Las paritarias están en marcha, las luchas también: bancarios, docentes, estatales. El gobierno anunció la suba del 20% en el tope inferior del Impuesto a las Ganancias, cuando se ha producido más del 50% de inflación desde que lo movió por última vez.
Las paritarias están en marcha, las luchas también: bancarios, docentes, estatales. El gobierno anunció la suba del 20% en el tope inferior del Impuesto a las Ganancias, cuando se ha producido más del 50% de inflación desde que lo movió por última vez.
Sin embargo, la Presidenta no castiga a los monopolios ni a los banqueros, a los que la juntaron con pala. Castiga a los trabajadores y a la pequeña producción agraria, industrial. A los pobres, a los que quiere tener cautivos con los planes y las jubilaciones mínimas, a los que les roba con el 21% de IVA. Nos roba brutalmente con la inflación.
Con el Impuesto a las Ganancias, le robó miles de millones de pesos a más de dos millones de trabajadores ocupados, mientras no les cobra a los que han hecho ganancias supermillonarias en estos años y encima se las han llevado fuera del país.
Claro, ahora cedió, pero buscando como hace casi siempre, que parezca como una gran cosa cuando en realidad no lo es. Son maestros del engaño.
Están atrincherados en el tope del 20% para los privados. Por supuesto, quieren menos para los estatales y docentes, pero la pulseada recién empieza: el año pasado la clase obrera se desplegó con inmensas luchas y con una gigantesca unidad enfrentó el ajuste porque no quiere seguir pagando la crisis. Cristina sigue diciendo que es una gran piloto de tormentas, pero lo es para que la fiesta de los de arriba la paguen los de abajo.
Hay que eliminar el impuesto a los salarios. El costo de la canasta familiar digna para una familia tipo de cuatro personas en la zona central es de $10.200, pero el gobierno le sigue cobrando Impuesto a las Ganancias hasta los que están en esa cifra. Año a año ingresan centenares de miles al pago del impuesto. Ahora con la suba de la cota y el aumento de paritarias, más gente lo va a pagar y más que hasta ahora. Así son los anuncios de Cristina, que parezca pero que no sea.
Estamos obligados a luchar desde abajo, sección por sección, fábrica por fábrica, rama por rama para exigir: canasta de $10.200 (con los números en la mano), enfrentar los ritmos infernales, y pegar una gran pechada para eliminar el Impuesto a las Ganancias.
Además, en este año electoral, debemos poner en discusión toda la estructura regresiva de impuestos, con una propuesta que haga que pague el que más tiene y no los trabajadores y los de abajo.
Debemos unirnos todos para lograr el 82% móvil y la suba real de las jubilaciones, que son miserables por su monto que cobran el 73% de los jubilados, y que son devoradas por la inflación.
También debemos unirnos para luchar por el aumento de todos los planes sociales en concordancia con el mínimo vital y móvil necesario, que hoy llega a los $7.000, porque el hambre y la desesperación campea en los barrios. El agravamiento de todas las enfermedades evitables, la falta de salud, el costo del transporte, los cortes de electricidad, la droga y la inseguridad, son un cóctel explosivo.
Preparar un paro de 36 horas
Unir todas las luchas nos exige preparar el paro general multisectorial –la CCC tiene la propuesta de 36 horas–; además, exige seguir acorralando a los colaboracionistas por abajo en sus gremios y por arriba. Ya se los ve apretados desde abajo. El parazo y piquetazo del 20 de noviembre los dejó descolocados y surgen las angustias de haber sido desbordados en sus gremios, pero es difícil andar bien con dios y con el diablo. Están muy apretados Caló, Yasky, Lezcano, Pignanelli. Protestaron con los anuncios, pero ya sabemos que a Cristina no se la convence con palabras, sólo afloja después de inmensa luchas.
Por eso debemos sumar a todos: Hay que unir sobre la base del programa de la multisectorial que levantamos el año pasado.
Buscamos lograr el paro antes de fin de febrero porque las clases comienzan el 25, y los docentes vuelven a las escuelas el 11. Hay que lograr romper los topes de las paritarias docentes en todas las provincias. Para ello es fundamental preparar el no comienzo de clases y obligar a la Ctera y a todos los gremios a que enfrenten los topes y la cota del impuesto. En el comienzo de clases no se puede dejar solas las luchas en las provincias. Por eso es importante empujar para que la CTA y la CGT unifiquen las luchas por todos los reclamos de docentes, estatales, privados y los sectores populares que confluimos hasta el 19 de diciembre.
Son fundamentales las luchas por gremio y por rama, pero para abrirle la mano o torcerle el brazo al gobierno hace falta un parazo mucho más grande que el del 20 de noviembre, y hay que prepararlo desde ahora.
Las luchas por la libertad de los presos de Bariloche, por la investigación y el castigo de las 18 muertes de este gobierno y de los centenares por gatillo fácil, por la derogación de la ley reaccionaria antiterrorista –que ya cumplió un año–, y por el desprocesamiento de los 5.000 luchadores populares, están al orden del día.
Es una enorme responsabilidad para el pueblo el avance del juzgamiento de los asesinos genocidas de la dictadura. En Córdoba, la lucha por que la causa Rodríguez 2, donde se encuentra la causa por el secuestro y desaparición de nuestro querido líder René Salamanca, sea incorporada a la Megacausa de La Perla, es para nosotros una enorme responsabilidad, y para que se pudran en la cárcel los asesinos y genocidas. Por eso nos movilizamos desde todo el país para estar el día 22 de febrero en Córdoba, donde movilizaremos a los Tribunales y haremos el acto. Estamos consensuando con todos los sectores el programa de actividades.
