l.– El PCR es un destacamento nacional del proletariado, levanta las banderas del internacionalismo proletario y tiene como una de sus principales tareas la de la solidaridad con las luchas de la clase obrera mundial.
l.– El PCR es un destacamento nacional del proletariado, levanta las banderas del internacionalismo proletario y tiene como una de sus principales tareas la de la solidaridad con las luchas de la clase obrera mundial.
2.– Damos todo nuestro apoyo a la lucha contra el imperialismo de los pueblos y las naciones oprimidas, en particular a Cuba, Irak, Irán, Libia, República Democrática y Popular de Corea, Palestina y Chechenia. A los pueblos oprimidos que dirigidos por partidos marxistas-leninistas-maoístas luchan, con las armas en las manos, contra sus opresores, en Filipinas, Turquía, Nepal, Perú y la India y a las fuerzas revolucionarias que luchan, armadas, contra el imperialismo y la reacción local, en Colombia, México y Kurdistán. Damos todo nuestro apoyo a la lucha del movimiento obrero y campesino paraguayo y a la lucha de la clase obrera y el pueblo ecuatoriano, venezolano y a la clase obrera y los pueblos de Latinoamérica. Repudiamos el intervencionismo imperialista en Yugoslavia, Irak, Camboya, África Central, Chechenia y en cualquier otro lugar en que se haga, con o sin la bandera de las Naciones Unidas. Condenamos y repudiamos el envío –por el gobierno argentino– de tropas a distintas partes del mundo al servicio del imperialismo haciéndoles jugar un rol de tropas mercenarias y exigimos el inmediato retiro de las mismas.
3.– Damos todo nuestro apoyo a la resistencia de los pueblos y naciones del Tercer Mundo al pillaje económico imperialista, como sucede con la deuda externa, y la defensa de mejores precios para sus materias primas y producciones.
Oponemos a la “globalización” imperialista y a la regionalización de los monopolios la defensa de la independencia nacional, la solidaridad de la clase obrera y los pueblos y naciones oprimidas, y la integración económica de los países de América Latina sobre la base de su integración nacional y el enfrentamiento al imperialismo. En ese sentido, debemos trabajar particularmente para la unidad y coordinación de las luchas del proletariado de los países del Mercosur.
4.– Luchamos por la jornada internacional de 6 horas y 35 horas semanales, sin rebaja salarial, consigna internacional que debe integrarse a la realidad y a la lucha revolucionaria de cada país.
5.– Repudiamos y exigimos el castigo a las violaciones a los derechos humanos contra los pueblos y sus dirigentes revolucionarios. Condenamos el asesinato de Jaime Hurtado, dirigente del PC (m-l) de Ecuador y las decenas de asesinatos de dirigentes obreros, campesinos, populares y revolucionarios en América del Sur. Exigimos la inmediata libertad de Abimael Guzmán, Osear Ramírez Durán (Feliciano) y demás presos políticos peruanos, castigados por una justicia que niega los más elementales derechos democráticos y sometidos a las más aberrantes condiciones carcelarias. Exigimos la inmediata liberación del periodista revolucionario, ex militante de los Panteras Negras, Mumia Abu-Jamal, condenado a muerte en los EE.UU. y la del líder kurdo Abdullah Ocalán. Damos nuestro apoyo a la lucha de los pueblos contra las tendencias fascistas en el mundo. Rechazamos los tribunales, cortes penales internacionales y los juicios extraterritoriales, que se fundamentan en la teoría de la “globalización” de la Justicia y que avalan y favorecen el intervencionismo de las metrópolis imperialistas. Defendemos, en cambio, la necesidad de luchar por el castigo de los responsables de los crímenes contra los pueblos, como uno de los objetivos de la lucha antiimperialista y revolucionaria de cada país.
6.– El PCR considera una tarea prioritaria, en el terreno internacional, la lucha contra el revisionismo moderno y el neo-revisionismo y trabajará para fortalecer la unidad de los partidos marxistas-leninistas-maoístas, dado que solo desde la defensa del marxismo-leninismo-maoísmo se puede enfrentar y derrotar al revisionismo y al neo-revisionismo. No puede haber unidad ideológica con el revisionismo y el neorevisionismo, por lo que nos oponemos a los proyectos que impulsan la unidad internacional de todos los “marxistas” (la llamada “unidad de las cuatro internacionales”) incluidos los neo-revisionistas, los socialdemócratas y los trotsquistas y a los que impulsan la unidad de los “marxistas-leninistas” incluyendo entre estos a los neo-revisionistas.
7.– El Partido prestará una atención particular a la coordinación y a las tareas comunes con las organizaciones de América Latina marxistas-leninistas-maoístas y a las iniciativas y a la unidad de acción con las organizaciones marxistas-leninistas y revolucionarias.
8.– En la lucha contra el imperialismo y la reacción internacional participaremos –de acuerdo con nuestras posibilidades– en reuniones e iniciativas internacionales que faciliten la unidad y coordinación en esa batalla con otras fuerzas antiimperialistas y obreras, aunque tengamos con ellas diferencias ideológicas profundas.”