El gobierno de Cristina Kirchner lanzó una serie de spots televisivos donde pretende mostrar los “cambios profundos” que realizaron en nuestro país tras ocho de gobierno. Ocho años donde los K gobernaron con un fenomenal crecimiento económico gracias al viento de cola de la economía internacional.
El gobierno de Cristina Kirchner lanzó una serie de spots televisivos donde pretende mostrar los “cambios profundos” que realizaron en nuestro país tras ocho de gobierno. Ocho años donde los K gobernaron con un fenomenal crecimiento económico gracias al viento de cola de la economía internacional.
En su spot “La fuerza de la educación”, las palabras de la propia presidenta aseguran que “en 2003 la Argentina destinaba el 5% de su PBI a la deuda y sólo 2% a la educación. Hoy destina 2% del PBI a la deuda y 6,47% a la educación”.
Lo primero que habría que decir es que nunca este gobierno se propuso siquiera analizar esa deuda ilegítima y fraudulenta contraída por la dictadura genocida. Siempre ocultó la investigación de Alejandro Olmos y el fallo del juez Ballesteros que demuestra con creces el carácter fraudulento de la mayor parte de la deuda. Lejos de esto, es el gobierno que más deuda pagó: desde 2002 hasta 2009 se pagaron 210 mil millones de pesos. Pese a eso, en 2009 el país mantenía un stock de deuda similar al del año 2001.
Pero analicemos el spot del gobierno. En primer lugar, el 6,47% que refiere la presidenta corresponde a la suma de los presupuestos de Educación, Ciencia y Tecnología, tanto del gobierno nacional como de todos los gobiernos provinciales y la Capital Federal. Esa misma suma representaba en realidad en 2003 el 4% (y no el 2% como aseguran). Para que la publicidad tenga más efecto deben fraguar los datos de lo que denominan “pago de la deuda”. Cuando se refiere al porcentaje del PBI destinado al pago de la deuda sólo cuentan lo que se paga por intereses (2%) y ocultan lo que se paga por amortización de capital. En 2009, fecha que toman para los datos del spot, el gasto para pago de deuda fue en realidad del 9% del PBI.
Lo otro que falsea el gobierno es que en 2003 no se destinó el 5% del PBI al pago de intereses de deuda, simplemente porque ese año la Argentina estaba en cesación de pagos. Pero claro, esa parte de la historia prefiere obviarla porque para Cristina el default declarado a comienzos del 2002 es “la peor tragedia sufrida por la Nación”.
Para tener noción real de las supuestas prioridades del gobierno en la educación, podemos tomar como dato lo que se invierte en educación en relación al gasto público total. Allí nos encontraremos con que en 2003 se invertía el 12% y en 2009 se invirtió casi el 13%.
Pero como dice la presidenta en la propaganda “a veces los números no te dicen nada” o mejor dicho, los números se acomodan para el doble discurso.
