El pasado viernes 2 de marzo, la Plaza 25 de Mayo fue poblándose lentamente hasta que no quedó un solo espacio libre, 15 mil riojanos se movilizaron para hacer oír el clamor popular. Llegados desde todos los rincones de la provincia, a pulmón, por sus propios medios, organizándose entre las familias, los amigos, los vecinos, los compañeros de trabajo, llegaron como pudieron para hacer escuchar su voz: la voz de un pueblo que se puso de pie y que no está dispuesto a dar un paso atrás.
A metros de la plaza, Beder Herrera ratificaba la intención de su gobierno de seguir adelante con OSISKO en la explotación del Famatina. Luego del discurso de la presidenta, el gobernador vuelve a arremeter en su intención de conseguir el contrato social que el pueblo de La Rioja no está dispuesto a darle.
Aprietes e intimidación
Llamados telefónicos intimidatorios, cambios de puestos de trabajo, amenazas de despidos, docentes que fueron enviados a limpiar los baños, son algunos de los métodos utilizados para quebrar la voluntad de los riojanos.
En febrero al pueblo de Chilecito le quisieron robar el carnaval. Con la excusa de que en el "topamiento" se enfrentaban dos grupos barriales, los antimotines de la policía de la provincia aprovecharon para actuar, reprimiendo con balas de goma y gases a los que estaban festejando. La indignación y la certeza de que la presencia de los antimotines tenía que ver con la lucha que están llevando adelante, los presentes se unieron al grito de "el Fama no se toca" haciendo retroceder a la policía. Para la mayoría del pueblo de Chilecito era la primera vez en su vida que veían actuar este cuerpo especial de represión. Al día siguiente se anunciaba oficialmente la suspensión del carnaval.
Fracasó la contramarcha
Durante los días previos, los medios de comunicación anunciaban la contramarcha organizada desde el gobierno provincial. Luego, ante el inminente fracaso, el gobernador dijo que esa movilización era porque se inauguraban las sesiones parlamentarias y no una contramarcha. Apretaron a los empleados públicos con amenazas de despido (algunos firmaron la planilla y luego se fueron), repartieron subsidios, becas y promesas de puestos de trabajo. Nada a lo que no nos tengan acostumbrados, pero esta vez fracasaron: no más de 1.500 personas "acompañaron" al gobernador.
Un largo camino recorrido y por recorrer
Es largo el camino recorrido para llegar a donde hoy estamos, y será más largo aún el que tenemos por delante los argentinos para hacer retroceder a los gobiernos provinciales y al nacional en su política de entrega de los recursos naturales y de contaminación de nuestro medio ambiente, regalando las riquezas de nuestra patria a las potencias imperialistas e hipotecando el futuro de nuestro pueblo.
Las empresas imperialistas de la mano del gobierno nacional han venido a desbastar la columna vertebral de nuestra América Latina. Los pueblos cordilleranos están dispuestos a impedirlo.
