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13 de abril de 2016

El negociado de los dólares a futuro

El juicio en que está citada Cristina Fernández

 En su defensa en el juicio ante el juez federal Claudio Bonadío, el ex presidente del Banco Central Alejandro Vanoli, sostuvo que “la pérdida en pesos en concepto de futuros se concretó tras la megadevaluación llevada adelante por las nuevas autoridades del BCRA en diciembre de 2015”.

 En su defensa en el juicio ante el juez federal Claudio Bonadío, el ex presidente del Banco Central Alejandro Vanoli, sostuvo que “la pérdida en pesos en concepto de futuros se concretó tras la megadevaluación llevada adelante por las nuevas autoridades del BCRA en diciembre de 2015”.
Vanoli argumentó que durante su gestión se vendió dólar futuro a “precio de mercado”, cuando el fraude consistió precisamente en lo contrario: el BCRA vendió el “dólar futuro” a un promedio de 10,60 pesos, cuando ese mismo billete cotizaba a 15 pesos en Nueva York, lo que permitió a sus compradores una ganancia extraordinaria del 42%.
Vanoli trató de desacreditar que la transacción posibilitó utilidades extraordinarias a poderosos grupos económicos. Aunque también hay que decir que el gobierno de Macri, por su compromiso con esos mismos grupos (los grandes bancos, cerealeras y otros monopolios imperialistas en el país) no esperó los resultados de la investigación, y con los vencimientos de esos futuros ya nos lleva haciendo pagar a los argentinos 58.000 millones de pesos y todavía faltan otros 15.000 millones si no se devalúa más el peso. Ese total, que terminará rondando los 75.000 millones de pesos, equivale al costo de construir más de 120 hospitales de alta complejidad.
En relación al juicio en curso, además de los máximos responsables (Vanoli, Kicillof y Cristina Fernández), hay tres directores actuales del Banco Central cuya situación es comprometida: podrían quedar procesados Germán Feldman (el verdadero operador de Kicillof), Pedro Biscay y Juan Cuatromo. Este trío participó en la toma de las decisiones y en especial de una sesión: cuando el directorio del BCRA amplió el cupo para operar en el mercado futuro y permitir la desfachatada maniobra, con la participación personal de Kicillof, quien no pudo hacerlo sin el aval de la propia Cristina Fernández.