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15 de abril de 2015

Ocultan los datos de pobreza

Los trabajadores del Indec contestan al gobierno

Los dichos de Kicillof sobre la “estigmatización de los pobres” tuvieron su rebote. El ministro coordinador Aníbal Fernández dijo que “el gobierno no está para contar pobres”. Por su parte, Norberto Itzcovich, director del Indec, fue instado a responder, y al igual que en el caso de los ministros, hizo agua.

Los dichos de Kicillof sobre la “estigmatización de los pobres” tuvieron su rebote. El ministro coordinador Aníbal Fernández dijo que “el gobierno no está para contar pobres”. Por su parte, Norberto Itzcovich, director del Indec, fue instado a responder, y al igual que en el caso de los ministros, hizo agua.
Tres funcionarios de alto rango declaran públicamente que no saben cuántos pobres hay y lo que es peor, que no tiene sentido saberlo.
¿Hacen falta más pruebas para demostrar que este gobierno destruyó sistemática y deliberadamente al Indec privándonos de la posibilidad de monitorear su gestión?
Podrían llamar a todos los técnicos que expulsaron, tal vez ellos estén en condiciones de explicarles las formas alternativas para medir la pobreza y la importancia de contar con estos indicadores para delinear políticas públicas.
El director del Indec se pierde en una serie de devaneos metodológicos que apuntan a invalidar cualquier tipo de medición de la pobreza, para luego terminar ensalzando la gestión del gobierno utilizando los mismos indicadores que defenestrara en el párrafo anterior.
Curiosamente, el Indec dejó de publicar los datos cuando ya el dibujo era insostenible. Ejemplo de ello es el siguiente cuadro que forma parte del Documento Técnico Nº 9 “Pobreza e Indigencia: lo que el Indec sigue escondiendo” publicado por la Comisión Técnica ATE-Indec, disponible en www.ateindec.org.ar (diciembre 2014).
En dicho documento damos una explicación de cómo hubieran aumentado los índices de la pobreza si el Indec hubiera continuado con el método tradicional de medición que fue dejado de publicar abruptamente.
Las razones para no dar datos sobre pobreza e indigencia responden a una decisión política que lejos está de obedecer a un obstáculo técnico o metodológico. ¿No será que para el gobierno omitir el dato sobre pobreza es conveniente?