La Universidad Católica de Santiago del Estero, acaba de publicar la segunda parte de la polémica entre Alberdi y Sarmiento, en un libro con prólogo de Natalio Botana.
La Universidad Católica de Santiago del Estero, acaba de publicar la segunda parte de la polémica entre Alberdi y Sarmiento, en un libro con prólogo de Natalio Botana.
La primera parte se conoce como las Ciento y una de Sarmiento, y las Cartas Quillotanas de Alberdi, reflejan la ruptura de Sarmiento con Urquiza, y como contrapartida, el compromiso de Alberdi contenido en las Bases para la Constitución de 1853. La segunda parte de la polémica, se produce, en 1853, luego de dictada la Constitución. Sarmiento escribe en Chile Comentarios de la Constitución de la Confederación Argentina y Alberdi desde Francia sus Estudios sobre la Constitución Argentina de 1853. Los textos resultan útiles, para entender las contradicciones y las alianzas políticas, que diversos sectores de las clases dominantes transitaron en la disputa y guerra civil que se desató entre los vencedores de Caseros.
Sarmiento hace una lectura de la Constitución Argentina, sobre la base de los comentarios de Story, a la constitución norteamericana. Este jurista, ya en 1815, reclamaba para los Estados Unidos, colegios militares y navales únicos, un solo ejército nacional, un banco nacional, un sistema nacional de quiebras, cortes nacionales de contralor constitucional, escribanos nacionales y jueces federales, puertos nacionales, o sea un jurista centralizador, cuyas ideas se pudieron aplicar recién cuando el norte capitalista derrota al sur esclavista y semifeudal, en una guerra dirigida por el presidente Lincoln, treinta años después.
Alberdi en su respuesta, en cambio sostiene que aunque algunos textos de ambas constituciones sean iguales o parecidos, los dos países, sus historias y las sociedades concretas eran muy distintas.
La película, muestra con rigor histórico, que el capitalismo, derrotó a los esclavistas, con activa participación de las revueltas de esclavos, y ayuda a meditar, que Argentina no tenía ninguna posibilidad de ser Estados Unidos, pese a los textos constitucionales bastante parecidos. Acá las trabas que impusieron los terratenientes de ambos bandos y la penetración de Inglaterra y otras potencias de la época, modelaron un país dependiente, oprimido.