En el marco de las actividades de la Cocapre (Comisión Carlos Presente), se decidió el 30 de agosto estar presentes en los festejos de la ciudad de Gral. Roca, donde estaría presente el presidente Néstor Kirchner y la candidata Cristina Fernández de Kirchner. La agenda del presidente obligó a cambiar la fecha de los festejos, quedando a las claras que su presencia era para lanzar la candidatura de “Cristina” es decir, estaban únicamente con fines electorales.
Se elaboró un documento donde se aclaraba que “nuestra presencia no era para apoyar ninguna candidatura, sino para exigir al presidente que tome la decisión política y jurídica para garantizar juicio y castigo a los responsables materiales, políticos e ideológicos del fusilamiento público de Carlos Fuentealba”.
El documento también exigía el esclarecimiento y juicio a los responsables de los hechos protagonizados en Santa Cruz, por el ex funcionario kirchnerista Varizat, también se refería a la situación de los compañeros de “Quebracho” que serán enjuiciados por la rotura de vidrios en un “local de Sobisch” en Capital Federal, expresando que para el presidente, vale más la propiedad privada que la vida de las personas.
Al llegar nos encontramos con la Unter, el Centro de Estudiantes de la Facultad de Derecho y Ciencias Sociales y la CEPA; la columna ingresó al acto coreando una canción dedicada a Carlos Fuentealba exigiendo ¡justicia!
La primera impresión que compartimos los compañeros presentes, es que era un acto con poca gente, con pocos aplausos, poco ánimo y algunos de los que estuvieron en el escenario fueron silbados y abucheados.
Esta situación nos permitió estar muy cerca del palco y donde estaban los medios que estaban cubriendo la noticia, notamos que la mayoría de la gente miraba con mucho respeto los carteles reclamando justicia por Carlos, y nadie nos dijo nada sobre uno de los carteles que decía “K sacá la gendarmería de Santa Cruz”.
Sí fue notable la transformación de la cara de Kirchner-Kirchner (KK) y demás funcionarios cuando vieron el cartel. Los medios regionales reflejaron la noticia haciendo alusión a que “no todas fueron rosas para el matrimonio presidencial” refiriéndose a nuestra presencia, y a la cantidad de sectores que aprovecharon para expresar sus reclamos.
Al retirarnos fue muy emotivo el agradecimiento y los aplausos de los estudiantes, al grito de ¡Carlos Fuentealba presente, ahora y siempre!