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06 de noviembre de 2013

Se profundizó el castigo a la política K

Elecciones en la provincia de Buenos Aires

 Como se dio a nivel nacional, en provincia de Buenos Aires se profundizó el castigo a la política K. Cristina había nacionalizado las elecciones en agosto poniéndose a la cabeza de la campaña, acordando con Scioli. Así fue que Scioli se convirtió en el efensor del modelo “nacional y popular” del kirchnerismo en la provincia. Los resultados de las PASO dieron por perdedores a los dos. Cristina se corre ante la derrota y luego se enferma. Scioli pasa a encabezar la campaña hacia octubre, junto con Insaurralde. Por eso Scioli terminó siendo uno de los principales derrotados el 27 de octubre.
En las elecciones de octubre en la provincia de Buenos Aires, el kirchnerismo polarizó con Sergio Massa. Y Massa aumentó las diferencias de más de 5 puntos en agosto a más de 12 en octubre. Siendo el principal instrumento con el que los sectores populares castigaron al kirchnerismo.
La inflación, la inseguridad y la droga fueron los principales motivos de castigo a la soberbia del gobierno. A la semana de las elecciones, en San Martín fueron incendiados decenas de vehículos policiales contra el asesinato de un joven, que quedó en medio de una balacera entre narcos, ante la “pasividad” policial.
También fue castigado con otras propuestas en la provincia. El FIT hizo una buena elección. A pesar de que hay un sector de su dirección que es potable para las clases dominantes, es un contingente de izquierda con quienes las masas, especialmente obreras, castigaron. Están instalados nacionalmente, llevan tres años juntos y fueron paseados por los principales programas de radio y televisión en incontables oportunidades. Para muchos sectores votar “por izquierda” era votar al FIT. Nuestro principal debate con ellos es programático y de estrategia para la necesaria revolución que necesita nuestra patria.
El castigo del pueblo bonaerense tuvo un eje que fueron las luchas obreras y populares que marcaron la cancha, imponiendo sus reclamos en la agenda política, obligando a las fuerzas opositoras a hacerse cargo. Luego de las PASO se le arrancó al gobierno, entre otras cosas, la suba del impuesto a las ganancias a $15.000.
El resultado electoral del Frente Cívico y Social de Margarita Stolbitzer fue flojo. Sacó menos votos que en las elecciones del 2011: pagó el acuerdo realizado con la estructura de la UCR. Y fue castigado De Narváez por sus posiciones de derecha.
Es equivocado pensar que el voto a Massa fue un voto de derecha. Los trabajadores no querían retroceder y pusieron el blanco donde tenía que estar: en la política del gobierno nacional. A la vez, el voto a Massa no significa un cheque en blanco. Y está en curso el análisis sobre qué sectores representa Massa. Por un lado expresa la ruptura de un sector kirchnerista y un sector del radicalismo (se acaba de incorporar el diputado nacional Jano, un referente importante del radicalismo no K). Por otro aparecen sectores de las clases dominantes opositores al kirchnerismo que lo apoyaron.
La crisis y los ajustes en curso de parte del gobierno nacional, más la inflación, prefiguran grandes luchas en nuestra provincia. Nuestro Partido pugnará por estar a la cabeza de ellas junto con todas las fuerzas aliadas.
El frente Podemos hizo una buena elección, dentro de la complejidad. En agosto superamos los 110.000 votos en la provincia. Los que sin embargo no alcanzaron para sortear las proscriptivas normas impuestas por la Ley Electoral. Y un 20% más si sumamos los votos obtenidos a nivel local en los 57 distritos, sobre 135, en los que nos presentamos. 
En octubre sólo nos pudimos presentar en 24 de ellos. En el orden seccional nos presentamos en las 8 secciones en agosto y pasamos a poder a estar solo en 3.
Fue un golpe no haber podido sortear la ley proscriptiva de las PASO. Debimos hacer la campaña municipal en sólo 24 distritos, con buenos resultados. Sacamos 45.500 votos. En el conjunto de los distritos y secciones en que nos pudimos presentar hay gran alegría por la campaña desplegada: instalamos el Frente, sus candidatos y nuestro Partido. Pero fundamentalmente es de destacar la abnegada labor del conjunto de nuestros militantes, ejemplo dentro del Frente. En muchos lugares pasamos de tener referentes sociales a tener referentes políticos.
Tenemos planteado seguir proyectando a nuestros candidatos y el programa del Frente, dentro de la provincia. Y seguir la lucha por la eliminación de la traba proscriptiva y antidemocrática de la exigencia de un piso del 1,5%.
Fue dificultosa la campaña del voto programático, donde no teníamos lista, también por el grado de polarización. A pesar de eso hay experiencias muy ricas en polémicas, en algunos de esos distritos.
 
Una gran pulseada por delante
Tenemos una gran pulseada por delante. Articular un frente nacional, que nos permita fortalecer las alianzas que hemos tenido y poder ampliarla a otros sectores populares. Profundizar en un programa como el que hemos tenido en la provincia. Que el frente se integre a las luchas populares para que la clase obrera y el pueblo no sigan pagando la crisis.
Hay en el frente muchos sectores con el deseo de mantener y profundizar el mismo, cosa que nos abre grandes perspectivas. En esto es clave la jornada de lucha planteada para fines de noviembre impulsada por la multisectorial que integran la CTA, CCC, Federación Agraria, Federación Nacional Campesina, Originarios en Lucha, Federación Universitaria, ORT, MST, junto con la CGT de Moyano. Al mismo tiempo son importantes las elecciones de comisión interna y de delegados que se vienen produciendo en algunas fábricas de concentración.