Quilmes, Berazategui, Florencio Varela
El viernes 30 de septiembre, integrantes de la Comisión de Mujeres de Quilmes, Berazategui y Varela nos hicimos presentes en el Estadio del Club Quilmes, unas horas antes del inicio del partido contra Olimpo de Bahía Blanca.
Quilmes, Berazategui, Florencio Varela
El viernes 30 de septiembre, integrantes de la Comisión de Mujeres de Quilmes, Berazategui y Varela nos hicimos presentes en el Estadio del Club Quilmes, unas horas antes del inicio del partido contra Olimpo de Bahía Blanca.
Tras haber tenido entrevistas con dirigentes del club, contándoles sobre el Encuentro Nacional de Mujeres y expresándoles la necesidad de que todas puedan participar del 31 Encuentro en Rosario, logramos acordar esta actividad donde pudimos difundir el Encuentro, continuar nuestra lucha contra la violencia hacia las mujeres y juntar fondos para solventar el viaje.
En su Twitter oficial expresaron “El Quilmes Atlético Club apoya a @MujeresQbv quienes participarán del @31Encuentro Nacional de Mujeres en Rosario”. Con la donación de dos camisetas firmadas por sus jugadores fuimos al encuentro de los y las hinchas del club, en una actividad inédita para nosotras, pero que tomamos con gran entusiasmo.
Alrededor de 60 compañeras y compañeros nos hicimos presentes. Mujeres que se han incorporado a las copas de leche, que en los últimos meses se fueron incrementando en la zona, integrantes de la CCC, estudiantes, docentes, estatales, trabajadoras de la salud, niños y niñas con sus madres y abuelas. Instalamos un gazebo con propaganda, volantes y bonos. Recibimos una muy buena recepción del público y cientos sumaron su colaboración. Algunas personas, luego de leer el volante, volvían a comprar su bono.
Un grupo de compañeras ingresaron al estadio para continuar con la iniciativa. Varios medios nos entrevistaron, incluso los canales de deporte. Fue una gran actividad, que nos demuestra que vale la pena seguir peleando para que podamos ser parte del Encuentro, porque queremos que las voces de todas se expresen, las voces de aquellas mujeres que vienen haciéndole frente al hambre, en los comedores y merenderos, aquellas jubiladas que cobran miserias, las jóvenes que cuentan las monedas para ir a estudiar, las trabajadoras que no logran llegar a fin de mes. Todas.
Nos quedan pocos días, seguimos trabajando hasta último momento. Vamos a nuestro Encuentro, y eso nos da felicidad.
San Juan
En estos meses se realizaron talleres preparatorios en distintos departamentos con numerosa concurrencia. Convocados por el Movimiento de Mujeres Sanjuaninas funcionaron talleres con 25 a 30 participantes; por el comité departamental del PTP de Chimbas a cuyo pre encuentro concurrieron 80 mujeres a debatir desocupación, salud, violencia y juventud, y por Amas de Casa del País, filial San Juan, con una participaron de 120 mujeres en su pre encuentro con cuatro temas: familia, salud, violencia y juventud. Fueron coordinados por compañeras que participaron el año anterior en Mar del Plata practicando el modo de funcionamiento de los talleres y desde luego desbrozando los temas propuestos. Varias no viajarán pero aportaron sus reflexiones. Son muy pocas las que aún no se animan a opinar. Al finalizar se leyeron las conclusiones que en todos los talleres fueron por demás interesantes y se expresaron similares ejes de discusión: preocupación por conseguir trabajo y calidad del mismo, futuro de los hijos, acceso a la salud e incremento de la violencia. Las dos horas resultaron escasas para todo lo que se quería expresar.
En el taller de trabajo y de familia los puntos tratados fueron similares: se opina que es deficiente la calidad de trabajo al que pueden acceder las mujeres, hay discriminación por hijos, edad, aspecto físico. Muchas mujeres tienen secundaria completa, otras capacitaciones incluso terciarias y están trabajando en servicio doméstico, cuidado de ancianos, venta de productos, tienen un plan, ponen un kiosco en su casa. Muchísimas mujeres madres solas, separadas por violencia o alcoholismo de su pareja se hacen cargo de los hijos. Debaten si la mujer debe trabajar fuera de casa cuando el marido ingresa lo suficiente o quedarse a cuidar a los hijos.
La mayoría sostiene que la independencia económica es fundamental para ser respetada, hacerse valer, decidir. Que con respecto a los hijos vale calidad y no cantidad. Y que su conducta no sólo depende de la madre, también la sociedad influencia. “Aunque te mates trabajando dentro y fuera de casa, no dejes de salir a trabajar”, acuerda la mayoría. Se cuentan experiencias sobre acoso laboral, sobre maridos que no dejaban ir a trabajar y luego abandonaron el hogar y quedaron desamparadas. Preocupa que los hijos no quieran ir a la secundaria, “no tienen ilusión de conseguir luego un buen trabajo”, muchos no saben qué hacer, terminan de peón, las niñas embarazadas y ya no hacen más que criar niños. Acuerdan todas “queremos que tengan mejor vida que nosotros”. Se plantea la necesidad de que el gobierno gestione instalación de fábricas y otros emprendimientos. Se habla de cupos femeninos por empresas (que venimos proponiendo hace tiempo desde el PTP). Se habló de la inseguridad: intranquilidad cuando los hijos salen de casa.
Con respecto a la salud se plantea que no hay buena atención en salas y hospitales, no hacen campañas de prevención, cuentan episodios de maltrato allí. Muchas mujeres tienen enfermedades como diabetes, hipertensión, problemas renales a muy corta edad. Otro aspecto es que la mujer no se atiende, lleva al niño, acompaña a sus padres pero para ella nunca se da tiempo. Varias tienen conciencia que se come mal. Otras dicen que las madres jóvenes no saben seleccionar la dieta, otras lo atribuyen a tres generaciones de trabajo informal y desocupación por las sucesivas crisis.
En violencia ven que son demasiadas las mujeres que sufren maltrato, cada vez se animan más a denunciar pero muchas aún luego vuelven con la pareja, otras niegan ser golpeadas ante la denuncia hecha por algún vecino o pariente, todas aportan al análisis de estas conductas y por mayoría se atribuye al prejuicio y preocupación por el sustento, “a veces más que una psicóloga necesitas un laburo y no lo encontrás, hay que vivir con los niños”; está muy bueno que tengamos área mujer en cada municipio pero todos no funcionan bien; cuando realizan la denuncia muchas veces en la policía no la toman, incluso en la comisaría de la mujer.
Se mencionan todos los tipos de violencia y dan ejemplos. Se habla de la prostitución como forma de violencia y que se llega por pobreza y falta de oportunidades, una minoría opina que hay mujeres que les gusta ejercerla. La ley de prevención no se cumple completamente. Con respecto a la trata consideran que erradicarla está en manos del gobierno.
Se destaca el reclamo que venimos haciendo hace tiempo: cupos laborales y de vivienda para las víctimas. Se analiza el abuso a menores como problema grave. Se opina que se desvaloriza a la mujer, que tiene más conciencia y ya no acepta que le impongan, también hay mujeres machistas. Muchos varones respetan a la mujer, asumen la crianza, son buenos compañeros. Hay cambios muy positivos en la sociedad. El que no cumple es el gobierno.
En Juventud reclaman educación sexual en las escuelas. Muchos chicos tienen mala información, otros saben cómo cuidarse y no quieren, hay madres que hablan con los hijos pero muchas no saben cómo hacerlo o no se animan. Ven que se consume mucho alcohol y droga piensan que es para ser aceptados, por soledad y sostienen que la responsabilidad es de adultos que trafican, es un gran negocio y el gobierno lo permite.
Se comenta que hay mucha violencia en el noviazgo, controles, que muchas veces incitan a que no estudies más. Se hace hincapié en la necesidad de estudiar, de terminar la secundaria, de reclamar a la dirección de la escuela que se formen los centros de estudiantes para alentar a los chicos y generar actividades que los integren. También se propone aprender oficios y pedir centros deportivos.
Hasta aquí una apretada síntesis de los debates que revelan el crecimiento político de las mujeres. Muchas votaron a Macri esperanzadas en que la pobreza cero significaba oportunidades laborales: “qué desilusión, cómo mintieron, estamos peor porque la plata no alcanza para nada”, expresan. Nuestro Partido tiene programa para resolver calidad de vida para todos con derechos para las mujeres. Pongámoslo a discusión. Sin cambio del rumbo no habrá derechos para las mujeres.
Tucumán
El sábado 1° de octubre se realizó en la facultad de derecho de la UNT el preencuentro de mujeres que reunió a las compañeras de la ciudad de Tucumán que viajaremos al 31 Encuentro Nacional de Mujeres en Rosario. Luego de las palabras de apertura que señalaron la importancia de organizarse para viajar al Encuentro, se señalaron las características de este gran evento nacional de las mujeres argentinas que año tras año se autoconvoca y plantea una modalidad horizontal, que garantiza que cada mujer que participa exprese sus opiniones en los talleres y pueda debatirlas. Los talleres son verdaderos espacios de aprendizaje y encuentro con las principales luchas que han recorrido nuestro país en este año.
En cada Encuentro las mujeres relatan sus experiencias, encuentran nuevas formas de lucha y avanzan en descubrir las causas de la doble opresión que sufrimos las mujeres.
Luego de la apertura, el debate permitió que muchas expresaran su preocupación en relación a las situaciones de violencia que viven las mujeres, los padecimientos que vivimos este año con los tarifazos y aumentos de precios que nos golpea. Se debatió sobre las formas de enfrentar los hechos de violencia en la familia y la organización de las mujeres para estos casos.
Al finalizar los debates, entre todas, se ultimaron detalles del viaje al Encuentro.
