1. Crecen las luchas por las necesidades populares
La inflación sigue castigando al pueblo. En agosto rondaría nuevamente el 7%, y la inflación anual estaría por encima del 90%.
El salario mínimo será, desde el 1° de septiembre, de $51.200, en octubre $54.550 y en noviembre $57.900. Es menos de la mitad de la canasta básica. Lo mismo pasa con los salarios de la mayoría de los trabajadores precarizados o en negro, las jubilaciones, las pensiones y los planes sociales.
En esa situación, las medidas del gobierno se concentran en recortes de los fondos públicos para cumplir con lo acordado con el FMI.
En el área educativa en total recortaron $50.000 millones: a Conectar Igualdad $30.000 millones, Fortalecimientos de Jardines Infantiles $15.000.000, Infraestructura y Equipamiento $5.000 millones. Conectar Igualdad, Prevención y Control de Enfermedades Transmisibles tendrán un recorte de $210 mil millones. El Ministerio de Obras Públicas un recorte de $ 20.000 millones, Transferencias a Instituciones Provinciales y Municipales $4.000 millones. Otros 5.000 millones por transferencias a gobiernos para “Recursos Hídricos”, De este recorte, $128.000 millones serán usados para pagar deudas del Tesoro Nacional.
En septiembre se empezarán a sentir los efectos de la suba de las tarifas de luz y gas.
Creció el descontento y en las masivas jornadas nacionales de lucha del 7 y el 17 de agosto el pueblo en las calles dijo: ¡Así no! Avanza por abajo la unidad enfrentando el ajuste.
Las luchas docentes vienen conmoviendo provincias como Mendoza, Chubut y Santa Fe. Sigue el plan de lucha de la Conadu Histórica. Los obreros de Mondelez Pacheco, con su Comisión Interna a la cabeza, están en alerta y en comunicación permanente por sus reclamos.
Después de la movilización de los trabajadores siderúrgicos al edificio “Catalinas” de Techint, el viernes 26, la UOM acordó un aumento de 20 puntos adicionales con cláusula de revisión para este sector. El salario conformado se va a discutir planta por planta, con lo que continuará la lucha en cada fábrica.
El 2 de septiembre se realizará en Ensenada el acto en defensa del Astillero Río Santiago y por el cese de la persecución judicial a dirigentes gremiales, sociales y políticos, convocado en el plenario regional de delegados realizado en julio.
El 26, 27 y 28 de agosto se realizó en Jujuy una reunión de la Mesa Nacional de la Federación Nacional Campesina, donde se discutió la difícil situación que vive el campesinado pobre y medio. Se acordó la continuidad de las medidas de lucha: “1.000 Ferias de la Agricultura Familiar” con actos del 5 al 10 de septiembre y Jornada Nacional Campesina, de la Agricultura Familiar y las Economías Regionales el 6 de septiembre.
Este lunes 28 el PCR, la CCC y otras organizaciones nos movilizamos a la Fiscalía de Vicente López al cumplirse cinco años del atentado impune a Julia Rosales, secretaria del PCR de zona norte de CABA y coordinadora de la CCC zonal.
Se avanza en la unidad para la lucha por resolver las emergencias, por paritarias, por tierra, techo y trabajo y en defensa de nuestra soberanía. Dándole continuidad a las luchas por nuestros derechos y desde las calles enfrentamos las provocaciones destituyentes del macrismo y sus socios, y los ataques de su rosca judicial para volver a ser gobierno.
2. La deuda es con el pueblo
Después del acuerdo con el FMI avanzaron con su política extorsiva los grupos concentrados de los terratenientes, los monopolios agroexportadores, petroleros, mineros, los bancos y los monopolios de la alimentación. Aprovechando la necesidad de dólares del gobierno para cumplir el acuerdo con el Fondo, siguen logrando concesiones y aumentan cada vez más sus ganancias.
Esos sectores oligárquicos, en defensa de sus intereses, quieren frenar el crecimiento de las luchas y el avance del protagonismo popular.
Por eso sus representantes políticos, expresados en el macrismo y otros, operan aceleradamente con el objetivo de dividir para aislar y sacar de las calles a los movimientos sociales y sindicales.
En una causa sin ningún sustento jurídico allanaron 23 domicilios de la CCC en San Martín, La Matanza y CABA. En Jujuy, por antojo de un fiscal del gobernador Morales, se allanaron a las organizaciones sociales. En Mendoza, gobernada por Juntos por el Cambio (JxC), se encarceló dirigentes de ATE por “interrumpir el tráfico”. En Chubut se condenó judicialmente al dirigente docente Santiago Goodman, ex secretario del gremio Atech. Están procesados dirigentes camioneros de San Nicolás. Patricia Bullrich y Florencia Arietto, del sector más reaccionario de JxC, están detrás de la creación del “Movimiento Empresarial Anti Bloqueos” (MEAB), grupo de choque antisindical que denunció a decenas de dirigentes, sindicatos y organizaciones sociales.
Ahora la rosca judicial macrista avanzó en las acusaciones por “asociación ilícita” contra la vicepresidenta Cristina Kirchner. El fiscal Diego Luciani pidió 12 años de prisión para la ex presidenta. Cuando el fiscal hizo la acusación y la ex presidenta no pudo declarar en su defensa, sí lo hizo a través de los medios, acusando al fiscal y a los jueces de parcialidad, estar al servicio de Macri y perseguirla no solo a ella sino a todo el peronismo.
El conjunto de la dirigencia peronista y del Frente de Todos condenó la maniobra macrista. Hubo concentraciones en las calles de todo el país para apoyarla frente al ataque gorila de esta mafia judicial.
En la movilización en CABA, el jefe de gobierno Rodríguez Larreta valló la zona del domicilio de Cristina Kirchner, montando un brutal dispositivo represivo. La represión no tardó en llegar, pero no logró impedir que se multiplicara la llegada de personas hacia la casa de la vicepresidenta.
No faltó la provocación de Mauricio Macri, que dijo: “Envío mi apoyo a las fuerzas de seguridad y al Gobierno de la Ciudad”. Él, Macri, que ejecutó, junto al FMI, Trump y la oligarquía financiera el robo de 40.000 millones de dólares, que la mafia judicial se niega a investigar.
La persecución judicial a la vicepresidenta Cristina Kirchner y el pedido de juicio político a Alberto Fernández es parte del plan del sector más reaccionario de las clases dominantes, el macrismo, su aparato en la Justicia y los multimedios que lo promocionan, para adueñarse del gobierno antes o con las elecciones.
Tenemos diferencias profundas con la vicepresidenta. Nunca las ocultamos. Diferencias sobre su política cuando fue gobierno y en particular hoy con la política en la que coincide con el presidente Alberto Fernández y el ministro de Economía Sergio Massa. En que lo primero es “estabilizar la economía” y después vemos, así se acepta que se siga descargando el peso cada vez más brutal de la crisis sobre la clase obrera y el pueblo.
Golpeamos juntos con estos sectores dirigiendo el golpe principal de la lucha popular a la derecha reaccionaria que expresan el macrismo y sus socios. Sabemos que tras estas maniobras se mueve la mafia judicial macrista. Es la misma justicia que se mueve aceleradamente para dividir y acabar con los movimientos sociales y perseguir a los dirigentes sindicales.
Los que piensan que ahora es el momento de enfrentar esa derecha reaccionaria y lo separan de la lucha contra el ajuste se equivocan.
Seguimos peleando la confluencia de las luchas para imponer desde las calles que la crisis la paguen ese puñado de oligarcas que se la está llevando en pala, romper el acuerdo con el FMI y enfrentar las maniobras macristas.
3. Más de 6 meses de invasión rusa a Ucrania
La guerra imperialista de Rusia contra Ucrania entró en su séptimo mes. La orden de Putin de reclutar 137.000 soldados para ir a la guerra demuestra que las tropas invasoras no fueron suficientes y que las pérdidas son grandes. Con esos reclutas el ejército ruso sumará 1.150.000 integrantes.
El ejército ruso convirtió la central nuclear de Zaporiyia en una base militar. El fuego cruzado hace crecer el peligro de un accidente nuclear.
El presidente de Estados Unidos, Joe Biden, anunció el miércoles pasado, que Estados Unidos enviará a Ucrania una nueva partida de armas de última generación por 3 mil millones de dólares.
En Europa se complica la situación por las restricciones en la llegada de gas ruso. En Alemania se pronostica una recesión de su economía para el invierno europeo.
El ex presidente ruso, Dmitri Medvédev, pronosticó este domingo un precio de 5.000 euros por cada mil metros cúbicos de gas para finales de este año. Hoy está en 3.500 euros.
Se desacelera la economía mundial. La gigantesca deuda global, pública y privada, supera largamente el Producto Bruto mundial. Lo que amenaza con una “estanflación”: crisis económica con inflación. Esto arranca en los países imperialistas, y lo descargan en los países dependientes como el nuestro.
Con la profundización de la crisis crece la disputa imperialista y avanzan los peligros de una guerra mundial.
Cada vez que Estados Unidos entró en crisis buscó salir con guerras. El anterior presidente yanqui, Trump, amenazó con salir de la Organización del Tratado del Atlántico Norte (OTAN) si los países que lo integran no pagaban sus cuotas. Biden, por el contrario, revitalizó a la OTAN, incluso sumando nuevos países como Suecia y Finlandia.
Por su parte, China y Rusia consolidan su alianza, en donde Rusia le garantiza a China el abastecimiento de gas y petróleo. China avanza en el fortalecimiento de su fuerza militar y sus operaciones en el Indo-Pacífico, amenazando con una guerra por la isla de Taiwán. Y avanza con su expansión global mediante la llamada “Ruta de la seda”.
Esta situación de crisis económica con preparativos de guerra imperialista y la rebelión de los pueblos tiñe toda la situación mundial, de América latina y de Argentina.
En esa disputa en América Latina los yanquis han retrocedido, en primer lugar por la rebelión de los pueblos que derrotaron sus gobiernos amigos. También por el avance de otros sectores imperialistas, principalmente chinos y rusos, que se van asociando a sectores de las oligarquías nativas.
El 2 de octubre son las elecciones en Brasil donde es probable que Lula derrote al fascista Bolsonaro. Son elecciones muy importantes para la región. Bolsonaro ya empezó a denunciar fraude y apoyado por sectores de las Fuerzas Armadas, amenaza con desconocer el resultado en caso de ser derrotado
En este escenario los yanquis vienen jugando activamente para desestabilizar a los gobiernos que no le son afines en la región y juegan fuerte en Argentina.
Urge la necesidad de avanzar en la lucha auténticamente antiimperialista que afirme nuestras soberanías con una política independiente del imperialismo yanqui y de las otras potencias que hoy se disputan nuestro continente.
4. La garra imperialista y el macrismo
Las maniobras macristas tuvieron apoyo internacional. El senador del Partido Republicano yanqui, Ted Cruz, instó al Departamento de Estado a imponer sanciones contra la vicepresidenta Cristina Kirchner. En sintonía con estas expresiones, los diputados de JxC piden juicio político para destituir a Alberto Fernández.
El diputado radical, Facundo Manes, se negó a firmar ese pedido.
Elisa Carrió salió con munición gruesa dirigida a la presidenta del Pro, Patricia Bullrich, a quien acusó de haberla espiado. Viene de denunciar las relaciones de miembros de Juntos por el Cambio, vinculando al diputado Ritondo con el sector de la policía asociado al narcotráfico, cuando era ministro de Seguridad de la provincia de Buenos Aires.
El reaccionario López Murphy se sinceró mostrando las garras: “Son ellos o nosotros”.
Marcos Galperín, figura de Mercado Libre, empresa dominada por los bancos y fondos yanquis, fue uno de los asistentes al “coloquio de IDEA”, donde Macri afirmó que hay que hacer la reforma laboral y la previsional, que quiten los derechos conquistados, en 90 días. El millonario declaró que: “Las personas despedidas, rápidamente encuentran nuevos empleos”. Estos oligarcas que se burlan de millones que sufren la desocupación, son parte del plan macrista para una reforma laboral contra el movimiento obrero.
Las garras imperialistas y sus títeres como Galperín, son insaciables. Mercado Libre en el primer semestre de 2022 aumentó sus ganancias 65%: 590 millones de dólares. Es la empresa de mayor valor en la Argentina: 44.820 millones de dólares en la bolsa de Wall Street ¡Y hace campaña para acabar con las indemnizaciones por despidos y con las paritarias!
5. Acumular fuerzas para una salida popular
Mientras la gran mayoría de la clase obrera y el pueblo sufre una situación cada vez más difícil, un puñado de terratenientes y monopolios imperialistas se están enriqueciendo como nunca.
Los responsables de esta situación que vivimos son esa minoría que vive y se enriquece a costa del pueblo y de la patria; saquea nuestras riquezas y nos somete a deudas impagables con el FMI y otros usureros imperialistas.
Sectores importantes de las masas obreras, campesinas y populares vienen librando grandes luchas en todo el país y van siendo protagonistas de la política.
Son masas que no esperan, que aprendieron que si no salen a la lucha “no existen”. No quieren delegar y buscan formas organizativas y de democracia directa que les permita avanzar en su protagonismo.
Partiendo de ponernos a la cabeza de la lucha por las necesidades más urgentes de esas masas, impulsamos entre ellas nuestra línea, peleando la unidad de las fuerzas obreras, populares, nacionales y democráticas para derrotar a estos oligarcas.
Para eso es clave la recuperación de los cuerpos de delegados y comisiones internas en los centros de concentración decisivos obreros y campesinos; en los barrios, entre los estudiantes, los intelectuales, los trabajadores de la cultura, los originarios, las mujeres, los jóvenes, etc.
Somos comunistas revolucionarios y como tales reafirmamos que sigue teniendo vigencia la necesidad de la revolución en la Argentina. Estamos orgullosos del papel que venimos jugando en las luchas y en la política nacional, porque avanzamos. Y nos proponemos fortalecer al PCR y su JCR porque la mayoría de los sufrimientos que padece el pueblo argentino no acabarán sin terminar con el latifundio, la dependencia, y este Estado oligárquico – imperialista que los sostiene.
Escriben Jacinto Roldán y Ricardo Fierro
Foto: Las jornadas del 7 y 17 de agosto pusieron en el centro las demandas populares. En la foto, parte de la marcha del 7 de agosto en La Pampa
