La Ley de Servicios de Comunicación Audiovisual se planteó democratizar, desmonopolizar los medios y garantizar la pluralidad de voces, pero a casi seis años de su aprobación, ha quedado más claro lo que venimos analizando sobre el verdadero objetivo del gobierno: conformar un gran grupo monopólico con medios propios, estatales o de empresarios pertenecientes al grupo K, socios o aliados, desplazando al holding Clarín del control de los medios.
Estos dos hechos contrastados revelan las contradicciones en la política de aplicación de una Ley, que dice buscar pluralidad pero solo encuentra causas judiciales.
El 4 de septiembre, efectivos de la Policía Federal irrumpieron violentamente en los estudios de Antena Negra TV, donde allanaron y secuestraron sus equipos de transmisión, ocasionando destrozos de las instalaciones. Traían una orden judicial que imputa a un integrante de la cooperativa Antena Negra TV Ltda. por interferencia de las comunicaciones de la empresa de seguridad Prosegur, que trabaja en conjunto con la Policía Federal.
Trece días después, el gobierno porteño de Mauricio Macri, clausuró un galpón del canal televisivo C5N.
El 11 de septiembre, los integrantes de Antena Negra TV marcharon hasta la sede del Afsca (Autoridad Federal de Servicios de Comunicación Audiovisual) y Aftic (Autoridad Federal de Tecnologías de la Información).
En esa movilización fueron acompañados por más de 350 personas, grupos que conforman RNMA, Amarc, Farco, Red Colmena, medios independientes, organizaciones sociales, sindicales, políticas y de derechos humanos, como la madre de Plaza de Mayo Nora Cortiñas.
En la reunión se logró que Afsca se comprometiera en tres puntos claves que refieren a la ayuda financiera que requiere el canal luego de los destrozos provocados en el violento allanamiento, la intervención de Afsca en la causa judicial y, el más importante, el compromiso de abrir a la brevedad el concurso para la categoría “Licenciatario Operador en Alta Potencia, sin fin de lucro” que el canal solicitó.
Sin embargo, distinta fue la metodología, las declaraciones y la rapidez de Martín Sabatella (presidente de Afsca) con respecto a C5N, quien envió una nota el mismo 17 de septiembre al jefe de Gobierno de la Ciudad de Buenos Aires Mauricio Macri en la que demanda dejar sin efecto la clausura realizada en instalaciones del canal de noticias C5N. Entre sus declaraciones planteó “es un hecho de amedrentamiento que atenta contra la libertad de expresión.
Mientras que el camino para regularizar un medio comunitario está colmado de obstáculos, Afsca se encarga de allanar el camino de los medios hegemónicos. Así se puede ver cómo el canal de noticias C5N, perteneciente a la empresa Telepiú SA, es beneficiado con una licencia sin concurso dada en la década de los 90. Luego, con la resolución 322/2010 de Afsca se le permite reemplazar los canales 22, 23, 24 y 47 (categorías C, C, C y F respectivamente) por el canal 27 de categoría A, así es como sin concurso se le asigna una licencia.
A esta irregularidad le sigue otra: en la del 26 de febrero de 2015, Afsca canceló “la asignación del canal 27 cuya titularidad corresponde a la firma Telepiú SA”. Posteriormente, el organismo abrió un concurso en el que participó C5N y que está pendiente de resolución. Esto significa que el canal de televisión de Cristóbal López no cuenta con una licencia al igual que Antena Negra TV.
C5N es un medio de comunicación con fines de lucro que recibe dinero de la pauta oficial, es reconocido como un medio y es protegido del avance de la Justicia por parte de Afsca, todo sin poseer licencia. Antena Negra TV en las mismas condiciones fue presionado por la empresa privada Prosegur, violentamente allanado por la Policía Federal y criminalizado por la Justicia.
Los organismos estatales que dicen velar por los medios de comunicación comunitarios, alternativos y populares prefieren favorecer a medios hegemónicos y siguen sin cumplir con sus obligaciones fijadas tras la sanción de la Ley de Servicios de Comunicación Audiovisual: plan técnico, reorganización del espectro radioeléctrico, reserva del 33% para medios sin fin de lucro y apertura a concurso para estos últimos en todas las categorías. Estas acciones muestran que para la Justicia hay dos metodologías: C5N continúa al aire, Antena Negra TV no.
Debemos continuar y profundizar las iniciativas conjuntas con todos los sectores populares para lograr que le devuelvan los equipos y puesta en el aire de Antena Negra TV, enfrentando la política hegemonista del gobierno y exigiendo que se apliquen aquellos aspectos de la ley que se han conseguido con muchos años de lucha, y que se pudieron obtener aprovechando las contradicciones entre el gobierno y los otros sectores monopólicos.
Todo esto en el camino de pelear por una política de medios verdaderamente popular y democrática, que esta ley no garantiza.