En una primer quincena de agosto convulsionada por la crisis política que se cierne sobre Tierra del Fuego, después de haber cobrado el salario sólo hasta $ 2 mil (hay que tener en cuenta que hace 18 meses que se viene cobrando escalonado), el 7 de agosto los gremios que conforman la Intersindical salieron a la calle. Se movilizó masivamente, con medidas que iban desde retención de servicios hasta el paro, todo con un profundo debate por parte de los estatales, tanto en las escuelas como en los diferentes organismos del Estado provincial.
Los trabajadores le dijeron basta al gobierno de Fabiana Ríos, y así se lo hicieron saber durante toda la segunda semana. Marcharon sectores que también se plegaron a las manifestaciones que venía realizando la Intersindical, como los trabajadores y profesionales de la Salud, de la Legislatura Provincial. También con un gran afluente de docentes, que pararon el 10 y el 11, volvieron a las escuelas el 12 para debatir en asambleas con retención de tareas, y resolvieron parar 13 y 14 para confluir y acompañar en un paro de 48 horas que ATE ya había definido provincialmente.
Mientras todo esto sucedía, una delegación de la Intersindical había viajado el lunes 10 a Buenos Aires. Tenían como objetivo una reunión con la viceministra de Trabajo de la Nación, y otra, previamente acordada, con legisladores nacionales que representan a Tierra del Fuego.
La primera convocatoria fue desarticulada y desarmada por los mismos que la convocaron. Desde el Ministerio de Trabajo dijeron que se “superponían” reuniones que ya tenían. Vale aclarar que la reunión con el Ministerio de Trabajo, había surgido a través de un informe que la Intersindical le acercó a la presidenta sobre la situación de la provincia, en la puerta de la fábrica New San (Ushuaia), cuando ella puso sus pies en la isla. La misma se iba a concretar en julio, y por motivos de aquel temporal de nieve que imposibilitó la salida y entrada de aeronaves de la isla, no se pudo realizar.
La reunión con los legisladores de Tierra del Fuego tampoco se concretó. Ninguno de los legisladores acusó recibo. ¿Por qué?
Conquistar lo necesario
Desde la Intersindical se perfila una salida diferente: es la única organización que tiene una propuesta que no sea el ajuste. Desde el gobierno y los sectores opositores (pero que representan a grupos con intereses cuasi iguales, sólo que la contradicción se agudiza, para ver quién se queda con la mejor tajada) persisten en que “no hay plata”.
La Intersindical ha planteado la conformación de un Comité de Crisis, que se haga cargo de la grave situación que afecta a la provincia. Este Comité estaría dado con o sin la gobernadora.
Hay muy buenas condiciones para la lucha y debemos aunar esfuerzos para penetrar en las masas y revertir el discurso que sostiene que “no se puede sin ajuste”.
Es necesario que todos los trabajadores sigan sumándose a la lucha para intentar confluir en un gran paro provincial, que desnude la verdadera posibilidad que tenemos los fueguinos de conquistar lo necesario para todos nuestros habitantes de la provincia.
