La compañera Codoni comenzó reivindicando la experiencia de las recientes elecciones de Santa Fe donde se empezó a demostrar que “la juventud es protagonista. También demostró la experiencia de Santa Fe que podíamos sacarnos ese malestar, esa angustia que teníamos atravesada en la garganta después de que en las elecciones anteriores le habían prácticamente robado la banca a un gran periodista, a un luchador popular, a un gran referente de toda la juventud como Carlitos del Frade. Hoy nos va a representar y que más alegría que lo haga con Memé”.
Luego se refirió a cómo Víctor dijo ‘júntense todos y elijan a una joven’… “y en eso con muchas discusiones me tocó a mí estar acá, y me tocó a mí porque fue la decisión de los compañeros de Santa Fe pero también fue la decisión de todas las fuerzas políticas que conforman el Frente.
“Nos tocó discutir esto que estamos diciendo, que hay una juventud que está para más y hay una juventud que quiere protagonizar. Pero que quiere hacerlo para hacer una cosa distinta de la que hacen los otros jóvenes que protagonizan la política, nosotros queremos ser gobierno y ser la voz de esos que quieren acallar, queremos hablar de esos temas que los otros no quieren que hablemos”.
La juventud trabajadora
Contó la Codo que en la audiencia pública en la Cámara de Diputados convocada por De Gennaro “Nos encontramos con que esa cifra oficial que dicen que un 40% de los trabajadores están en negro en Argentina tiene mucho que ver con la juventud. Tiene mucho que ver con el sector privado. Yo vengo de una provincia donde un monopolio como Acindar tiene el 50% de sus trabajadores precarizados, con contratos basura, los pibes no saben hasta cuándo van a tener derecho a trabajar; pero eso no pasa solamente en el sector privado, pasa en el sector público y cómo no va a pasar si hoy veíamos y escuchábamos a los propios compañeros del Ministerio de Trabajo que denunciaban no solamente que ese ministerio no hace nada para ningún trabajador, sino que ellos son víctimas de la precarización.
“Nosotros decimos que en la juventud trabajadora tenemos un desafío porque tenemos que empezar por esos pibes que no tienen laburo y lo están buscando, tenemos que seguir por estos compañeros que sufren la precarización y después dar un debate con los que están en blanco y quieren ir por más, porque el movimiento obrero logró con su lucha que se reabran las paritarias en Argentina, pero esas paritarias no pueden ser una formalidad, no pueden estar corriendo atrás de la inflación, esas paritarias no pueden tener el tope que el ministerio y el gobierno nacional les fijan. Como lo demostraron los aceiteros de la provincia de Santa Fe, se puede lograr un salario que sea igual a la canasta familiar, se puede lograr que los trabajadores tengan el derecho no solamente de alimentar a su familia y de pagar un alquiler sino que puedan cumplir todas sus necesidades y es justo que así sea. Esa es la pelea por la dignidad que no nos pueden robar, pero también la juventud tiene que discutir los convenios colectivos de trabajo porque los pibes y las pibas a los pocos años de trabajo quedan reventados.
El 2% de los propietarios tiene el 50% de las tierras
“Tenemos un gran desafío, hablar de algo oculto, de algo que desde que los patriotas de Mayo perdieron y gobernaron otros es el nudo de la Argentina, el tema de la tierra. No quieren hablar de estos temas para seguir sosteniendo la dependencia, la precarización y la pobreza. Estamos en un país donde el 2% de los propietarios, que son terratenientes, concentran el 50% de las tierras. Eso es así desde que se conformó el Estado en Argentina… nosotros tenemos que poder discutir el tema de la concentración, porque tenemos que discutir qué se produce en Argentina, quién lo produce y para qué se produce. Es una tarea muy importante; conozco compañeros que han militado conmigo en Federación Agraria que la única salida que les dio este modelo es el boleto de colectivo, o irse a manejar un camión para ir a trabajar de otra cosa, es la juventud que está altamente calificada, la que hace la bonanza de la divisa de la soja en Argentina, si nosotros no discutimos la concentración de la tierra nos perdemos un gran debate.
“A ese gran debate le tenemos que sumar otro, no podemos dejar de denunciar que a la concentración de la tierra en estos últimos años se le sumó el avance de la concentración de la producción. Hay un 20% de los productores que produce un 80% de la soja en la Argentina, y hasta Cristina tuvo que salir a dar la razón de que eso era así.
“Estamos dispuestos a dar este debate porque creemos que es necesario repoblar el interior, que no se puede más una Argentina donde la mitad de la población vive a cien kilómetros del Obelisco… ¿y quiénes son? Son los expulsados del latifundio, los compañeros que vienen de Chaco, de Formosa, que vienen a engrosar todos esos cordones de pobreza cuando son los que podrían estar trabajando la tierra. Nosotros decimos que vamos por un millón de chacras y parece imposible pero no lo es, porque si nosotros podemos discutir la concentración de la tierra, podemos tomar un paquete de medidas para el estímulo para la producción, tenemos tierra, tenemos mano de obra calificada… Compañeros, en este país tenemos que terminar con eso de que las penas siempre son nuestras y la tierra y las vaquitas siempre son ajenas.
La juventud estudiantil
“Para hacer todo esto vamos a necesitar profesionales. Tenemos un gran debate en la universidad. Cuando empecé a militar en el año 2000 en la universidad mi primera lucha fue contra el ajuste de López Murphy: se caían los techos, no cursábamos nunca porque estábamos todos los días cortando la calle por esa situación. Es una situación que ha cambiado; hoy voy a mi facultad y está bárbara, tiene de todo, pero los compañeros universitarios explican que tenemos un problema, porque no se frena la deserción. Y tenemos que pasar a discutir que un pibe para estudiar tiene que sí o sí trabajar, y que por más que trabaje la inflación lo termina dejando afuera de la universidad. Ese es un debate…
“Pero entendemos que el principal debate que tenemos que dar es que para terminar con este modelo de dependencia hay que discutir a favor de quién van a estar las universidades, y para qué se van a formar nuestros compañeros: si para ser un médico diagnosticador de los grandes laboratorios o se van a formar para ser un médico como el Chino de La Matanza, si se van a formar para ser profesionales al servicio de los grandes monopolios o para que puedan desarrollar la industria nacional; para vender el paquete de Monsanto y sojizar la Argentina, o para sumarse a este proyecto del millón de chacras, con la chacra mixta, donde en la Argentina florezcan un montón de producciones. Ese debate tenemos que afrontar y no quieren que lo demos pero es un debate que va a la médula de la situación que viven los estudiantes en la Argentina.
Ser joven y mujer en la Argentina es mortal
“Con Memé hace años que vamos al encuentro de mujeres, para nosotras es muy especial… vamos como una más, no solo como militantes políticas, vamos también a contar nuestros problemas. Ser mujer es difícil en todos lados, en Argentina también. Ser joven y mujer más, siempre fue difícil, el problema compañeros, es que hoy ser joven y ser mujer en la Argentina es mortal. Es mortal porque cada 30 horas perdemos a una compañera por causa del femicidio. Es mortal porque si bien han tomado algunas medidas la trata no se frena en este país. Y es mortal porque muchas compañeras mueren por abortos ilegales –nosotros tenemos una consigna siempre que es ‘Educación Sexual para poder decidir, anticonceptivos para no abortar y aborto legal para no morir’–. Ninguna mujer quiere pasar por esa situación.
“Tenemos que dar una gran discusión, por nosotros, por nuestros sufrimientos y porque es lamentable que haya una presidenta mujer que no pueda hablar del problema de las mujeres en Argentina. Acá hubo un 3 de junio que trasladó eso que discutíamos solamente en los Encuentros de Mujeres, en simultáneo a todas las ciudades del país. Fue un fenómeno de las grandes ciudades y de las pequeñas localidades. Todas las mujeres salimos a decir ¡Basta! Acá tiene que haber un Estado que intervenga para resolver el problema de esas mujeres, no que tenga una ley y no la implemente, ni le dé presupuesto, no un Estado que destine solamente el 0,0027 al tema de las mujeres. Nosotros tenemos que proponer otra cosa no solamente porque es necesario, ¡lo tenemos que hacer por Melina, por Chiara, por todas!
Este Frente le dice ¡No a la droga!
“Como si esto fuera poco para la juventud nos meten la droga. En la juventud del Frente Popular tuvimos mucho debate con este tema. Partimos de decir ‘No a la droga’; primero por el tema del narcotráfico y segundo porque tenemos que tener en cuenta que no es solamente un problema de los narcos que vinieron con connivencia del gobierno, es un problema de los pibes que en los barrios no tienen ninguna expectativa de vida y la única salida posible es ser soldadito de un narco. Hablábamos el otro día con un pibe en un barrio que nos decía ‘que querés que vaya a trabajar a la metalúrgica si me pagan seis mil pesos’. Hay una juventud que no tiene expectativa de nada y entra en una guerra que ni siquiera es por sus ideales.
“Tenemos que poder discutir esas cosas, no solamente para discutir la lucha contra el narcotráfico, lo tenemos que hacer porque no puede ser que la droga siga siendo un instrumento de dominación, que mate toda la rebeldía que está en nosotros. Tenemos que poder ir a transmitirle a esos compañeros que hay otra salida y que juntos podemos pelear, como dice Carlitos [del Frade] para por lo menos empatarle este partido a la droga. Por nuestra rebeldía, para poder combatir lo que este modelo nos quiere meter, para poder pelear por otra política, para poder pelear por otra Argentina, necesitamos una juventud lúcida y fuerte, lúcida y que se impregne de sus ideales, que pueda dar una batalla consciente de lo que está haciendo. No que dé la vida por un narco, la vida la tiene que dar por un proyecto de liberación nacional.
Disputar los distintos contingentes de la juventud
“Para terminar quiero decir que tenemos una tarea muy importante: tenemos frente, tenemos candidatos, tenemos un programa y con todo eso tenemos que ir a batallar. Tenemos que discutir con distintos sectores de la juventud en la sociedad, sectores que tienen ideas distintas. Somos un frente que tiene una línea justa y tenemos que ir a disputar a los distintos contingentes de la juventud. No puede haber en la Argentina jóvenes –y no voy a hablar de los que gobiernan–, que se ilusionaron con este modelo que dice que pelea por la liberación, para los que la salida sea taparse la nariz y tragar sapos. Les tenemos que discutir que la liberación es posible, y lo es por las propuestas de este Frente.
“Tenemos que discutirle también a una parte que quizás nunca se entusiasmó con este gobierno, que otra alternativa política para la Argentina no son esos que proponen la no intervención del Estado, no podemos ir a votar una propuesta que sea así porque la ‘no intervención del Estado’ quiere decir que sí hay un Estado que interviene, para los más poderosos.
“Y creo que tenemos que ir a discutir con esos que no se entusiasmaron con el kirchnerismo, que quieren ir por mucho, mucho más. Pero les tenemos que decir que con los trabajadores solos no alcanza. Los trabajadores tienen que encabezar y tienen que dirigir, pero hace falta juntarnos todos: hace falta juntarnos con los chacareros, con los pueblos originarios, con los desocupados…
“Tenemos una gran tarea política que es pasar en agosto para poder ser una opción en octubre. Tenemos candidatos, tenemos programa, pero también tenemos que tener esfuerzo y militancia… y creo que nos tenemos que ir convencidos de que la nuestra es posible, la nuestra es necesaria. Nos vamos de acá con el convencimiento de que no puede quedar fábrica, chacra, escuela, universidad, o barrio al que no vayamos a dar esta batalla política. Este es un frente que va a participar de las elecciones pero también es un frente que vino para quedarse en la Argentina”.