El 7 de junio de 1810 apareció el primer número de la Gazeta de Buenos-Ayres, primer periódico patrio, cuyo director fue Mariano Moreno. En conmemoración de ese día, en nuestro país se celebra el “Día del periodista”. La Gazeta fue el órgano de la Primera Junta surgida el 25 de Mayo de 1810. En su tapa se leía la divisa “Rara felicidad de los tiempos, en que se puede decir lo que se siente y sentir lo que se quiere”, expresando el momento revolucionario que se vivía.
El 7 de junio de 1810 apareció el primer número de la Gazeta de Buenos-Ayres, primer periódico patrio, cuyo director fue Mariano Moreno. En conmemoración de ese día, en nuestro país se celebra el “Día del periodista”. La Gazeta fue el órgano de la Primera Junta surgida el 25 de Mayo de 1810. En su tapa se leía la divisa “Rara felicidad de los tiempos, en que se puede decir lo que se siente y sentir lo que se quiere”, expresando el momento revolucionario que se vivía.
En estos tiempos de 678 y Lanata, bien vale una reflexión, más para quienes estamos en un periódico revolucionario. El kirchnerismo ha avanzado como grupo económico en los medios, hasta transformarse en el principal multimedios. Para esto se combinan las empresas de sus testaferros, socios y “amigos”, con el manejo de los entes estatales, y un control milimétrico de la abultada pauta oficial.
Además, los periodistas oficialistas han dado una vuelta de tuerca al concepto de “periodismo militante”, identificándolo con ser propagandistas de las bondades del gobierno, haciendo del multimedios Clarín el enemigo principal.
Los marxistas siempre hemos planteado que en las visiones del mundo no hay neutralidad posible, y esto incluye al periodismo. Pero esto no quiere decir que todas las visiones sean válidas, no. Los periodistas al servicio de las clases dominantes (en empresas privadas o en medios estatales), sistemáticamente deforman y ocultan la realidad.
Los periodistas al servicio del pueblo (entre los que incluimos los medios de nuestro Partido y Juventud), por el contrario, damos la pelea por mostrar la realidad de la Argentina dependiente y oprimida por el imperialismo, las consecuencias de la política del gobierno, y las luchas de la clase obrera y el pueblo, no sólo por sus problemas cotidianos, sino para que triunfe una salida revolucionaria. Bregamos por ser una herramienta para las decenas de miles que dirigirán a los millones en el camino de la liberación nacional y social.
Esto no tiene nada que ver con el pretendido “periodismo militante” del kirchnerismo, ni con las “denuncias” de Lanata.
Propagandista, agitador y organizador
Larga es la lista de los que, desde distintos medios periodísticos, pusieron su pluma y su palabra al servicio del pueblo en nuestro país. Algunos dieron su vida por este compromiso. En nuestro caso, la firmeza de muchos militantes hizo posible la continuidad de nuestro periódico bajo las condiciones del terror fascista, y en eso nos enorgullecemos de ser dignos herederos de los periódicos obreros que, desde el Siglo 19, ayudaron a la difusión del marxismo primero, y del leninismo después, y llenaron sus páginas con las denuncias y reivindicaciones de los trabajadores, los campesinos, los estudiantes y demás sectores populares.
La construcción de un periódico que sea no sólo propagandista y agitador colectivo, sino también un organizador colectivo, como planteaba Lenin con palabras que conservan toda su vigencia en pleno Siglo 21, no sería posible sin la decisión política de la dirección del PCR en primer lugar, pero tampoco sin el “ejército” de corresponsales, reporteros, especialistas, “que establezcan relaciones en todas partes, que sepan penetrar en todos los ‘secretos de Estado’, meterse por entre todos los ‘bastidores’, un ejército de hombres y mujeres que “por su cargo, tengan la obligación de estar en todas partes y de saberlo todo”, como decía Lenin. A todos ellos, feliz día del periodista.
