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01 de junio de 2011

Tras la represión a los acampantes en la plaza de Barcelona, los “indignados” de “Juventud Sin Futuro” y “Democracia Real Ya” volvieron a ganar las calles y Puerta del Sol.

España sigue en las plazas

Hoy 1371 / Desocupados, hambreados, “indignados"

La represión a los 400 “indignados” que acampaban en la Plaza Catalunya de Barcelona (en el nordeste de España) el jueves 27/5 empujó nuevamente a la calle a miles de jóvenes, en la propia Barcelona y en otras ciudades.

La represión a los 400 “indignados” que acampaban en la Plaza Catalunya de Barcelona (en el nordeste de España) el jueves 27/5 empujó nuevamente a la calle a miles de jóvenes, en la propia Barcelona y en otras ciudades.
Pese al baldazo de agua fría que significó para el gran movimiento gestado hace 15 días el triunfo electoral del conservador Partido Popular (el voto al PP predominó como voto “castigo” al socialdemócrata gobierno del PSOE, aunque se oculta el número de votos en blanco, nulos y el porcentaje de abstención), las brasas de la indignación popular por la desocupación y las políticas de ajuste permanente que descargan la crisis sobre el pueblo siguen encendidas.

Vuelven a ocupar
Con el pretexto del “orden” y la “limpieza” ante la final de la Liga de Campeones, entre el Barça y el Manchester United, policía y fuerzas de represión “antidisturbios” cargaron a porrazos y balazos de goma contra los manifestantes y contra un grupo de apoyo a los acampados para desalojarlos de la plaza. Decenas de jóvenes se habían sentado en el suelo, tratando de bloquear el paso de los coches policiales, y a algunos camiones de limpieza les pincharon las gomas para que no pudieran llevarse las carpas, cocinas y demás elementos de los manifestantes. La represión dejó más de 120 heridos.
Hacia el mediodía, cuando después de ver las imágenes del aporreo a los manifestantes ya eran mil los concentrados en las cercanías para apoyar o incluso sumarse al acampe, la policía debió retirar el cordón que rodeaba la plaza y permitir nuevamente el acceso: los “indignados” y sus simpatizantes recuperaron la plaza central de Barcelona.
También hubo represión en Lérida (o Lleida, en el oeste de la provincia catalana). La policía detuvo a dos personas durante el desalojo del campamento que los “indignados” de esa ciudad habían instalado en la plaza Ricard Vinyes.
Con la represión y la resistencia en Barcelona renacieron las concentraciones en toda . El día culminó con grandes manifestaciones en Madrid, Granada y Valencia, entre otras ciudades; en la propia Barcelona, 12.000 personas se concentraron en la plaza Catalunya.
“¡No está sola Barcelona!”, fue el nuevo grito de batalla, en un país donde el promedio general de desocupación supera el 21%, pero el de los jóvenes de hasta 25 años es del 44%, y donde los jóvenes que encuentran trabajo ganan apenas 1.000 euros por mes.
El domingo 29, varios miles de jóvenes decidieron en asamblea mantener por tiempo indefinido el acampe en Puerta del Sol, con ciertas “adaptaciones” atendiendo a las dificultades que la protesta causa a turistas, comerciantes y vecinos.
También se convocan asambleas populares barriales en toda Madrid, que empezaron a efectivizarse la semana pasada.