El importante triunfo electoral del actual concejal Carlos Fernando Arroyo es consecuencia del falso progresismo del gobierno de Gustavo Pulti. Nosotros trabajamos para que sea el pueblo marplatense, desde la unidad de las fuerzas populares, el que pusiera fin al falso progresismo de la gestión municipal. Es por eso que luchamos en la calle contra cada medida antipopular adoptada y bregamos por la existencia de un Frente Popular en las últimas elecciones. Lamentablemente no llegamos a instalarnos y la legislación proscriptiva de las PASO nos excluyó de las elecciones de octubre.
Luego de los resultados, sostenemos lo que dijimos durante la campaña electoral: “Pulti nos deja una de las ciudades más desiguales de la Argentina y Arroyo no es el camino para resolver los graves problemas planteados”. Podríamos decir, sin temor a equivocarnos, que vista la trayectoria y analizando las declaraciones públicas del próximo intendente, nuestra visión se hace más sólida.
Bajo el tamiz de la austeridad y del cuidado de los recursos públicos, Arroyo prepara un brutal ajuste. ¿Se puede tener duda de ello? Creemos que no y hacerlo nos llevaría a una situación de desamparo y desorganización popular cuando se produzca. Es importante tomar dimensión de la preocupante situación planteada.
Otro de los temas que nos preocupan, y en el que queremos hacer especial hincapié, es en la vinculación de la agrupación atlántica del doctor Arroyo con agrupaciones y personajes que encarnan lo más retrogrado, xenófobo y racista de la ciudad. Personajes como Carlos Pampillón, quien acumula denuncias por sus actitudes y prácticas neonazis, como el escrache a la comunidad boliviana, el escrache al monumento por la Memoria, la Verdad y la Justicia de la Base Naval, y el escándalo en el último Encuentro Nacional de Mujeres, se muestra muy cercano al próximo intendente. La ausencia de Carlos Arroyo en la sesión del Concejo donde se declaró a este personaje persona no grata despierta mucha preocupación. Nos preocupa de sobremanera la ausencia de Carlos Arroyo en los actos del 24 de Marzo. Es importante que todos los sectores políticos, sociales y culturales le exijan al próximo intendente una postura clara y definida contra este tipo de prácticas y personalidades.
Por otro lado, el doctor Arroyo, en un discurso contradictorio, ha planteado la importancia de recuperar el dinero que acumula el Estado nacional en concepto de retenciones a las exportaciones del pescado elaborado en la industria marplatense. Esta es una medida positiva. Permitiría recuperar para la ciudad cientos de millones de dólares y volcarlos a la producción y el empleo. El problema es que el próximo intendente formula esta propuesta en el marco del proyecto que encabeza Mauricio Macri, quien no ha explicitado absolutamente nada sobre este tema. Sí tiene declaraciones alejadas al federalismo y al incentivo de las economías regionales. Proponer medidas de corte federal y nacional en el marco de un proyecto de corte liberal nos parece una tomada de pelo. Desde los sectores populares de la ciudad debemos exigirle al nuevo intendente que efectivice esta propuesta.
El resultado electoral es producto de una pésima gestión municipal
Gustavo Pulti no fue capaz de resolver los grandes problemas del pueblo marplatense. El desempleo estructural de la ciudad continuó profundizando el cuadro de pobreza, trabajo en negro, precarización laboral. Este cuadro social fue tierra fértil para el crecimiento del delito y el narcotráfico. El pultismo pensó que podía resolver su perfil progresista cooptando a dirigentes vecinalistas, sindicales y sociales que, bajo el discurso de “lo posible”, se subordinaron al poder de turno. Su alianza explicita con el sector de poder que encarna la figura de Aldrey Iglesias es la muestra clara del contenido de su gobierno. No tocó el negocio del transporte y negó, hasta que no pudo sostenerlo más, el boleto universitario y terciario. Administró la crisis de la pesca a favor de los empresarios pesqueros. Desde la crisis del 2012 solo se limitó en “unir a las partes” y dialogar con el gobierno nacional. Se perdieron miles de puestos de trabajo y solo se limitó a ser mediador. Nunca estuvo del lado de los trabajadores y de los intereses del pueblo marplatense. Nunca se plantó ante el vaciamiento del Inidep. Nunca tuvo propuestas para reactivar la industria naval marplatense. Se mostró como un intendente abierto a los problemas pero nunca tomó definiciones reales. Fue un funcionario del poder marplatense y su falso progresismo derivó en la no resolución de los problemas de fondo de la ciudad. Los altos niveles de corrupción en las contrataciones y las licitaciones públicas han sido una constante del gobierno municipal. Es responsabilidad del pultismo-kirchnerismo el crecimiento de experiencias como el arroyismo.
En el mes de octubre, Mar del Plata ha sido sede del multitudinario Encuentro Nacional de Mujeres. La ciudad goza de una rica historia de luchas por la liberación de la mujer y en defensa de los derechos femeninos. Necesitamos de un Estado con activas políticas públicas en la erradicación de la violencia, necesitamos un Estado municipal con un activo protagonismo en la lucha cultural contra la misoginia, el abuso, la discriminación, etc. En este sentido, son preocupantes las declaraciones machistas y conservadoras del Dr. Arroyo en torno al rol de la mujer en la sociedad.
Por último, el doctor Arroyo habla como si fuera patrón y dueño del poder en la ciudad. Habla en primera persona como si la gente le hubiera dado un cheque en blanco para que haga y deshaga a su antojo. Le advertimos que el pueblo marplatense y sus organizaciones van a ser guardianes de lo conquistado y protagonistas de las decisiones futuras.
Seguiremos trabajando, construyendo y luchando junto al pueblo para fortalecer la organización popular de cara al ajuste que preparan y fortaleciendo al Frente Popular y al PCR por una Argentina libre, soberana y justa.