Días después de la toma del Ministerio de Educación impulsada por nuestra agrupación y acompañada por Ademys, los estudiantes secundarios se movilizan contra el cierre de cursos, realizan cortes, marchas y toman escuelas. Hubo también una audiencia judicial, ya que la UTE lleva el conflicto a ese plano. La justicia avala legalmente el cierre de grados, pero toma en consideración una serie de argumentos pedagógicos que traban el cierre en casos particulares. La lucha queda librada a la defensa de cada grado en forma segmentada. En las escuelas afectadas se discute qué actitud tomar al momento de enfrentar los cierres: no firmar el cese de renuncia (el docente de menor puntaje se quedará sin trabajo si es interino o suplente), convocar a la comunidad, cadenas telefónicas con los docentes de la zona, elevar actas denunciando la situación y recurso de amparo judicial. Así es como hasta ahora, los funcionarios no se han animado a aparecer…
Argumentos del gobierno, argumentos de los maestros
Macri dice que el motivo de los cierres en zona norte es desdoblar grados en la zona sur: Hace años que se exige la construcción de escuelas en esa zona porque es la que más ha crecido demográficamente, y los grados superan los 35 o 40 alumnos. Las escuelas están destruidas y la inversión por alumno es más baja que en los distritos con menores necesidades (Palermo y Belgrano).
En La Boca, Soldati y Mataderos hay aproximadamente 600 niños sin escolaridad y en lista de espera. Una “solución” que dieron en estos años ha sido trasladar a los niños en micros hacia escuelas con baja matrícula de la zona norte. Advertimos desprecio en esta medida, que provoca condiciones muy difíciles de estudio para los niños. ¿Cómo hace un maestro para citar a un padre de Villa Soldati si la escuela queda en Colegiales?
Luego de mantener esto silenciosamente durante años, ahora usan estos argumentos para cerrar grados. ¿De qué manera piensan desdoblar? sin poner un solo peso. ¿Qué proponen concretamente? Convertir bibliotecas, aulas de tecnología, de música, etc., ¡en grados! ¡Tabicar aulas con durlock! ¡Hablaron de colocar containers! ¡Y se llenan la boca hablando de calidad educativa! ¡Cuánta mentira, cuánto desprecio a la educación del pueblo!
La propuesta macrista tuvo que ir ajustándose a las repercusiones de la lucha. Luego de que la Justicia prorrogara la ejecución de cierres, y que tomamos el Ministerio, Bullrich baja el número inicial de 221 a 96, y dice que serían más los grados que abrirían en zona sur que los que cierran en zona norte (eso es imposible si no construyen escuelas).
Plantean que no es bueno que haya grados con 5 o 10 chicos. Debemos preguntarnos por qué algunas escuelas tienen pocos alumnos, y la respuesta es el colosal crecimiento de la educación privada, beneficiada año a año por el Estado. Este año el subsidio a las privadas creció un escandaloso 33%. Todos los meses, estas escuelas reciben hasta el 100% del costo de salarios, además de sus cuotas. Mientras tanto, las cooperadoras de la pública no recibieron la segunda cuota del subsidio 2011. Pero esto no nace hoy. Existe un éxodo de matrícula desde los años ‘90, años de avance la fragmentación educativa, en que se planteó que no todos debían acceder al conocimiento de la misma manera, y empezó a haber escuelas de primera y escuelas de segunda.
Los maestros trabajamos para la retención del alumnado a partir de los proyectos escolares, pero lo que podemos hacer es limitado frente al vaciamiento al que nos somete el Estado: Van a un plan de destrucción de la Educación Especial ya que redujeron su presupuesto en un escandaloso 40% y bajaron 3,6% el área de infraestructura ¿cómo se traduce esto? Por ejemplo en que después del temporal haya varias escuelas sin clases, ni respuestas.
En definitiva, el macrismo intenta un ajuste feroz con costos altísimos para los niños más pobres de la ciudad, a los que intentan acomodarlos como objetos para que los números cierren, favoreciendo la fragmentación educativa entre escuelas para pobres y para ricos.
Varias preguntas
¿Por qué los legisladores kirchneristas, referentes de la UTE como Tito Nenna, votaron este presupuesto en noviembre del 2011? ¿Por qué no se movilizaron contra el cierre de grados durante el paro nacional del 6 de marzo, siendo que la disposición recién llegaba a las escuelas? ¿Por qué no hicieron plenarios durante el conflicto? ¿Por qué no apoyaron la toma del Ministerio impulsada por las asambleas distritales?
Y algunas coincidencias…
La presidenta se viene mostrando dura con los docentes. Se suma a un discurso propio de la oligarquía, que intenta dividirnos del resto del pueblo. No sólo dijo que trabajamos cuatro horas y vacacionamos tres meses, habló también de la cantidad elevada de cargos suplentes, de las bondades de los subsidios a las escuelas privadas y nuevamente en contra de los paros. La intención es colocarnos como variable de ajuste en tiempos de crisis. En su discurso del 14 de marzo, la presidenta avala el subsidio a la escuela privada, avala el despido del docente que hace paro, responsabiliza al docente que lucha contra el vaciamiento de la escuela pública, y avala el posible achique de cargos docentes (en discursos anteriores). Sileoni se muestra preocupado por el ausentismo. ¿Faltaría comprobar la aprobación del Ministerio de Educación nacional al cierre de grados que impulsa Bullrich, o no hace falta?
Inés. Docente y delegada escuela 8. Distrito 7. Integrante de la Agrupación E. Lucero
