El Monumento a las Madres de Neuquén, nuevamente fue escenario de una cita obligada: acompañar a nuestras queridas Madres del Alto Valle de Río Negro y Neuquén, ejemplo de lucha. Grandes luchadoras, quienes en forma ininterrumpida e independientemente de los gobiernos de turno, continúan exigiendo justicia, ante el genocidio perpetrado por la dictadura y sus cómplices civiles. Madres, que siempre acompañaron las luchas de los sectores más oprimidos.
El Monumento a las Madres de Neuquén, nuevamente fue escenario de una cita obligada: acompañar a nuestras queridas Madres del Alto Valle de Río Negro y Neuquén, ejemplo de lucha. Grandes luchadoras, quienes en forma ininterrumpida e independientemente de los gobiernos de turno, continúan exigiendo justicia, ante el genocidio perpetrado por la dictadura y sus cómplices civiles. Madres, que siempre acompañaron las luchas de los sectores más oprimidos.