La jubilación por moratoria, conocida también como jubilación para amas de casa desde el año 2006 benefició a más de 1,8 millones de mujeres en Argentina.
Este derecho que las mujeres conquistamos en las calles, y desde los inicios de los Encuentros Nacionales de Mujeres, a partir de julio de este año, va a ser dado de baja porque Mauricio Macri -cumpliendo las órdenes de ajuste del Fondo Monetario Internacional- no renovará el derecho a jubilarse, sin haber aportado previamente.
Sin embargo, las mujeres, quienes sufrimos la doble -incluso en algunos casos, triple- opresión, le haremos frente a esta política hambreadora, que pretende hacernos pagar con ajuste.
El trabajo doméstico todavía representa la base fundamental de la desigualdad entre los géneros, pero además entre las clases sociales, ya que somos las mujeres las que estamos al frente de la mayoría del trabajo de limpieza y cuidado en nuestras casas o en las ajenas, y encabezamos la lista de precarizadas: trabajo de medio tiempo, sin contratos sin aportes, obra social o beneficios en general.
La realidad es que las mujeres accedemos al mercado laboral terminamos realizando doble jornada, y que en promedio hacemos el 76% de las tareas. Nueve de cada diez mujeres (88,9%) participamos en el trabajo no remunerado de la Argentina. Cuatro de cada diez varones no cocinan ni limpian, ni lavan la ropa, ni hacen compras en ningún momento del día.
La desigualdad de género en nuestro país se suma a la desigualdad de las clases sociales a las que pertenecemos. Y el gobierno de Mauricio Macri, cumpliendo con los pedidos del FMI está dispuesto a profundizar los sufrimientos de nuestro pueblo y en particular el de nosotras.
La medida del gobierno nacional pondría fin a la moratoria que permite el ingreso al sistema previsional a personas que no tuvieron posibilidad de cumplimentar sus aportes. Esto significaría un retroceso, en particular, para las mujeres que desempeñan tareas en su hogar, trabajadoras domésticas, trabajadoras informales que pudieron acceder a la jubilación a través de la mencionada medida.
Este 3J, en Santa Fe, las mujeres se están autoconvocando para salir todas a las calles, a luchar por nuestros derechos y para decirle a Mauricio Macri: ¡No estamos dispuestas a regalar nuestro presente ni nuestro futuro!
Hoy N° 1767 22/05/2019
