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03 de agosto de 2016

Jorge Suárez, “Cacho”

A dos años de su muerte

 El 5 de agosto de 2014 falleció el querido camarada “Cacho”, o “Juan Carlos”, un comunista revolucionario. Su nombre era Jorge Suárez y tenía 72 años de edad. De muy joven se afilió a la FJC y fue parte los miles de jóvenes que rompieron con la dirección del viejo PC a fines de 1967 incorporándose al PCR. Al inicio de la década de 1970 estudiaba medicina en la Universidad de La Plata. 

 El 5 de agosto de 2014 falleció el querido camarada “Cacho”, o “Juan Carlos”, un comunista revolucionario. Su nombre era Jorge Suárez y tenía 72 años de edad. De muy joven se afilió a la FJC y fue parte los miles de jóvenes que rompieron con la dirección del viejo PC a fines de 1967 incorporándose al PCR. Al inicio de la década de 1970 estudiaba medicina en la Universidad de La Plata. 
Su papel en el Sector Universitario lo destacó para tomar tareas en el área de organización en el Regional del Partido. En esos años tumultuosos de la lucha antigolpista, se formó como comunista. En La Plata en seis meses el Partido sufrió seis asesinatos y más de 57 detenciones. En esos momentos Cacho se destacó por defender con firmeza nuestra posición; tuvo actitudes heroicas que salvaron vidas de compañeros valiosos. Durante la dictadura fascista de Videla-Viola jugó un gran papel organizando reuniones en las duras condiciones de clandestinidad que se imponían y ayudando a mantener los hilos con las masas que permitieron al Partido poder jugar su papel en la histórica huelga larga del frigorífico Swift de Berisso en 1977.
Tras la dictadura, formó parte de la estructura nacional del Partido en el área de organización. Siempre “al pie del cañón” para resolver las distintas tareas que se le fueron encomendando. Eso era Cacho –Juan Carlos–. Un hombre destacado en esas tareas “grises”, claves para la existencia de un Partido realmente revolucionario y que exige cuadros de grandes convicciones y absoluta confianza. En los últimos años estuvo encargado de la guardia del local central. Desde allí peleó siempre por resolver cada problema y atender las necesidades de los compañeros. Hasta el final de su vida, en cada tarea que le asignó el Comité Central, cumplió con abnegación y sacrificio. Dio lo mejor de sí para que el PCR jugara su papel de vanguardia. Aprendemos de su ejemplo para llevar adelante las banderas por las que peleó siempre, hasta verlas realizadas el día que triunfe la revolución en nuestra patria.