En este marco, el 17/6 se realizaron en Tucumán diferentes actividades convocadas y organizadas por Liberpueblo. Por la mañana se presentó un amicus curiae, que fue elaborado por Liberpueblo, y firmado por todos los organismos que integran el espacio Memoria Verdad y Justicia, para ser tenidos en cuenta como parte en la causa que investiga la desaparición del soldado conscripto Alberto Ledo. A su vez se realizó una presentación masiva de habeas corpus en Tribunales de las ciudades de Buenos Aires, La Plata y Quilmes. En Tucumán, fuimos recibidos por el juez que lleva la causa Dr. Bejas, quien no dio demasiadas respuestas de por qué no avanza la causa, trasladando responsabilidades de la misma a los fiscales.
También nos recibió el fiscal general Dr. Gómez. Esta presentación se hizo en Tribunales de Tucumán junto a la hermana de Alberto, Graciela Ledo, con los compañeros del espacio Memoria Verdad y Justicia y los compañeros que se concentraron en la calle, PCR, CCC, APDH, PTS, PO, MST para exigir que avance la causa que se encuentra empantanada. Causa por la desaparición de Alberto Ledo, cuyo principal responsable es el genocida Cesar Milani que no fue citado a indagatoria.
Por la tarde en la Escuela de Comercio de Monteros se realizó un acto conmemorativo donde se descubrió una placa contamos con la presencia de Graciela Ledo, el secretario de DDHH de la Rioja, autoridades de la escuela, director, vicedirectora, supervisora, docentes y alumnos, además de todas las organizaciones políticas, sociales, organismos de DDHH de Tucumán, Fadetuc, APDH, espacio Memoria Verdad y Justicia, PCR, CCC, Liberpueblo, Comisión de homenaje a Madres de plaza de Mayo de Quilmes, entre otras. Hablaron, por Liberpueblo Diana Kordon, por Madres Cristina Cabib, Rubén Porta por el PCR.
Esta escuela de la ciudad de Monteros, fue en 1976 la base del ejército Argentino (Batallón 141 Ingenieros en Construcciones con asiento en la Rioja), lugar desde donde se produjo el secuestro de Alberto Ledo, siendo los principales imputados los oficiales Esteban Sanguinetti y Cesar Milani. El primero de ellos se encuentra procesado y el restante aún no fue citado a prestar declaración indagatoria.
Dijimos nunca más y nos dieron genocidas con impunidad
Cesar Santos Gerardo de Jesús Milani (Milanito, como lo llamaban los genocidas Bussi y Menéndez) siendo un subteniente del Ejército con 22 años fue destinado en comisión al operativo independencia durante el año 1976 en la provincia de Tucumán ocupándose, ya en esa época, a tareas de inteligencia. Así fue parte de la máquina dictatorial que hizo desaparecer 30.000 compañeros, que mató, torturó, robó niños y cometió varias atrocidades más, como el asesinato al compañero Alberto Ledo.
Este personaje, el 3 de julio 2013 fue designado jefe del Estado mayor del Ejército Argentino por la presidenta Cristina Kirchner a pesar de existir pruebas respecto de su responsabilidad en violaciones a los derechos humanos, además del hecho de estar siendo investigado por supuesto enriquecimiento ilícito.
Con la lucha logramos el pase a retiro, ahora vamos por justicia
Días después del aniversario de la desaparición de Alberto y de las actividades llevadas a cabo en todo el país en su memoria y exigiendo justicia Milani pidió su pase a retiro por “cuestiones estrictamente personales”. Este hecho es una victoria del movimiento de derechos humanos y del pueblo que logró que no pueda mantenerse en su cargo un genocida.
Ha sido importante también porque nos permitió poner en evidencia ante millones que éste no es el Gobierno de los derechos humanos. Pero con el pase a retiro de Milani no se termina la cosa.
El juez Daniel Bejas en complicidad con el gobierno nacional, se niega a llamar a indagatoria y además la Justicia paraliza las otras cuatro causas que este militar tiene en la Rioja. Debemos redoblar esfuerzos y unir todo lo que pueda ser unido para lograr que la causa avance y conseguir cárcel común perpetua y efectiva para éste y todos los genocidas que están libres.
Cárcel a todos los genocidas, justicia para todos los compañeros.
