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12 de agosto de 2015

Agonizan las economías regionales

 
En el suelo patagónico yacen 250 millones de kilos de peras y manzanas que los productores no cosecharon. La industria frigorífica perdió 138 empresas y 21.000 trabajadores. La vitivinicultura tuvo en el 2014 un sobrestock de vino de 300 millones de litros. La Argentina ha perdido el mercado brasileño; norteamericanos y rusos proveen ahora de trigo a Brasil, que era nuestro principal comprador. 

 
En el suelo patagónico yacen 250 millones de kilos de peras y manzanas que los productores no cosecharon. La industria frigorífica perdió 138 empresas y 21.000 trabajadores. La vitivinicultura tuvo en el 2014 un sobrestock de vino de 300 millones de litros. La Argentina ha perdido el mercado brasileño; norteamericanos y rusos proveen ahora de trigo a Brasil, que era nuestro principal comprador. 
En el año 2006, cuando Kirchner cerró las exportaciones de carne, éramos el tercer exportador mundial de carne. Hoy hemos caído al 13º lugar, mientras Paraguay ocupa el sexto lugar y Uruguay el séptimo. De un stock promedio de 45 millones de cabezas de ganado ovino, que Argentina tenía hace 40 años, en 2014 caímos a 14,5 millones.
De ser los primeros exportadores mundiales de limones, hoy una profunda crisis de la producción de cítricos golpea duramente a la provincia de Tucumán. 
En los años de bonanza, el gobierno se quedó con la ganancia de la industria lechera y cuando nos golpeó la crisis mundial de esa industria, se cerraron en la Argentina 8 mil tambos, creando un grave problema social porque en cada tambo trabajan tres o cuatro familias. Ahora, la caída del precio internacional de la soja golpea a los productores de muchas regiones del país, donde ya no es rentable.