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03 de octubre de 2010

Durante el Encuentro de campesinos pobres, un integrante de la Asociación Civil Comunidades Campesinas por el Trabajo Agrario, nos cuenta sobre la experiencia de esta asociación que ya tiene diez años.

Una organización campesina en Misiones

Hoy 1275 / La pelea es por la tierra

"Vinimos 17 compañeros a participar de este encuentro, donde se discuten varios puntos de desarrollo del campesinado y viendo las posibilidades de llevar adelante una coordinación, una federación nacional de  campesinos pobres y de pequeños productores. Porque lo que estuvimos viendo todo estos años, es que en realidad hay muchas organizaciones de campesinado pobre, pero es una necesidad el juntarse distintas provincias para presentar algunos modelos, algunos proyectos en el campo. No esperar a que vengan los modelos de arriba sino desde las estructuras de bases ir presentando sus modelos, desde las necesidades del campo, de la gente, del más humilde. Realmente la determinación que se ve hoy es impresionante del campesinado chico. El privilegio está entre los grandes, y nosotros como campesinos pobres, lo que queremos con este encuentro, es conformar una mesa nacional con distintas organizaciones que aporten su grano de arena en las decisiones de lo que quiere y de las necesidades de cada provincia.

—¿Cuál es la situación en Misiones?
—La situación en particular es difícil. Porque sufrimos una sequía este año, donde la producción salió un 20% del total de la producción de la provincia. Y es una problemática social el tema tierra en Misiones, en la organización que pertenezco estamos hablando de 41 mil hectáreas para expropiar. Hay una ley de expropiación, la Nº 493, creada en 2004, que da el poder al Estado de expropiar a los grandes terratenientes. Ya tiene 5 años esta ley y el gobierno no la aplica, para no abrir un camino o dejar una punta de espada para otras organizaciones y exigir por esa ley. Estamos hablando de cuatro latifundios que sería la Ex Intercontinental, que hoy se refiere Empresa Puente Alto, Colonizadora Misionera, que también está involucrado Transporte El Dorado, Colonia Victoria. En San Vicente, un promedio de 1.600 familias están ocupando esas tierras. Y el promedio productivo que dice la ley de colonización sería de 25 hectáreas por familia. 25 hectáreas productivas, porque Misiones tiene muchas quebradas, muchas piedras y hay tierras que no son aptas para la producción por la cantidad de piedras.


—¿Hay muchas plantaciones de pino?
—El pino, es el avance más grande que tenemos. La provincia tiene un promedio de un 35% que está en manos de Alto Paraná. Cuando se baja de la Ruta 12 de Posadas hasta Puerto Iguazú no se ve otra cosa que no sea pino. Los pueblos están entre medio de los pinos. Tenemos muchas enfermedades, principalmente en los alrededores de la Ruta 12, en el pueblito Esperanza, los chicos sufren muchas enfermedades porque está la fábrica Alto Paraná, por consecuencia de los químicos que caen en el agua, hay aguas contaminadas, y la atención médica es de pocos recursos en la zona. Las posibilidades de las familias de ir a un hospital o un sanatorio privado, las familias no tienen condiciones. La situación de Misiones es muy difícil, nunca sale a luz. Los gobiernos de turno, no tienen una política de desarrollo del pueblo y de los campesinos, sino una política empresarial, coordinado entre la presidencia, gobernación, intendencia, las grandes empresas, autoridades que presionan a los campesinos para que no salgan a denunciar lo que está pasando.

—¿Cómo se van de este encuentro?
—De este encuentro realmente nos vamos satisfechos por el conocimiento de distintas organizaciones y por saber lo que realmente está pasando en otras provincias hermanas. El tema tierra que es como un eje central que tenemos todas las organizaciones que participamos… la tierra es todo para las organizaciones, para los campesinos… y es una problemática social, que realmente hay que tener una coordinación nacional para empezar a presentar el modelo de país que queremos nosotros los campesinos. Porque hay un modelo, que no estamos de acuerdo, que es el modelo de los grandes latifundios, los grandes terratenientes y que están corriendo a los campesinos a los cordones cuneta sobre la ruta, las banquinas… y es muy difícil para el campesinado vivir en esa situación. Nosotros no estamos de acuerdo con las políticas “chupetines”, que le dicen a una familia necesitada “te vamos a arreglar un sueldo por mes, un plan de $ 150”, o “te vamos a dar una tarjeta” de 50, depende de la familia, hasta 200 pesos para que compren mercadería en un mercado, con la política de que “la familia tiene que comer en casa”. Pensamos los campesinos que es una locura para una familia, no crea mano de obra para que la gente gane dignamente el pan para la mesa. Y entonces, esa familia no tiene laburo, no tiene desarrollo. Se sufre discriminación en el estudio, salud, no poder comprar materiales a tu chico para que estudie, el calzado y la ropa. Hay muchos chicos en Misiones que van a la escuela descalzos y eso es re difícil con la política nacional y provincial que tenemos.

—¿Cuántos compañeros vinieron?    
—Vinimos 17 compañeros, entre los cuales hay seis mujeres. Realmente mujeres de lucha, mujeres que llevan adelante la bandera de la organización y así pudimos estar en varios talleres.
Nuestra organización viene arrastrando alas hace 10 años, sufrimos muchas discriminaciones, desde el Estado también, porque nos negaban la personería jurídica a nuestra organización. Tuvimos más de 2 años con los papeles dando vueltas, hasta que en determinado momento logramos aflojarlos, entró un nuevo director en Personería Jurídica, y tenemos acta constitutiva.
Para hacer recursos y solventar la lucha hacemos actividades, venta de empanadas, hay un grupo de jóvenes que se junta cada 15 días para hacer pan dulce principalmente. De ese fondo, hay un porcentaje para los jóvenes, y un 60% en común para resolver los gastos de Encuentro de Jóvenes por la tierra… y el resto es para solventar los gastos del día a día de la lucha. Porque el tema de la tierra, es un conflicto social al que nos estamos enfrentando a grandes monstruos, entonces tenemos que tener un fondo para un viaje a Posadas, a Secretaría de Tierras, a hacer una denuncia.