El conjunto del Partido en la zona se volcó al debate y a pedir aportes donde milita, superando así la práctica de protagonizar la lucha reivindicativa como actividad principal y en muchos casos con estrechez sindicalista. Se dijo que al inicio nos preparamos para enfrentar la crisis y pensábamos que iba a ser más difícil lograr aportes que el año pasado porque hay menos plata, pero nos encontramos con la bronca contra la situación generada por la política K y con el prestigio del partido por un lado, pero también con la complejidad del debate sobre pagar la deuda externa y los fondos buitres. Se dijo que ayudó mucho el funcionamiento del frente de tesoreros, donde junto al control se podía intercambiar opiniones sobre los debates y encontrar respuestas y que en las reuniones había un clima muy habitable, de mucha camaradería, por ejemplo cuando una célula tenía dificultades el resto ayudaba, se realizaron las tareas con mucho debate y con alegría.
Cada célula desplegó varias iniciativas para llegar a su plan, generándose una gran presencia política del partido, que alumbra como seguir desplegando la lucha por instalar el paro activo, el PTP y el frente popular que impulsamos.
Sobre las reuniones y el funcionamiento del frente
Como dijo un camarada: “Las reuniones de tesoreros sostuvieron la discusión política, no sólo se vieron los números”. A su vez empezaban por los números. Mostramos al PCR como no lo habíamos hecho antes en ninguna colecta, dábamos argumentos para unir y luchar, se juntaba la plata con alegría. Una camarada planteó: “Yo era peronista, siempre cumplí con las colectas, pero ahora me abrí de tal modo que me llaman Mar… del PCR”.
Cada tesorero concurre a la reunión con su cuaderno, en el que están anotados todos los movimientos de la caja celular, cada ingreso de cotizaciones, de las actividades colectivas y de todo aporte, sobre esa base se rinde cuentas al tesorero zonal que firma cada rendición.
Un tema planteado fue que había camaradas que cotizan siempre y son también los que más piden y protagonizan las actividades, y cómo las actividades colectivas ayudan a sumar a los que son más remisos a cotizar. El cuaderno a su vez muestra esta contradicción y ayuda a su resolución.
Se planteó que cuando sos tesorero muchos en el Partido te dicen “Ahí viene éste a pedirte plata…” y que eso te bajonea, discutir en el frente este tema ayudó y al ir para afuera nos fue mucho mejor.
También señaló un secretario de célula que “El tesorero no quiere ir a las reuniones porque le resulta difícil hablar, hoy yo lo acompaño, pero tiene que entender que él fue elegido por toda la célula y tiene que asumir su rol, porque eso es la división de tareas”.
Se concluyó la necesidad de mantener una reunión mensual del frente luego de colecta. También hacer una actividad mensual, rodeando cada vez a una célula, y así fortalecer la caja celular y contribuir a las finanzas generales del partido.
Compañeros del Comité Zonal plantearon que previo a la colecta, secretarios de célula y tesoreros, habían participado del estudio de las resoluciones del 12 Congreso, lo que unido a la campaña de rectificación fueron una gran contribución para éste éxito. Valoran que la colecta generó una nueva situación en el zonal, que darle continuidad a este clima es necesario para poder abordar la complejidad de la situación política que se nos presenta, con la posición del gobierno frente a los fondos buitre y para desplegar las actividades hacia el paro activo, proyectar el PTP y el frente popular. Al calor de éstas batallas políticas se proponen duplicar los afiliados al PCR, uniendo el paro activo, las luchas para torcerle el brazo a la política kirchnerista y la batalla en el terreno electoral en el 2015.
