Disciplina del partido
En vista de las graves infracciones de la disciplina cometidas por Chang Kuo-tao1, es necesario reafirmar la disciplina del Partido, a saber:
1) la subordinación del militante a la organización;
2) la subordinación de la minoría a la mayoría;
3) la subordinación del nivel inferior al superior, y
4) la subordinación de todo el Partido al Comité Central.
Disciplina del partido
En vista de las graves infracciones de la disciplina cometidas por Chang Kuo-tao1, es necesario reafirmar la disciplina del Partido, a saber:
1) la subordinación del militante a la organización;
2) la subordinación de la minoría a la mayoría;
3) la subordinación del nivel inferior al superior, y
4) la subordinación de todo el Partido al Comité Central.
Quien viola estas reglas de disciplina socava la unidad del Partido. La experiencia demuestra que algunos infringen la disciplina del Partido porque no comprenden en qué consiste esta disciplina, y otros, como Chang Kuo-tao, la infringen a sabiendas y se aprovechan de la ignorancia de muchos miembros del Partido para lograr sus pérfidos objetivos. Por lo tanto, es necesario educar a los militantes en la disciplina del Partido, de modo que los militantes de base no sólo puedan observar ellos mismos la disciplina, sino también velar porque los dirigentes la observen igualmente, evitando así que el caso de Chang Kuo-tao se repita. Para conducir por el cauce correcto las relaciones internas del Partido, aparte de las cuatro reglas más importantes de la disciplina arriba mencionadas, debemos elaborar un reglamento interno del Partido más detallado, que sirva para asegurar la unidad de acción de los organismos dirigentes en todos los niveles.
La democracia en el partido
En la gran lucha en que está empeñado, el Partido Comunista de China exige a todos sus organismos dirigentes, miembros y cuadros que desplieguen al máximo su iniciativa; sólo así será posible la victoria. Esta iniciativa ha de manifestarse concretamente en la actividad creadora de los organismos dirigentes, cuadros y miembros del Partido, en su sentido de la responsabilidad, en el vigor que pongan en el trabajo, en la audacia y habilidad con que planteen los problemas, expongan sus opiniones y critiquen los defectos, así como en la vigilancia camaraderil que ejerzan sobre los organismos y cuadros dirigentes. Sin todo esto, la palabra “iniciativa” carecerá de contenido. Ahora bien, el despliegue de dicha iniciativa depende del grado de democracia existente en la vida del Partido. Sin suficiente democracia, resulta imposible desplegar esta iniciativa. Sólo en un ambiente democrático puede formarse un gran número de hombres capaces. En nuestro país prevalece el sistema patriarcal, propio de la pequeña producción, y, tomado el país en su conjunto, todavía no hay una vida democrática. Esta situación se traduce dentro del Partido en una vida democrática insuficiente. Este fenómeno impide que todo el Partido despliegue plenamente su iniciativa, y conduce asimismo a una democracia insuficiente en el frente único y en los movimientos de masas. Por estas razones, dentro del Partido hay que educar a los militantes en los principios de la democracia para que comprendan qué se entiende por vida democrática, cuál es la relación entre democracia y centralismo y cómo poner en práctica el centralismo democrático. Sólo así se puede ampliar efectivamente la democracia en la vida del Partido y, al mismo tiempo, evitar el ultrademocratismo y la tendencia a dejar pasar las cosas, tendencia que socava la disciplina.
Es también esencial acrecentar, en grado necesario, la vida democrática de las organizaciones del Partido en nuestro ejército, a fin de estimular la iniciativa de los militantes del Partido y aumentar la capacidad combativa de las tropas. Sin embargo no puede haber tanta democracia en dichas organizaciones como en las organizaciones del Partido fuera del ejército. Tanto en unas como en otras, la democracia interna del Partido debe servir para fortalecer la disciplina e incrementar la capacidad combativa, y no para debilitarlas.
La ampliación de la democracia en la vida del Partido debe considerarse como un paso indispensable para su consolidación y desarrollo, como una importante arma que le habilitará para ser más activo y vigoroso en la gran lucha, estar a la altura de sus tareas, crear nuevas fuerzas y salir airoso de la prueba de la guerra. n
NOTA:
1. Chang Kuo-tao era un miembro del Comité Central del Partido Comunista de China que, dirigiendo una parte del Ejército Rojo, en 1935 rompió con el Comité Central, desobedeció sus órdenes y trató de socavarlo. Todavía en 1937 asistió a la Reunión de Yenán, en la que se condenó sistemática y concluyentemente su oportunismo y rebelión contra el Partido. Chang Kuo-tao simuló conformidad, pero en realidad continuó con su actividad fraccional hasta traicionar definitivamente al Partido.