Peleamos para que al calor de la lucha social y política que venimos protagonizando, sean miles los que nos conozcan, se sumen y hagan suya esta organización que hoy pelea para pararle la mano a la política de Macri y para avanzar en una salida de fondo que permita cambiar la situación en la que vivimos.
Peleamos para que al calor de la lucha social y política que venimos protagonizando, sean miles los que nos conozcan, se sumen y hagan suya esta organización que hoy pelea para pararle la mano a la política de Macri y para avanzar en una salida de fondo que permita cambiar la situación en la que vivimos.
El Partido viene teniendo grandes aciertos en el último tiempo. Pasamos a jugar en la “cancha grande” con hitos como el triunfo de la lucha por la Emergencia Social y la Marcha Multisectorial de las Economías Regionales, y eso nos genera condiciones extraordinarias para crecer.
Este año lanzamos el movimiento #NiUnPibeMenosPorLaDroga y nos plantamos como la Juventud que pelea por otra salida. Avanzamos en la pelea por las personerías del PTP, como en Córdoba y en Mendoza, y apostamos por fortalecer y ampliar el Frente Popular para que tenga expresión electoral la unidad que venimos construyendo en las calles.
En ese marco conversamos con algunos de los compañeros que se sumaron recientemente y nos cuentan sus experiencias:
Diego y Nico, secundarios de una técnica del conurbano bonaerense
Nico: “Conocí la JCR al mismo tiempo que al MUS y me invitaron a mi primera reunión. La afiliación es de palabra, se basa creo yo en el apoyo al Partido y su actividad. Yo me afilíé para tener un lugar, un grupo donde poder defender mis ideales en conjunto. En el Centro de Estudiantes siempre buscamos ocuparnos de la Escuela lo más posible, dentro de lo que está a nuestro alcance. Y reclamamos a los que deberían encargarse de las cosas que no están a nuestro alcance. Ahora peleamos para que se teche el patio de la escuela, para hacer un comedor para los pibes y darles un aula de descanso. A los pibes les digo que si tienen ganas de luchar por cambiar la realidad: ¡que se afilien!
Diego: “Yo conocí la Juventud en un acto en la escuela, me mostraron la Chispa y me propusieron unirme. Donde estudiamos las condiciones podrían ser mejores: hay aulas sin ventiladores ni estufas; en invierno hace mucho frío, y en verano no se puede estar. Necesitamos nuevas herramientas y ese tipo de cosas. Desde el Centro de Estudiantes nos preocupamos por que la escuela sea un mejor lugar para todos, para que podamos tener una educación de calidad, en un ambiente agradable.
“A los chicos que están pensando en afiliarse les diría que ¡no lo duden! Hay un lindo grupo de personas, y entre compañeros nos ayudamos todos. En mi caso, hubo compañeros que me dieron una mano con materias que me quedaron.”
Ana y Penny, estudiantes universitarias de Comahue
Penny: “Los conocí por la CEPA; me hablaban de la Juventud, me invitaron a participar varios compañeros y lo pensé un tiempo. Fui conociendo y sabiendo de qué se trataba, ahí fue naciendo el compromiso. Ahí me afilié.
“Tengo una situación compleja entre el trabajo, la facultad y la militancia; a veces parece que no hay tiempo para todo. Y más por la situación que estamos viviendo que es para todos complicada, pero intento estar siempre. Para sumar a alguien discuto de la situación general y la personal que atraviesa, y le propongo que se sume para cambiar esta realidad, que ésta es una herramienta de lucha”.
Ana: “Desde la adolescencia comencé a participar en manifestaciones, en distintos encuentros en los cuales fui conociendo la Jota. Durante mucho tiempo estuve en duda de afiliarme por el compromiso que significa, pero después de haber pasado distintas situaciones en mi vida pude darme cuenta de que la vida es una lucha y que a través de mi experiencia podía ayudar a otras personas. A los pibes en situación de calle, en las drogas, que sufren distintos tipos de violencia y luchar para cambiar las distintas situaciones por las que pasamos los jóvenes, como también en el trabajo y en el estudio. Es por lo que decidí sumarme y es también lo que le diría a algún pibe, y que todos juntos luchando podemos hacer la revolución”.
Podemos llegar a los objetivos
Estas experiencias de afiliación, junto con muchas de otras zonas, demuestran que es posible llegar a los objetivos que nos planteamos cuando arrancamos la campaña. Construir una JCR poderosa que se desarrolle e integre la línea del Partido a la realidad de los millones de pibes y pibas, del campo y de la ciudad en todo el país, es una condición para poder seguir incidiendo en la situación política y llevarla por un camino favorable para la clase obrera y el pueblo.
