Los trabajadores del diario relataron que un grupo de 20 personas ingresó a la redacción, y luego de sacar por la fuerza a quienes estaban en el lugar, destrozaron pertenencias de los trabajadores. También este grupo agredió a los trabajadores con matafuegos y rompieron registros de la cooperativa que administra el periódico.
Los trabajadores del diario relataron que un grupo de 20 personas ingresó a la redacción, y luego de sacar por la fuerza a quienes estaban en el lugar, destrozaron pertenencias de los trabajadores. También este grupo agredió a los trabajadores con matafuegos y rompieron registros de la cooperativa que administra el periódico.
El diario Tiempo Argentino es administrado por sus trabajadores a través de una cooperativa luego de que los empresarios kirchneristas Sergio Szpolski y Matías Garfunkel dejaran de abonar los salarios a partir de diciembre pasado y “vendieran” esos medios a Martínez Rojas, con cero antecedentes en medios de comunicación. Radio América también estuvo saliendo al aire a cargo de los trabajadores hasta que el “dueño” ocupó hace poco la planta transmisora, también con una patota.
Esta infame patoteada revela, además, la complicidad del gobierno macrista con parte de los que se la llevaron con pala durante el kirchnerismo. Se ha visto en las fotos y filmaciones cómo efectivos de la Policía Federal custodiaban a los patoteros cuando estos eran perseguidos por los trabajadores.
El grotesco ataque concitó el inmediato repudio de distintas organizaciones sociales, sindicales y políticas. Hasta el gobierno nacional tuvo que “repudiar”. Los trabajadores, con el amparo del sindicato Sipreba, hicieron la denuncia bajo la carátula de “averiguación de violación de domicilio”. La Fiscalía de la Ciudad imputó al empresario Mariano Martínez Rojas junto con otro grupo de personas por “usurpación y daños”.
Al cierre de esta edición, una multitudinaria asamblea en las puertas de Tiempo Argentino manifestaba su solidaridad con los trabajadores y definía medidas de lucha.