“La consigna de un gobierno de Frente Unico es un elemento fundamental de la táctica que, sobre la base de definir el blanco, permite unir a las fuerzas populares y acumular fuerzas revolucionarias… Los doctrinarios de ‘izquierda’ siempre ignoraron las indicaciones de Lenin sobre la necesidad de buscar las ‘formas de transición o acercamiento’, propagandizan solamente la ‘meta’. Y los oportunistas de derecha intentan establecer una ‘fase intermedia especial’ para sugerir la ilusión de un tránsito pacífico, parlamentario, de reforma en reforma. Ignoran el carácter del Estado oligárquico-imperialista y la necesidad inevitable de la insurrección armada del pueblo para destruirlo”.