El dirigente de la CCC de Libertador General San Martín nos cuenta sobre la importancia de esta toma y de la Ley de Expropiación a Ledesma aprobada por la Legislatura.
-¿Qué significa para el pueblo haber tomado tierras a la empresas Ledesma?
El dirigente de la CCC de Libertador General San Martín nos cuenta sobre la importancia de esta toma y de la Ley de Expropiación a Ledesma aprobada por la Legislatura.
-¿Qué significa para el pueblo haber tomado tierras a la empresas Ledesma?
-Creo que es difícil dimensionar lo que hicimos ya que estamos insertos en el proceso. Pero para el pueblo de Libertador y para el todo pueblo argentino creo que ha sido un hecho histórico, una enseñanza, que nunca se había dado. Debemos tener en cuenta que siempre que se tomaron terrenos se pudieron realizar los desalojos y en este caso las fuerzas represivas fueron derrotadas. Por esto y porque son tierras de un terrateniente que fueron tomadas y luego expropiadas, creo que es algo que nunca se había logrado en la historia. Hay que tener en cuenta que las dos montañas que oprimen a nuestro pueblo una es el latifundio, los terratenientes y la otra es el imperialismo. Y nosotros hoy pudimos empezar a bombardear una de esas montañas. A su vez pudimos desnudar lo que es el Estado, esa maquina que sirve para garantizar la dominación de las clases dominantes y que se vio claramente en el papel de la policía, los jueces y las leyes. Ante millones quedó claro a quién responde el Estado, a qué intereses responden los gobiernos. Ante millones quedó claro que el problema de nuestro país es un problema estructural y eso quedó claro en el pueblo de Libertador.
Creo que el verdadero significado de esta lucha hoy no se puede dilucidar. Creo que después de esto ya nada volverá a ser igual en nuestra localidad y en nuestra provincia. Entiendo que una gran enseñanza que nos quedó es que las negociaciones sin luchas de por medio, no son beneficiosas, ya que el gobierno, y en este caso Ledesma, siempre tienen ventaja, pero cuando se lucha sin vacilaciones se puede discutir sin vacilaciones, y eso genera mejores condiciones para arrancar conquistas históricas como la que vamos en camino de arrancar.
-¿Cómo es la relación entre el gobierno y Ledesma?
-Todos los gobiernos son serviles a los intereses de la Empresa Ledesma, no hay gobierno que no haya favorecido sus intereses ya sea en materia impositiva, de concesiones, en legislación o en materia de tierras. De hecho ningún gobierno provincial es elegido en Jujuy sino es bendecido por Ledesma, obviamente pasa lo mismo con los gobiernos locales.
A excepción del intendente Aredes, que se encuentra desaparecido por la última dictadura militar, ningún gobierno enfrenta a la empresa sino que defiende sus intereses. Si esto no fuera así no se entiende por qué Ledesma tiene facilidades impositivas, por qué no se desmantela el ejército privado de los Blaquier, o por qué no se condena a los Blaquier de los crímenes de la dictadura.
-Después de la toma de tierras de Libertador, la represión y las muertes ¿que pasó en la provincia?
-En la provincia la situación se puede plantear en dos partes. Por un lado está el tema de la justicia, ya que tenemos 4 muertos y desde el gobierno provincial y desde la justicia se está tratando de garantizar la impunidad. Han metido preso a un remisero acusándolo de los cuatro asesinatos. Es una vergüenza la impunidad que hay. Quieren hacer que nosotros seamos los responsables de los asesinatos de los jóvenes. Quieren encarcelarnos por los asesinatos. No nos perdonan que nos hayamos rebelado contra el poder, que luchemos contra el poder real y que hayamos podido avanzar. Nos quieren encarcelar por revanchismo. Hasta ahora es inexplicable que el juez Samman, que dio la orden y se fue de vacaciones, esté al frente de la causa. En realidad lo único que demuestra es que quieren la impunidad y que nadie se haga cargo de los asesinatos ya que está manchada la empresa Ledesma y el gobierno.
Por otro lado está el tema de las tierras, luego de la lucha de El Triángulo (las tierras tomadas), estalló el conflicto en todo el pueblo de Libertador, se tomó tierras de Ledesma a lo largo de 5 Km y también pasó lo mismo en Calilegua, Fraile Pintado, Caimancito, y dieron tierras en El Talar antes que las tomen. Junto a este estallido se produjo una toma en tierras de Minetti, donde los campesinos de la ATCJ que tomaron las tierras han empezado a producir, y estalló el conflicto en el resto de la provincia.
Hay tomas en casi todas las localidades de la provincia, se estima que hubo 170. Se han tomado desde plazas hasta fincas. Hubo un estallido popular ya que la tierra, la vivienda, es una necesidad y por lo tanto una reivindicación muy sentida. Hasta los bomberos voluntarios de la ciudad de Perico tomaron tierras para tener su cuartel que fue prometido hace 10 años. Los policías y sus familias también tomaron viviendas en distintos puntos de la provincia como en Libertador y en San Salvador. Se les dividió el aparato represivo en los hechos. Esta situación se produjo unos días antes de las elecciones primarias. Fue una pueblada a nivel provincial que desnudó los problemas que tenemos en Jujuy, el problema estructural, donde el 50% de las tierras de la provincia está en manos de cinco propietarios, y que ni el gobierno nacional ni el provincial han resuelto a pesar de las propagandas.
-¿Como fue la respuesta del gobierno ante este reclamo popular?
-Ante este reclamo hubo una parálisis de varios días del gobierno provincial y del Estado de la provincia. Luego de la represión y los asesinatos, mas allá de las declaraciones del gobernador, el Estado se paralizó, las fuerzas represivas se dividieron y hubo intentos de autoacuartelamiento. La expropiación de 40 hectáreas fue un anuncio que generó más efervescencia. Es una medida histórica la expropiación, que no alcanza y que es a cambio de exenciones impositivas y otras concesiones, pero es una medida que se puede utilizar como herramienta en otros lugares y como antecedente. No es que el gobierno provincial se hizo popular sino que tomó una medida de emergencia, ya que durante años nos fueron diciendo que no era política del gobierno provincial expropiar. Lo que hacían para tener tierras para construir viviendas de los planes nacionales era comprarlas con todo lo que implica en los sobreprecios.
Luego del estallido provincial, el gobierno tuvo que decretar un programa de emergencia llamado “un lote para todo aquel que lo necesite”. Se empezó a realizar un censo para ver la necesidad y junto a esto el gobierno provincial intentó, en la mayoría de los casos en vano, desactivar las tomas. La mayoría se mantiene porque el pueblo no les tiene confianza que resuelvan el problema sin lucha. A pesar de que se está silenciando la lucha, ésta se mantiene en muchas localidades.
-¿Cómo continúa la situación en la provincia?
-Entiendo que luego de las elecciones primarias hay un silenciamiento de la lucha de Jujuy en los grandes medios de comunicación. Pero junto a esto hay muchas tomas que se mantienen, y que no confían en promesas. El 24 va haber movilizaciones en distintos puntos de la provincia, volviendo a poner en el foco el reclamo.
En Libertador y en nuestra zona la situación es particular, ya que luego de la represión se aprobó la expropiación de 40 hectáreas a Ledema, pero esto no alcanza y la empresa está empecinada en sacarnos de El Triángulo, seguramente por lo que significa como estandarte de lucha y por motivos que tiene que ver con la producción, ya que es un lugar clave en materia de recursos hídricos. Lo principal es que las 40 hectáreas no alcanzan. Hay que tener en cuenta que a nivel provincial la necesidad de vivienda el gobierno la estima en 40% de la población pero en nuestra localidad, sobre un total de 12.500 casas ya existe un censo que habla de la necesidad de 8.000 familias.
El hacinamiento en Libertador es mucho mayor que la media provincial, por lo tanto no alcanzan las 40 hectáreas, y nuestra decisión es no movernos ni un centímetro de donde estamos y si es necesario profundizar las tomas, lo vamos a hacer.
El otro punto es el tema judicial, ya que junto a la amenaza de encarcelar a la dirección de nuestro movimiento está el tema de la impunidad. Nosotros estamos planteando junto a la destitución del juez Samman la constitución de un organismo con los derechos humanos, sociales, estudiantiles y políticos, tipo una Conadep jujeña, que sea auxiliar de la justicia para que se investigue estos asesinatos y lo que pasó en la dictadura también, además de denunciar que nos quieren hacer responsables de los asesinatos.