Comenzamos conversando con el compañero Penayo sobre el resultado de las PASO, y las opiniones que hay en la fábrica. “Creo que el resultado del 12 de septiembre fue sorpresa para algunos. Nosotros en Pacheco, como notamos que había mucho silencio con el tema de las elecciones, salimos a encuestar a las compañeras y compañeros. No al sector más cercano, con el que siempre discutimos política. Nos sorprendieron algunas opiniones. Un compañero de una tercerizada de limpieza, que gana $35 mil, dijo que votaba a Juntos por el Cambio. En una sección, de diez que encuestamos, dos dijeron que votaban al Frente de Todos, dos a Juntos por el Cambio, y seis no tenían decidido el voto. Ni siquiera estaban al tanto de las elecciones. Esto el jueves anterior a las PASO. Lo más probable es que la mayoría de estos seis ni haya ido a votar, o votaron otras opciones. Por eso subió el voto en blanco, a Espert o al FIT.
“Ya con el diario del lunes, averiguando un poco más acerca de los motivos del voto en contra del gobierno, vas escuchando que hay muchas necesidades concretas que el gobierno no tuvo en cuenta, y que por ahí nosotros tampoco lo veíamos. Esto también lo vimos en el barrio. Una vecina me dice “Hace dos años voté al Frente de Todos porque estaba sin trabajo. Y ahora sigo sin trabajo. Te entiendo que pasó todo lo de la pandemia, pero yo tengo una nena y necesito trabajo”. Esta vecina tuvo el IFE, y después se quedó sin nada.
“El otro gran tema, que nosotros veníamos planteando en la fábrica, es el crecimiento de la inflación. Y dijimos varias veces que si el gobierno no corregía, esto iba a tener consecuencias políticas.
“Hablando con algunos jubilados, te dicen que no fueron a votar. Porque no recibieron nada, y tienen salarios de indigencia. También este compañero de Limpieza que comenté tiene un salario casi de indigencia. Si esto se combina con la alta inflación, la gente no quiere más esto.
“Además, en la fábrica aparece otra cuestión. Entre las compañeras y compañeros que tienen salarios más altos, volvieron a tener descuentos del impuesto a las ganancias, 6 mil, siete mil, hasta diez mil pesos a algunos.
“El gobierno hizo parches, y no alcanzaron las cosas buenas que hizo con la pandemia. A esto súmale los bloopers que se mandó, con la fiesta en Olivos y otras cosas, todo eso sumado terminó en la piña que le dio el pueblo en las PASO.
“Creo que se puede revertir este resultado, pero tiene que salir con un plan económico que tiene que inyectar plata, y resolver el tema del trabajo para los pibes fundamentalmente”.
Avanza la campaña de la Celeste y Blanca
Penayo agrega que: “En ese marco, estamos en la campaña por las elecciones del STIA, que son el 29 de septiembre. Hemos pasado la primera etapa, hasta las PASO, en la que planteamos golpear al macrismo con el Frente de Todos. Ahora, como Celeste y Blanca, la discusión que entendemos que hay que dar es con quién avanzamos, con quién retrocedemos, y cómo avanzamos. Entendemos que en el espacio del Frente de Todos es donde tenemos que discutir cómo avanzar, porque tenemos al macrismo enfrente. Que ya envalentonado sale a pedir que se eliminen las indemnizaciones a los despidos y quiere avanzar sobre nuestros derechos como trabajadores.
“Y acá viene el debate de qué sindicato necesitamos para unir a todas las trabajadoras y trabajadores de la alimentación. Porque se vienen momentos tormentosos, y necesitamos un sindicato que pueda unir a todos y enfrentar el embate macrista, y para discutir dentro del espacio del Frente de Todos nuestras reivindicaciones.
Un sindicato que permita discutir la implementación de cuatro turnos de seis horas sin rebaja salarial, los convenios colectivos y una cantidad de cuestiones de cada una de las empresas.
“Estamos recorriendo algunas fábricas de la zona norte del Gran Buenos Aires. Estamos teniendo muy buena recepción, y también en nuestra fábrica, en Mondelez Pacheco. Hay un aliento constante a la Celeste y Blanca.
“Nosotros partimos de que la Celeste y Blanca quiere generalizar el recorrido que venimos haciendo desde hace seis años en la Interna de Mondelez Pacheco, tanto en la lucha durante los años de gobierno macrista como en la pandemia. Estamos teniendo buena recepción en las empresas, y tenemos que redoblar la campaña para seguir recogiendo los reclamos de los compañeros.
“Nuestra intención es dirigir el gremio, y sabemos que es una pelea larga, no es de un día para otro. En segunda instancia podemos pelear tener la minoría entre los congresales. Porque en esta elección se elige el Consejo Directivo y Secretariado del STIA, que integra la lista ganadora, y congresales titulares y suplentes, donde hay representación por la mayoría y por la minoría, si supera el 20% de los votos.
“Nosotros pensamos que los congresales tendrían que ser los que lleven los problemas concretos de los afiliados, como la Obra Social, el turismo, el deporte, etc. Hoy la actual dirección del STIA hace funcionar a los congresales como delegados gremiales dentro de la fábrica, y así les cambia el rol. Por supuesto para no pelear que se elijan delegados en las empresas. Hoy los congresales se dedican en los plenarios a avalar lo que dice Daer. Así no se fortalece el sindicato.
“Planteamos que en esta etapa hay una gran discusión política entre las trabajadoras y trabajadores del gremio. Y hay tres caminos. Está la actual dirección, que ya conocemos, la Lista Verde que conduce Rodolfo Daer, que ha conciliado en cada momento. Está la Bordó, parte del PTS, que también la conocemos, con esa línea sectaria que han fracasado en varios conflictos como en Lear y Pepsico, y perdió las Internas de Mondelez Pacheco y Mondelez Victoria.
“Y está la Celeste y Blanca, desde la que planteamos que hay que unificar a todas las vertientes del movimiento obrero con sus diferentes ideas políticas, y a todos los sectores: los jóvenes, los antiguos, las mujeres. Y en eso venimos haciendo una práctica los de la Celeste y Blanca en Mondelez Pacheco, que queremos volcar en todo el gremio para tener un STIA fuerte y de todos los trabajadores”, finaliza Penayo.
Hoy N° 1882 22/09/2021
