1. La pueblada jujeña Sesionando desde la madrugada de un día feriado, el gobernador Morales de Jujuy impuso una reforma constitucional fascista en complicidad con el sector del PJ que dirige Rivarola. Su gobierno mantiene sueldos de hambre, de los más bajos del país, para docentes y estatales. El pueblo jujeño confluyó en la lucha encabezado por los docentes que vienen de semanas de lucha por salarios y los pueblos del norte jujeño, encabezados por los hermanos originarios, en defensa de sus tierras y el agua que la nueva constitución pretende arrebatarles para asegurarle a los dueños de Jujuy el negocio del litio entre otros. Morales respondió con una represión sangrienta, con policías de civil infiltrados entre los manifestantes que queman coches y pretenden responsabilizar a los luchadores, como le hicieron a los dirigentes de nuestro Partido Santiago Zamora y Miriam Morales.  Camionetas sin patentes y sin ninguna identidad, con varios policías en la parte de atrás, recorren la ciudad levantando a cualquiera que consideran sospechoso y lo suben al vehículo a las trompadas y patadas. La respuesta fascista de Morales hasta ahora fracasó. Docentes, azucareros, mineros y otros sindicatos, las organizaciones sociales y una gran participación de las comunidades originarias, siguen en las calles y las rutas.   2. Solidaridad activa con la lucha del pueblo jujeño La lucha de los docentes y los trabajadores de la salud de Salta a fines de mayo había tensado la situación en esa provincia al punto que el gobernador debió retroceder vetando…