosur y la Unión Europea”.
A partir de esto califica la ocupación colonial de nuestras islas como: “nuestras diferencias por Malvinas”, o sea nuestra lucha por la soberanía territorial la categoriza como “diferencias”. Para resolverlas plantea que “sin renunciar a ninguna de nuestras pretensiones [no soberanía sino pretensiones] incorporamos una nueva dimensión a la relación con el Reino Unido, definimos que el congelamiento de la relación con una de las naciones más importantes e influyentes nunca puede ser el mejor camino. Nuevamente se trató de la construcción de confianza a partir del diálogo como lo hicimos con el primer ministro Cameron en los primeros meses de mi gestión y que luego continuamos con Theresa May y Boris Johnson. Lo mejor de esta visión es que el diálogo generó resultados concretos, la cooperación y la mayor cercanía posible con las islas a través de los vuelos regulares, la reactivación de los mecanismos de diálogo sobre la pesca”.
Bueno, en realidad esto que Macri llama resultados concretos fue la firma de los acuerdos del 2016. Estuvieron los Acuerdos de Madrid que firmaron Cavallo y Menem que fueron la entrega. Pero los acuerdos del 2016 son también una gran entrega de soberanía, inclusive de presión para cualquier negociación, en este acuerdo se firmó lo siguiente: “la Argentina se compromete a las medidas apropiadas para remover los obstáculos que limitan el crecimiento económico y el desarrollo sustentable de la Islas Malvinas”. Este acuerdo incluye remover los obstáculos para el comercio, la pesca, la explotación de hidrocarburos. Inclusive plantea intercambiar información sobre la pesca, que hoy día es el principal ingreso económico que tienen las Islas.
De Renzis: ¿Quién firmó eso?
Arnoldo Gómez: Fue firmado por Cancillería argentina, el gobierno.
De Renzis: ¿Qué canciller lo firmó?
Arnoldo Gómez: Susana Malcorra.
De Renzis: Porque además ella llegaba con una intención para abrir puertas para ser secretaria en Naciones Unidas, usó la Cancillería argentina y la plata argentina para una posición personal y esto era una llave, porque con eso iba a tener no el veto de uno de los cinco países que podía vetar sino el apoyo. Estamos en un tiempo tan complejo y difícil que si no entendemos que la guerra imperial contra los británicos viene desde la independencia argentina, no vamos a entender nada. Es la novena invasión que hacen en el territorio patrio, no es que invadieron como se enseña en el colegio con las dos Invasiones Inglesas, nueve veces invadieron el territorio nacional.
Arnoldo Gómez: Y siempre arrebataron algo.
De Renzis: Cuando termines lo tuyo, vamos a poner un informe vinculado con el Paraná para continuar lo que hacíamos ayer con el autor de ese libro tan interesante que se hizo en Santa Fe, con documentación. Nos mandaron un video que vamos a escuchar porque es complementario de todo lo que estás hablando.
Arnoldo Gómez: Creo que además hay que tener en cuenta el nuevo contexto internacional porque en un sentido nos abre posibilidades si nos sabemos ubicar bien. Está el tema de que Boris Johnson anunció que aumentan un 45% las ojivas nucleares inglesas, decisión que viola el Tratado de No Proliferación Nuclear, es el primer aumento en 30 años, desde el año 1991 en que se desmembró la URSS, de armas nucleares.
De Renzis: Y van a tener el apoyo norteamericano como es su costumbre porque ellos nunca reniegan de la madre patria y mientras tanto están desesperados porque Europa no les da comercio, y con un gran trabajo de inteligencia británica, le han mandado al presidente uruguayo la propuesta para que el Mercosur haga negocios con Gran Bretaña. Por lo cual con los tres presidentes que son fieles a la política liberal, el de Brasil, Paraguay y Uruguay fue el encontronazo que tuvieron con Fernández.
Arnoldo Gómez: Inglaterra se ubica en el bando de Estados Unidos, pero juega la propia. Biden y Putin firmaron el tratado de no proliferación de armas estratégicas STASRT en febrero.
De Renzis: Pero no para ellos, para los demás.
Arnoldo Gómez: Esta decisión de Johnson tiene que ver con decirle a los yanquis “muchachos, llega Trump y se retiran de Europa”, yo no acepto limitar mi armamento a los tratados de ustedes.
De Renzis: Pero la madre patria es la madre patria, qué le van a decir a los ingleses. No hay encontronazo de las cancillerías norteamericanas con la inglesa.
Arnoldo Gómez: Está bien, no digo encontronazo. En la política argentina muchas veces se vivió sus diferencias. Cuando Estados Unidos vuelve, Inglaterra está mandando a decir “acá los duros fuimos los conservadores ingleses”.
Después que Trump planteó que no tenían por que seguir en guerras lejos de sus fronteras y a la OTAN que no seguían haciendo el gasto, ahora Biden dice “volvimos al tablero mundial”, Merkel contesta “nosotros seguimos con el gasoducto con Rusia” y Johnson dice: “China es una amenaza de sistema, pero se puede hablar”, pero “la amenaza activa es Rusia”. Al ampliar la ojivas es como diciendo: si Europa cae, resistiremos desde la isla, EEUU ahora vuelve, pero nos van a tener que tener en cuenta, hicimos el Brexit y vamos a jugar nuestro papel en el mundo. Las ojivas son para Gibraltar, Chipre, el océano Índico, Malvinas y Ascensión.
La pandemia sacudió el mundo. Cada uno afirma su juego. No sólo dos. Juegan China, EEUU, Rusia, Europa, Inglaterra. Y juega el Papa. Juega Irán. En este contexto la Argentina tiene que afirmar soberanía. Está lo del Paraná, y viene el fin de las concesiones del menemismo. Nos sacamos de encima a Macri y su entreguismo, no sólo es necesario impedir su regreso, sino que es posible aprovechar la situación y afirmar nuestro perfil soberano en el mundo.
