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19 de febrero de 2013

Marcha y acto en Solano, organizados por la Comisión de Mujeres de Suteba Quilmes.
 

¡Basta de violencia contra las mujeres!

Natalia López: a un año de su femicidio

La columna avanzaba lentamente por la avenida 844, pleno centro de San Francisco Solano. Encabezando, una gran bandera: “Basta de femicidios”. Quienes la portaban, mujeres todas ellas, familiares, vecinas y ex compañeras de Natalia López. Detrás, el rostro de Natalia, sonriente, repetido en las pancartas.

La columna avanzaba lentamente por la avenida 844, pleno centro de San Francisco Solano. Encabezando, una gran bandera: “Basta de femicidios”. Quienes la portaban, mujeres todas ellas, familiares, vecinas y ex compañeras de Natalia López. Detrás, el rostro de Natalia, sonriente, repetido en las pancartas.
La bandera de Suteba Quilmes parecía abrazar a todos: familiares, vecinos, docentes, auxiliares… mujeres y hombres, jóvenes y mayores… compañeras y compañeros de distintas organizaciones… Sentimientos encontrados. La bronca, el dolor, el recuerdo transformado en llanto y también en fortaleza y en reclamo.
No es usual que se haga una marcha por el centro de Solano. Una comunidad más acostumbrada a cortar las calles por los apagones, las inundaciones, la falta de arreglo de los edificios escolares, el reclamo de trabajo, tierra, salud…
Será tal vez por eso que el pasar de la marcha fue recibido por los vecinos con una mezcla de sorpresa, respeto, y de adhesión. Por el recuerdo y por el reclamo, expresados por una compañera de la Comisión de Mujeres de Suteba Quilmes, megáfono en mano, durante todo el recorrido. Por Natalia. Por todas las Natalias. Ni una víctima más. Ni una mujer menos.
Mientras caminábamos por la calle, vimos el afiche con la cara de Natalia en paredes, en vidrieras, en las escuelas. Y en el Instituto donde ella estudió para ser maestra. Es que, en los días previos, la subcomisión de Mujeres de Solano, junto a ex compañeras de Natalia, empapelaron toda la 844.
Vimos a muchos recibir los volantes y así enterarse que hace casi un año a Natalia la mató su ex marido, en plena calle. Vimos cómo decenas salían de los comercios para saludar la marcha. Y hasta algún automovilista que llevaba pegado el afiche. Vimos la entereza de Susana, la mamá de Natalia, que no aflojó y llegó hasta el final, bandera en mano. Vimos los rostros alumbrados por las antorchas, a medida que fue anocheciendo. Por fin llegamos a la Plaza.
Irma habló en nombre de la familia y vecinos, recordó a Natalia con mucha emoción y agradeció a Suteba Quilmes por haber organizado la iniciativa. Luego Lidia Braceras, secretaria general de Suteba Quilmes, hizo una semblanza de Natalia, una joven docente que, como muchas, trabajaba en dos y hasta tres cargos para sostener a su hija y a su familia. “Natalia era alegre y responsable, estudiosa y trabajadora. Con vocación docente, que la llevó a estudiar para poder ejercer la docencia. Su vida no fue fácil. Tuvo que sacrificarse mucho para lograr obtener su título. En todas las escuelas por las que pasó, sus compañeras, compañeros, directivos, auxiliares y por supuesto alumnos, la recuerdan con mucho cariño. Estaba casada, creemos que lo hizo con el entusiasmo y el amor con que todos llegamos al casamiento. Lo que no sabía era que las características de su pareja iban a terminar con su vida. Cuando empezaron la violencia y el maltrato, trató de defenderse como pudo. Al principio, como hacen casi todas las mujeres víctimas de violencia, lo calló. Luego, a medida que la situación empeoraba, decidió separarse. Acudió a todos los lugares donde le dijeron que debía recurrir para pedir ayuda. La comisaría de la mujer, la justicia, etc. Mientras la sombra de la violencia la seguía amenazando, ella seguía adelante, trabajando y construyendo, pensando en su futuro y en el de su pequeña hija. Transmitía dulzura, buena predisposición en el trabajo, cariño hacia su madre y hermana y por supuesto, una gran abnegación hacia su hija. Preocupada por las condiciones de trabajo y el bajo salario docente, se acercó al sindicato con intenciones de participar activamente. Fue elegida delegada de su escuela. Nunca pudo continuar con su trabajo gremial. Como tantas otras cosas que soñó y no pudo realizar.
“Pero Natalia vivirá por siempre en el recuerdo de cada uno de nosotros, en la lucha que damos y seguiremos dando las mujeres en la Argentina hasta terminar con esa costumbre de matar.
“Por Natalia y por todas las Natalias, nuestro compromiso tiene que ser no abandonar la lucha contra el femicidio, obligar al Estado a implementar albergues u hogares protegidos, que en la justicia y en las comisarías se las atienda y respete y sobre todo se les dé la respuesta que necesitan, con el presupuesto necesario para ello. Porque Natalia fue asesinada a plena luz del día, en una plaza pública y tenía en su cartera la denuncia realizada pocas horas antes de que la mataran. Hubo una mano que disparó, pero hubo muchas manos que se negaron a ayudarla para que esto no ocurriera. Sus compañeras docentes y toda la comunidad quilmeña se estremeció ante este hecho. Por Natalia nos comprometemos a no bajar los brazos, para que no tengamos que llorar a ninguna otra mujer.”
Para finalizar, se invitó a la jornada que se realizará el lunes 18 de febrero en la plaza de la estación de Quilmes, organizada por la Comisión de Mujeres de Quilmes – Berazategui – Varela. Cerramos el acto con un emocionado ¡Natalia López: Presente!