En la mañana del lunes 25, las cifras ya están, pero la sorpresa todavía es grande y las interpretaciones muchas. Por lo que conviene darse un tiempo para reflexionar sobre unas elecciones tan complejas en su resultado, como importantes para las próximas elecciones nacionales y la perspectiva política general.
Pero conviene por lo menos, afirmar algunas certidumbres mientras repensamos algunas contradicciones.
En la mañana del lunes 25, las cifras ya están, pero la sorpresa todavía es grande y las interpretaciones muchas. Por lo que conviene darse un tiempo para reflexionar sobre unas elecciones tan complejas en su resultado, como importantes para las próximas elecciones nacionales y la perspectiva política general.
Pero conviene por lo menos, afirmar algunas certidumbres mientras repensamos algunas contradicciones.
Hay que tener en cuenta que el sistema electoral nuevo en Santa Fe, la boleta única, empuja de por sí a la separación de las distintas elecciones en juego. Ya que hay una boleta para gobernador, una para diputados, una para senador, una para intendente y otra para concejales, donde están todos los candidatos.
Derrota de Rossi, candidato del kirchnerismo
La elección a gobernador, por ser la principal, tiñó toda la jornada. Por lo que resulta más nítida la derrota del candidato oficialista Rossi, que resurgido de un 9% obtenido en las elecciones del 2009, a caballo de la “unidad” del peronismo lograda, ganó en número de votos al socialismo en las elecciones internas (sumando todas las listas de ambos).
Esa “unidad”, recibió una puñalada mortal una semana antes con el despegue de Reutemann de la candidatura de Rossi y del kirchnerismo. Una visita prepotente de Cristina a Santa Fe, lejos de ayudarlo lo hundió más. Como resultado: del 30% esperado y sostenido por varios encuestadores y periodistas, terminó en un humillante 22%. Mas humillante aún, al ser superado por Pro-Unión Federal (del Sel) por más del 13%.
En simultáneo con esta derrota, con el encabezamiento de María Eugenia Bielsa (preferida de Cristina en las internas), el peronismo kirchnerista le ganó al socialismo las elecciones a diputados provinciales, lo que por la Constitución Provincial le otorga 28 de los 50 diputados. También ganó 11 de los 19 senadores provinciales, un tercio de los concejales de Rosario, mantuvo la mayoría de las intendencias que puso en juego y recuperó la de Villa Gobernador Gálvez.
El ajustado triunfo socialista
Sorpresa generalizada en el escrutinio, cuando hasta promediar el mismo aparece como gobernador Miguel del Sel. Sólo al cargar lo fundamental de los datos de la ciudad de Rosario, puede avanzar Bonfatti (Frente Cívico y Social) y terminar ganando por una diferencia del 3,5%. Con un 10% menos de votos que el triunfo de Binner en el 2007.
Lo que debía ser el lanzamiento de la campaña presidencial de Binner, quedaba empañado por lo precario del triunfo frente al que ellos daban como tercero. La batalla se ganó por la solidez de socialismo en Rosario (arrasó en la Intendencia y senador) y por un crecimiento del radicalismo, fundamentalmente en el Centro y Norte (ganó bien la Intendencia de la ciudad de Santa Fe).
De cara a las elecciones nacionales de agosto, esto se complica más aún porque el Frente Cívico y Social se bifurca, con los socialistas votando a Binner y los radicales a Alfonsín.
Y de cara al próximo gobierno provincial, lo deberá ejercer con minoría en diputados (15 sobre 50) y senadores (8 sobre 19), contando que se mantenga la unidad interna del socialismo (dividido en las internas) y con el radicalismo.
El “boom” de del Sel
Indiscutiblemente la sorpresa de la jornada y lo que provoca hoy la mayor cantidad de razonamientos y especulaciones es la gran elección de Del Sel en la categoría de gobernador, jaqueando al socialismo, y humillando a Rossi.
Con una campaña muy intensa, con gran cantidad de plata y asesores, con un leguaje “populista”, antisocialista y antikirchnerista sin propuestas concretas, pero captando un aumento de la oposición a Cristina y el desgaste del socialismo, incapaz de aparecer como una verdadera oposición.
Con un armado donde jugaron además de sectores tradicionales de derecha de la provincia, desde el principio sectores del peronismo no K, duhaldistas y en la semana final los reutemistas. Con sindicatos como Plásticos (ex menemistas), Uatre, etc.
En los últimos días lo favoreció la repercusión del triunfo de Macri, que se involucró personalmente en la campaña. Y contó con un tratamiento favorable o benévolo de los medios locales.
Nadie descarta el peso de los sectores rurales golpeados por la política K en la 125 y ahora, ya que arrasó en numerosos pueblos del interior. Pero eso solo no explica que en las barriadas populares de Santa Fe y V. G. Gálvez ganara, y que hiciera un excelente papel en los barrios humildes de Rosario.
Al concentrarse los votos en la categoría de gobernador, los logros concretos son escasos: 7 diputados provinciales sobre 50, 4 concejales en Rosario y algunos cargos menores.
Al no tener candidato a presidente, se desdibuja el perfil del propio Del Sel en lo inmediato, pero han declarado públicamente que esperan que luego de las elecciones del 14 de agosto, poder unificar una fuerza “de centro” que dé batalla a Cristina, mencionando expresamente a Macri y a Duhalde.
Vuelve a aparecer, como en la interna, una cantidad grande de abstenciones (25%) y de votos en blanco y anulados (que van desde el 7% al 17%, de acuerdo a las categorías).
El triunfo del Movimiento Proyecto Sur
Lo último, pero no lo menos importante: Movimiento Proyecto Sur tiene un diputado provincial.
A pesar de todas las vicisitudes en su formación y en su desarrollo, para nosotros fue fundamental haber podido consolidar el Movimiento Proyecto Sur y desarrollar una campaña muy intensa, con pocos recursos, pero que logró hacer conocer a una parte grande de la población de la provincia la existencia de una fuerza distinta, programática, verdaderamente opositora, opuesta a la entrega y al remate del país.
Las giras encabezadas por el primer candidato (del Frade), los actos en ciudades y barrios, la constitución de candidaturas en un buen numero de departamentos, ciudades y pueblos y una gran campaña agitativa sostenida fundamentalmente por la juventud, nos permitió pasar el piso del 3% de los votos a nivel provincial y poder imponer a Del Frade como diputado. En distintas localidades se obtuvieron porcentajes más altos, como en Rosario, donde estuvimos cerca del 6% y mas aún en San Lorenzo, Casilda, Va. Constitución, Venado Tuerto, Salto, etc.
Junto con el debate necesario sobre el balance de estas elecciones tan complejas, estamos haciendo un análisis más detallado por lugar. Apremiados porque ya estamos en plena campaña nacional: Argumedo presidenta, Ana Galmarini diputada nacional, donde es un compromiso de honor ayudar al logro del 1,5% requerido a nivel provincial y nacional.