miércoles 7 de noviembre de 2018
Discutir, proclamar y movilizarse contra el FMI y el G20
1. Estamos muy mal, y lo que viene es peor El hambre, la desocupación y la pobreza castigan al pueblo. Y la economía sigue cayendo en picada. La miseria castiga como en el 2001 a los cordones pobres de las ciudades donde ya no hay ni trabajo ni changas, y en las zonas agrarias en donde las familias campesinas y originarias producen para vivir y para alimentar a las ciudades de verduras, frutas y pequeña ganadería. Mueren niños por desnutrición. Un padre se suicida porque reclama la copa de leche para sus hijos, un comedor o un plan social, y le demoran 7 meses porque es “dueño” de una vieja motito. wichis, qom y criollos chaqueños caminarán una semana para hacer sentir su protesta en Resistencia. Marchan los tareferos en Misiones. Suben los alquileres de las tierras de los pobres y las tarifas en los cordones verdes de las ciudades y en las provincias, no los pueden pagar. Para el gobierno de Macri eso es el progreso: expulsar a los pobres de tierras para negocios inmobiliarios y de turismo de capitales extranjeros. La ola de despidos crece. El ajuste estatal golpea a la salud y la educación públicas, y a reparticiones que hacen al desarrollo nacional. Cierran pequeñas y medianas empresas y comercios. Monopolios como GM trabajan al 25%, ¿cuánto tardará en despedir trabajadores? La economía cayó 8,7% en octubre, van 6 meses de caída. Los obreros del Astillero Río Santiago defienden su trabajo y la producción nacional, que es…