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14 de octubre de 2023

36° Encuentro Plurinacional de Mujeres, Lesbianas Travestis, Trans, Bisexuales, Intersexuales y No Binaries

Documento Apertura del 36º Encuentro Plurinacional

Con mucha felicidad por encontrarnos todas y todes otra vez; mujeres y disidencias del país y Latinoamérica; les damos la bienvenida a nuestro territorio; Bariloche Furilofche. Profundamente enorgullecides, podemos decir hoy que después de innumerables esfuerzos y debates, nos hemos fortalecido y de esta manera llegamos a un solo encuentro, el número 36.

El evento político más grande, masivo e histórico del país por lo que significa en cada una y une que participa, vuelve a ser uno solo. El 36 Encuentro Plurinacional de Mujeres, Lesbianas Travestis, Trans, Bisexuales, Intersexuales y No Binaries, es de todas y todes y reafirma en cada paso su carácter federal, plural, democrático, autónomo, horizontal, autosostenido, autoconvocado y plurinacional.

Delegaciones de todo el país llegan hoy a participar del 36 Encuentro en medio de una crisis económica y social muy profunda que golpea con la inflación y la carestía. Se hicieron miles de actividades todo el año para juntar peso por peso y somos conscientes de que muchas y muches no pudieron llegar hasta acá. Transitaremos un encuentro austero, pero fortalecido porque sigue siendo autosostenido como hace 36 años. Estamos seguras y segures de que será exitoso porque a pesar de las condiciones que nos toque vivir; lo organizamos, lo construimos y lo defendemos entre todas y todes.

Bienvenidas y bienvenides a Bariloche Furilofche, una ciudad emblema del turismo nacional, donde unos pocos manejan el negocio inmobiliario, los cerros y los dólares; una ciudad que nos divide territorialmente por clases sociales, donde se detiene a les pibes y pibas del Alto por portación de cara y en la que la policía de Río Negro acumula casos de gatillo fácil. Una región en la que las fuerzas de Seguridad matan a las y les pibes mapuche como Rafael Nahuel y Elias Garay, bajo el gobierno de Mauricio Macri con Patricia Bullrich como ministra de Seguridad.

Bienvenidas a la provincia de los paraísos naturales y el agua dulce en la que un magnate inglés como Joseph Lewis se adueña de un lago y miles de hectáreas en el Lago Escondido.

Compañeras y compañeres, no estamos acá en este territorio por una casualidad. El 4 de octubre de 2022, un violento operativo de desalojo a la comunidad Lafken Winkul Mapu de Villa Mascardi, que llevó adelante el Comando Unificado de Fuerzas Federales de Seguridad, comandado por el ministro de Seguridad Aníbal Fernández, se llevó detenidas a siete mujeres y niñes mapuches, solo por el hecho de defender su territorio ancestral. La indignación colectiva llevó a que el mandato de los dos Encuentros realizados en San Luis el año pasado, tanto en octubre como en noviembre, definiera que la sede del 36 Encuentro fuera Bariloche Furilofche y el pedido de unidad del movimiento de mujeres y disidencias.

Hoy, a más de un año de ese suceso que nos conmueve, el rewe no fue devuelto a la comunidad y aún no hay calma. En Río Negro, territorio en el que el genocida Julio Argentino Roca arrasó con una matanza a los pueblos originarios mediante la mal llamada “Conquista al Desierto” hace 145 años, sigue la política de persecución y criminalización al pueblo mapuche tehuelche por defender su territorio. Esa responsabilidad hoy le cabe en gran medida a la política del Gobierno Provincial de Arabela Carreras.

Una nueva mujer originaria es víctima de esta política, Yessica Bonefoi quien está detenida desde hace casi dos meses, ahora en prisión domiciliaria. En septiembre se realizó un juicio en su contra en los juzgados de Bariloche por un rasguño a una oficial de la policía en 2017, mientras reprimían a la comunidad donde mataron a Rafael Nahuel. Exigimos la derogación ya de la Ley Antiterrorista.

Esta situación particular y la de todas las mujeres y disidencias indígenas en conflicto territorial, nos indignan y es parte de la agenda de los feminismos durante los tres días del Encuentro. No solo los cientos de conflictos territoriales y de resistencia contra el avance del extractivismo y el saqueo de nuestros recursos naturales, sino la lucha contra la violencia y discriminación sufrida dentro y fuera de las comunidades, femicidios y desapariciones de hermanas que no se visibilizan.

Sabemos bien que en la unidad de nuestra diversidad, seguimos haciendo historia. Porque a partir de los encuentros y un recorrido de 35 años de historia; conquistamos leyes y derechos, logramos importantes triunfos, nos organizamos, armamos redes y campañas que nos impulsan en la lucha contra las desigualdades propias de nuestra sociedad patriarcal.

Venimos de un 2020 en el que tomamos las calles con más fuerza y surgió la marea verde, que conquistó el aborto legal, seguro y gratuito; por la salud de todas y todes, por el derecho a decidir. Venimos de tomar las calles nuevamente este 2023 en una inmensa jornada el 28 de septiembre para defender y ampliar estos derechos adquiridos, enfrentando a las derechas que pretenden barrer esas conquistas.

Defendemos la educación sexual integral y nos alertamos frente aquellos que plantean “con mis hijos no te metas” y que hablan de “ideología de género” negando así el derecho de las infancias. La Educación Sexual Integral (ESI) es una herramienta para defender a las infancias contra los abusos y atropellos.

La Ley del Aborto, la Ley de Educación Sexual Integral, el Cupo Laboral Travesti Trans “Diana Sacayán – Lohana Berkins”, la Ley Brisa y la Ley Micaela fueron conquistadas en las calles con una lucha inmensa de años precisamente gestadas en los talleres, el corazón de nuestros encuentros. Hoy reunides nuevamente acá, exigimos su plena implementación y le decimos a las derechas más peligrosas que pretenden gobernar a partir de diciembre, que no estamos dispuestas a dar ni un paso atrás.

Como parte del campo popular, nuestro movimiento inunda las calles, permea todos los espacios a partir de los debates que se plasmaron masivamente en la lucha por Ni una Menos, por el Aborto legal, así como continuamos organizadas y organizades en los masivos paros internacionales de mujeres como los 8 de marzo, y salimos a luchar en estos años exigiendo respuestas ante la violencia, la emergencia alimentaria, denunciando la precarización laboral.

El encuentro nos abraza a todas y todes y aquí respetamos nuestras creencias, religiosidad y espiritualidad. Sin embargo, seguimos exigiendo la separación de la iglesia del Estado.

Llegamos a este Encuentro en una Argentina donde el 42% del pueblo vive bajo la línea de la pobreza. 18,5 millones de personas, en especial las mujeres y disidencias; vivimos en condiciones de pobreza, víctimas de hambre, ajuste, devaluación y entrega.

Trabajadoras, trabajadores, campesinas, campesines, originarias, estudiantes, amas de casa, profesionales, emprendedoras, emprendedores, desocupadas, precarizadas y precarizades, padecimos las políticas antipopulares del macrismo, la pandemia de coronavirus y hoy, el ajuste y sometimiento del Fondo Monetario Internacional al que nos sometió el gobierno de Mauricio Macri. La crisis y el ajuste que impone el acuerdo con el FMI avalado por el Gobierno Nacional de Alberto Fernández, nos somete y golpea más fuerte a las mujeres y disidencias.

Por eso decimos que la deuda es con nosotras y nosotres; y que la paguen quienes se la fugaron. Pero no lo decimos desde una postura tranquila y pasiva, lo decimos mientras miles de mujeres y disidencias de todo el país seguimos luchando por aumento de salarios, condiciones de trabajo, por llenar la olla, por techo, tierra y trabajo, por sostener comedores y merenderos, por la defensa de la educación y la salud pública integral y por la crianza de nuestros hijes.

Mientras, crece el hambre y la miseria, crece la precarización laboral, las economías regionales están quebradas, todos los días cierra una Pyme o un comercio. Los sistemas públicos de Salud y Educación son castigados con el bajo presupuesto, los salarios muy por debajo de la canasta básica, la falta de insumos y materiales y el abandono de hospitales y escuelas.

Las consecuencias de estas políticas sobre nuestras vidas se expresan en la feminización de la pobreza, en niñas madres, en la violencia machista cotidiana y acrecentada día a día, en las muertes por abortos clandestinos, en los feminicidios, los travesticidios, los transfemicidios e infanticidios, en la falta de respuestas del Estado y todos los tipos de violencias por razones de género.

Según datos estadísticos, de enero a julio se registraron 175 femicidios y 4 transfemicidios/travesticidos, en seis meses. Siete femicidios ocurrieron en la provincia de Neuquén y dos en Río Negro, Marisa Coliman de Luis Beltrán y Silvia Cabañares en Balsa las Perlas. Seguimos reclamando porque cada 29 horas, nos matan en Argentina, por el solo hecho de ser mujeres y disidencias. Más aún luego de saber que 38 víctimas habían realizado al menos una denuncia y 25 tenían medidas de protección. El 54% fueron cometidos por parejas o exparejas de esas víctimas.

Es alarmante la cantidad de intentos de femicidio que alcanzaron los 418 en lo que va del 2023. El rol de la justicia sigue siendo predominantemente patriarcal y machista, revictimizante contra nosotras y nosotres y la lucha por fallos y condenas ejemplares con perspectiva de género, no cesa.

La violencia ginecobstétrica es un tipo de violencia de género. La ejerce el sistema médico sobre la mujer y personas gestantes; y responde a las necesidades del sistema patriarcal de ubicarnos en un lugar de sumisión, domesticación y entrega.

Seguimos peleando para que se cumplan las Leyes vigentes 25.929 y 26.485; que se haga un relevamiento sobre la atención ginecobstétrica; que se apruebe la ley que pide la formación obligatoria del personal de salud en lo parámetros de la Ley de parto Humanizado y libertad a las compañeras presas por eventos obstétricos.

Desde la comunidad travesti trans decimos presente en este 36 Encuentro para dar visibilidad a nuestras luchas e historias en un momento político donde es imprescindible unirnos y defender nuestros derechos conquistados. Estamos acá para encontrarnos y exigir también una reparación histórica por parte del Estado argentino para todas las identidades Travestis Trans mayores de 40 años que han sido perseguides y violentades sistemáticamente tanto en dictadura como en democracia.

Necesitamos que se respeten y se implementen de forma efectiva las leyes conquistadas. La ley de Identidad de género, el cupo laboral trans y reclamamos por una vivienda digna. Reclamamos la Ley Integral Trans ya. Apelamos a que las nuevas generaciones sean quienes porten nuestra voz con memoria, para garantizar que no se repita nunca más lo que lxs adultxs mayores Travesti Trans tuvimos que padecer en un estado sin derechos.

A 30 meses de la desaparición de Tehuel nos urge saber, ¿Dónde está? Su búsqueda es de todas y todes porque tiene que ver con una larga lista de vidas que se perdieron. Exigimos aparición con vida ya de Tehuel de la Torre.

Las mujeres y disidencias que vivimos con VIH expresamos nuestra preocupación ante el avance de las derechas porque con ellas, nuestros derechos retroceden. Seguimos luchando porque cada persona que vive con VIH SIDA tenga acceso al tratamiento de antirretrovirales y para terminar con el estigma que hoy sigue vigente. Luchamos por las personas que no son visibles y por el derecho a una vida digna.

Transitar por las calles de Bariloche es aterrador. Para les usuaries de silla de ruedas, las veredas son intransitables, para las personas ciegas es peligroso. Faltan rampas y es pésimo el estado de las veredas.

El transporte público no es accesible a pesar de un fallo judicial de 2017 establecía incorporar unidades adaptadas. La falta de accesibilidad limita nuestra participación y el acceso a otros derechos.

Por el cumplimiento pleno de la Ley Nacional de Salud Mental y Adicciones 26.657 con presupuesto acorde para su implementación efectiva. Cierre de manicomios y creación de dispositivos comunitarios para la inclusión social y la atención integral de la salud. El encierro no cura.

Basta de estigma y discriminación a las personas con padecimiento mental y consumos. Por un feminismo y transfeminismo anticapacitista.

Hoy, así como hace 40 años, levantamos las banderas de las Madres y Abuelas de Plaza de Mayo en su lucha por restituir a sus legítimas familias todas las niñeces desaparecidas por la última dictadura argentina.

Luchadoras incansables, ellas son ejemplo de la resistencia popular más grande aún hoy frente a sectores que reivindican la dictadura genocida. A ellos les decimos: son 30.400. Memoria, Verdad y Justicia.

El año pasado asistimos a un hecho inédito en el país, el intento de femimagnicidio de Cristina Fernández y el accionar de la Justicia Patriarcal en la investigación del hecho, que repudiamos. En este momento, desde el movimiento de mujeres y disidencias volvemos a decir: ninguna mujer muerta por militante política.

En este territorio, surcado por el intento de avanzada extractivista, las mujeres y disidencias ponemos cotidianamente el cuerpo y resistimos a la megaminería y los proyectos de saqueo y contaminación. Tenemos memoria, hace doce años derogaron la Ley Anticianuro que protegía a la provincia de la minería.

Hoy las comunidades mapuche de la Línea Sur de Río Negro decidieron cerrarle las tranqueras a las mineras. Desde hace 20 años, desde Esquel a Jacobacci en la Patagonia seguimos gritando ¡No es No! y denunciamos la criminalización de las compañeras y compañeres de las asambleas socioambientales.

El ataque a la soberanía sobre nuestros recursos estratégicos, el saqueo y la depredación de las grandes potencias son parte de la política del gobierno provincial de Río Negro. Ejemplo de eso es “Hidrógeno Verde”, un proyecto que concedió 625.000 hectáreas fiscales por 50 años a empresas extranjeras para el saqueo de energías renovables. La entrega más importante de los últimos tiempos. El enclave estará ubicado a 35 kilómetros de Sierra Grande, donde está el aeropuerto de Joe Lewis, y a 90 minutos de vuelo de las islas Malvinas.

Luego de una brutal represión en Jujuy, la lucha sigue. Mujeres originarias y el pueblo entero se alzó contra la reforma constitucional de Gerardo Morales quien busca profundizar el ajuste y la criminalización de la lucha. De fondo, quieren entregar los recursos estratégicos como el litio en territorios donde habitan las comunidades. Levantamos con fuerza esa lucha de las hermanas y hermanos jujeños, que se convirtió en un faro y motor de movilizaciones a lo largo y ancho del país. ¡Arriba los salarios y abajo la reforma!

En Río Negro sucede algo similar. Las comunidades mapuche de la zona de Mamuel Choique resisten al avance y el saqueo de sus territorios a partir de que el Gobierno de Río Negro, a través de la Secretaria de Minería, otorgara permisos de cateo y exploración de litio. En Río Negro también decimos no a la megamineria y extracción del litio sin estudios de impacto ambiental, entregando nuestros recursos estrategicos.

El extractivismo es una política económica corriente en este territorio, que destruye nuestros recursos naturales, explota y contamina nuestros territorios, ríos y lagos. Por la defensa del Golfo San Matías, la Península Valdés y de todo el mar argentino. Queremos un mar libre de petroleras. A los gobiernos y las empresas que intentan avanzar con audiencias truchas, a espaldas del pueblo y ante la entrega que pretenden hacer con la terminal portuaria entre Vaca Muerta y Sierra Grande, les decimos. ¡No al oleoducto y al puerto petrolero! ¡Que el pueblo decida todo!

Transitamos profundos debates como movimiento, pero nos une saber y sabernos dentro de este espacio único en el mundo que es nuestra herramienta, nuestro emblema de lucha y construcción colectiva y en tiempos donde las derechas que quieren gobernar nos proponen viejas recetas de ajuste y entrega. Por eso, a los Encuentros debemos defenderlos mucho. Porque en ellos nos unimos y avanzamos en hitos históricos y derechos irrenunciables. A través del tiempo enfrentamos todas las crisis que cargaron sobre nuestras espaldas.

Por la memoria de nuestras ancestras, las abuelas mapuches, por las luchas de nuestros pueblos contra el genocidio indígena, por el fortalecimiento de las alianzas entre mujeres y disidencias, por la autonomía de nuestros cuerpos y territorios, ¡bienvenidas y bienvenides!

El encuentro es de todas y todes.