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27 de julio de 2016

 

Mientras el debate sobre el traspaso a la Ciudad del Puerto de Buenos Aires desde la asunción de Macri a la Presidencia se encuentra congelado, el actual ministro de Transporte de la Nación, el empresario Guillermo Dietrich, prepara para el primer bimestre de 2017 una nueva licitación de las terminales portuarias con contratos por entre 20 y 25 años.

El puerto de Buenos Aires

Una nueva licitación para más entrega y mayor concentración

 
El principal objetivo de esta nueva licitación sería avanzar en una mayor concentración del negocio, y pasar de las tres  empresas concesionarias actuales a solo dos. Y en segundo término darle una mayor relevancia a la terminal de cruceros, que busca licitar por 40 o 50 años.

 
El principal objetivo de esta nueva licitación sería avanzar en una mayor concentración del negocio, y pasar de las tres  empresas concesionarias actuales a solo dos. Y en segundo término darle una mayor relevancia a la terminal de cruceros, que busca licitar por 40 o 50 años.
Actualmente las terminales se encuentran en manos de tres grandes empresas que operan a nivel mundial. La Terminal 1, 2 y 3 (Río de la Plata) la opera DPW (Dubai Port World,) empresa estatal de los Emiratos Árabes y 4° en importancia a nivel mundial; la Terminal 4 APM Terminals (Dinamarca) es la número 1 en cargas en el mundo (Maersk); y la Terminal 5 (Bactssa) de la firma china HPH (Hutchison Port Holdings).
El puerto de Buenos Aires es el principal puerto de la Argentina y único de ultramar, por donde se canaliza el 85% de las operaciones de comercio exterior, con un promedio anual de 1 millón de TEUS (tamaño de un contenedor pequeño), y es la mayor empresa de servicios de la ciudad con 26.000 empleados. Muy lejos está de discutirse una recuperación de nuestra soberanía nacional en materia de puertos. El gobierno de Macri busca hacerle más rentable el negocio a las empresas extranjeras en un momento en que, producto de la crisis brasileña, está en baja.
El debate del traspaso del puerto a la Ciudad de Buenos Aires, que era uno de los reclamos de Mauricio cuando era jefe de Gobierno, quedó para más adelante y es el propio Dietrich el que resiste ahora desde la órbita nacional. No por defensa de la coparticipación federal de las provincias del interior sobre los impuestos aduaneros que pasan por el puerto, sino por el reparto del negocio. Sigue en carpeta una administración mixta del Puerto con la Ciudad. El gobierno de Rodríguez Larreta tiene como un importante objetivo de su gestión remodelar la zona de Retiro, con el proyecto del Paseo de la Rivera.
En este marco se están llevando adelante las negociaciones paritarias, la oferta de las empresas no alcanza para compensar la inflación que ya acumula el año, y tampoco guarda proporción con las fabulosas ganancias de estos monopolios extranjeros.
Al calor del reclamo salarial es clave enfrentar estos planes de mayor entrega y poner en debate qué puerto necesitamos para otro modelo de desarrollo productivo, al servicio de los intereses del nuestra nación y de nuestro pueblo.