La jueza María Luisa Escrich condenó el pasado 4 de octubre a nueve inquilinos, entre los que se encuentran: cuatro empleadas domésticas, madres solas, que tienen 11 hijos en total a su cargo; un anciano de 80 años; una joven de 19 que acaba de dar a luz; un discapacitado y dos trabajadores eventuales, a 6 meses de prisión por usurpar la vivienda en la que vivían legalmente desde hace más de un año.
La condena es de efectivo cumplimiento para Mariela Aguirre, y en suspenso para los otros ocho.
La jueza María Luisa Escrich condenó el pasado 4 de octubre a nueve inquilinos, entre los que se encuentran: cuatro empleadas domésticas, madres solas, que tienen 11 hijos en total a su cargo; un anciano de 80 años; una joven de 19 que acaba de dar a luz; un discapacitado y dos trabajadores eventuales, a 6 meses de prisión por usurpar la vivienda en la que vivían legalmente desde hace más de un año.
La condena es de efectivo cumplimiento para Mariela Aguirre, y en suspenso para los otros ocho.
La causa fue impulsada por un fiscal de Macri, Ángel Carestia. La jueza Escrich, titular del Juzgado Nº 20 “resuelve” una medida vergonzosa, condenando a nueve humildes inquilinos, sin siquiera escucharlos, ya que no dejó que se presenten testigos por la defensa, ni permitió testimonios y alegatos de los enjuiciados.
La “Comisión de apoyo a los inquilinos de Chacabuco 630” denuncia que “El mismo gobierno que no construyó una sola vivienda en tres años, el que desalojó a 30 familias por semana, el que pobló las calles de la Ciudad con 15.000 desalojados, además, ¡encarcela a los inquilinos!
Informa el comunicado que los abogados de los compañeros apelaron la sentencia, y convocan a todas las organizaciones sociales y “ciudadanos de bien” a repudiar e impedir el atropello.
