Las cuestiones pendientes en las fábricas y la difícil situación que atraviesa Fasinpat – Ex Zanon- en lo económico y en la gestión, jugaron un papel determinante en el resultado electoral.
Las cuestiones pendientes en las fábricas y la difícil situación que atraviesa Fasinpat – Ex Zanon- en lo económico y en la gestión, jugaron un papel determinante en el resultado electoral.
Compañeros/as integrantes de la ex Lista Obrero Gris (de la cual fuimos parte) también apoyamos activamente a la Lista Marrón, entendiendo que es necesario hacer cambios de fondo en la política hacia adentro y afuera de la fábrica, y en el manejo de la cooperativa Ex Zanon.
Este resultado abre la posibilidad de que los obreros y las obreras de Zanon puedan avanzar en resolver la situación económica de la cooperativa y lograr un verdadero control obrero.
A continuación compartimos un volante que repartimos con los compañeros, desde hace más de una semana que aporta a entender la situación del Sindicato y la fábrica Fasinpat en particular.
Frente a las elecciones del S.O.E.C.N.
Por un sindicato que defienda los derechos de los trabajadores
Por un cuerpo de delegados representativo de las fabricas
Para garantizar un verdadero control obrero de la producción, la administración y la comercialización
Ante las elecciones de nuestro sindicato, hacemos una breve descripción de cómo estamos en las tres fábricas que componen nuestro sindicato.
En FASINPAT la situación es grave, tenemos $ 80 millones de deuda de gas, más $15 millones entre deuda salarial y con otros proveedores. No estamos llegando a los metros cuadrados de producción necesarios, por lo cual se acumula una deuda de 1 millón de pesos por mes.
Tenemos las maquinarias deterioradas y pocas posibilidades de un financiamiento (créditos o subsidio) para afrontar este problema.
En Cerámica NEUQUEN estamos mejor desde el punto de vista de la producción, con maquinarias más modernas, y si bien está en manos de los trabajadores, al no tener la expropiación, y estar el proceso de quiebra en manos del juzgado, sigue latente la posibilidad de perder la fábrica.
En la Cerámica CERSINPAT se avanzó, pero no está terminado el trámite de expropiación.
Nuestro gremio dejó de ser un instrumento que tome seriamente estos problemas, carece de un análisis serio sobre estos temas, como los de nuestros derechos y los de una obra social digna para nuestras familias y ha sido en este sentido, más un instrumento político partidista, que una herramienta del conjunto de los trabajadores. Así se fue sembrando un escepticismo pernicioso y peligroso, donde muchos compañeros se desafiliaron, debilitándonos cuando están en peligro la estabilidad de las fuentes de trabajo.
Es en este contexto, estamos seguros que si cae Fasinpat, no solo perderemos esta fuente de trabajo, también va condicionar políticamente a todo el resto de los trabajadores de empresas recuperadas.
Así como la recuperación de Zanon fue un ejemplo y sostén de la lucha de los trabajadores de las otras cerámicas, su caída afectaría al resto de las empresas manejadas por los obreros.
¿Qué fue lo que pasó para que llegáramos a esta situación?
La causa es que la dirección política de la fábrica, y del Sindicato que hegemonizó el PTS durante muchos años, impulsó la idea de que una fábrica recuperada en el capitalismo no sobrevive, que tenía que ser absorbida por el Estado. Entonces no se plantearon mejorar la fábrica, sostener la producción, tecnificar, etc.
Tener una economía sana y en blanco, controlable por los trabajadores, que nos permita exigir créditos blandos, que el Estado te tenga como proveedor privilegiado, leyes impositivas menos severas, etc.
Esta línea, en definitiva, no nos permitió impulsar una lucha política junto con las otras fábricas recuperadas. Tampoco golpear junto con sectores de la industria nacional, enfrentando la política de asfixia del gobierno nacional que benefició la entrada de cerámicos y porcelanato de los monopolios extranjeros.
Otra causa, es que siempre dividieron la lucha política, de la lucha por la producción. La parte política y la parte productiva como la llamaron.
Sostener la producción implica pelear los objetivos comunes de producción, de disciplina y de convivencia aprobados en las asambleas.
Esta división entre lo productivo y lo político generó camarillas. Por eso comenzaron a hacer la vista gorda con los que no laburaban o con los que no cumplían. A ser permisivos con quienes violaban las normas de convivencia, y se castigaban a los compañeros que eran críticos del manejo de distintos aspectos del manejo de la cooperativa, aunque esto atentara contra la gestión obrera.
Esta situación generó división entre los compañeros, que resolvieron de mal modo contradicciones entre los propios compañeros, y una buena cuota de bronca y desánimo.
A esto hay que agregar que una parte importante de los compañeros ven que algunos dirigentes usaron el prestigio de la fábrica para llegar al Parlamento.
¡PODEMOS CAMBIAR ESTA SITUACIÓN!
Por si fuera poco, mientras avanzaban nuestras dificultades para producir, durante 2 años, algunos compañeros del sector independiente, con la complicidad del PTS nos llevaron atrás de las promesas kirchneristas. El gobierno garantizó el subsidio a las petroleras con millones de dólares, pero el crédito del bicentenario que prometió el ministro Kicillof nunca llegó.
Hay muchos compañeros que piensan que no es posible revertir esta situación, el escepticismo ganó a una parte importante de los compañeros en la fábrica.
ES POSIBLE CAMBIAR ESTA SITUACION, pero esto requiere, que HAGAMOS CAMBIOS PROFUNDOS en el manejo y control de la Cooperativa. Donde la producción y especialmente la ADMINISTRACION Y COMERCIALIZACION deben estar controlada por los Delegados de los trabajadores de los distintos sectores de la fabrica y las ASAMBLEAS periódicas. Esto permitirá tener una sana economía en blanco donde se ejerza el verdadero control obrero.
Para esto tenemos que fortalecer nuestro gremio, formar un fuerte cuerpo de delegados de todas las fábricas y poner el centro en la defensa de la producción. Podremos así garantizar la estabilidad laboral, un salario digno y un efectivo control obrero de la producción.
La situación política que se viene con el Macrismo, va a ser compleja y difícil para toda la clase obrera. La caída de los precios internacionales de lo que producimos en nuestro país, y con una economía dependiente como la nuestra, va a imponer condiciones de ajuste en todo el pueblo argentino, y vamos a tener que luchar para que no la paguemos los trabajadores.
Nuestras empresas son rentables, pero todo depende de lo que hagamos en lo productivo y en la lucha por políticas que defiendan nuestra producción. Y volver a estrechar lazos solidarios, en primer lugar, con toda la clase obrera de Neuquén.
En ese camino creemos que en las próximas elecciones de gremio y ante la opción de las dos listas que se presentan en nuestro gremio, incluso con las críticas que hacen muchos compañeros, por todo lo expresado más arriba llamamos a votar la LISTA MARRON.
Y PROPONEMOS:
1) Solicitar que en esta oportunidad, frente a la difícil coyuntura que estamos pasando, voten todos los compañeros de las tres fabricas estén o no afiliados al gremio.
2) Elegir democráticamente un cuerpo de delegados de las tres fábricas, que funcione junto a la Directiva elegida, como un congreso representativo.
3) Ejercer un verdadero control obrero de la producción, la administración y comercialización de nuestras empresas.
COMPAÑEROS INTEGRANTES DE LA EX LISTA OBRERO GRIS