“Estoy muy agradecido por el acto. Quiero agradecer a la familia de los Guerra con quienes mañana nos vamos a comer un rico asado. Estoy muy agradecido de estar con la gente de la Comisión de Homenaje, nosotros en Mendoza hemos luchado desde que tenemos un recuerdo, por los derechos humanos, como lo ha hecho mi mamá desde que sucedió el secuestro de mi papá, en la lucha por su aparición. Desde que tengo uso de memoria, en la ronda de la Plaza San Martín de Mendoza, exigiendo justicia, formando HIJOS.
“Estoy muy agradecido por el acto. Quiero agradecer a la familia de los Guerra con quienes mañana nos vamos a comer un rico asado. Estoy muy agradecido de estar con la gente de la Comisión de Homenaje, nosotros en Mendoza hemos luchado desde que tenemos un recuerdo, por los derechos humanos, como lo ha hecho mi mamá desde que sucedió el secuestro de mi papá, en la lucha por su aparición. Desde que tengo uso de memoria, en la ronda de la Plaza San Martín de Mendoza, exigiendo justicia, formando HIJOS.
Estamos muy agradecidos porque en este lugar que ha tenido tanta muerte y tanto dolor, nosotros tratemos de aportar vida, porque está la familia, están ustedes, está mi hija.
No se olviden de las conquistas que han realizado, porque parecería que cada generación tiene que comenzar de vuelta de cero y tratan de que los modelos que tengamos no sean los modelos de los que han dado su vida por otro tipo de sociedad, un modelo falso con referentes falsos. Estos treinta mil desaparecidos, y miles de compañeros son ejemplo para nosotros. Y por eso es muy bueno que en este lugar comience no sólo el juicio de Manuel sino ciento de juicios que hacen falta.
La dictadura vino a terminar con un auge revolucionario, vino a terminar con la pelea de treinta mil personas, una generación que daba la vida por otra sociedad. Tenemos que preguntarnos por qué lograron pasar con ese golpe tan sangriento. Esta semana se habló tanto de 30 años de democracia, yo me ponía a pensar que ninguna de las conquistas que se han logrado desde ese momento hasta hoy fue por ningún presidente, lo han logrado los pueblos, las luchas y sus protagonistas en las calles… Son esos grandes olvidados, como decía Rodolfo Walsh, que deberíamos recordar todos los días: los que dieron su vida con el silencio para enfrentar al enemigo, los que dieron su vida para recuperar la democracia en esa huelga ferroviaria, los que dieron su vida en la lucha de la democracia, como los que estuvieron en las puebladas de los ‘90, los indígenas qom, Mariano Ferreyra, y los miles y miles que siguen pelando para cambiar este sistema, porque, compañeros el problema no es sólo lograr que los genocidas vayan a la cárcel. El problema no es sólo lograr que en el 2015 no se terminen los juicios, el problema no es sólo que se termine con esa impunidad, el problema, como decían los 30 mil desaparecidos, es cambiar esta sociedad, el problema es que no podemos vivir en una sociedad con explotación, el problema es que no podemos vivir en una sociedad donde falte el pan, el trabajo, la tierra para quien quiera vivirla y nosotros tenemos que comprometernos con nuestra vida para seguir en esa lucha por la que los sueños de los 30 mil desaparecidos se concrete.
