Se cumplieron 23 años del Santiagueñazo, la rebelión popular que dejó los tres poderes en llamas el 16 de diciembre del 1993, que concluyó con la consigna del Argentinazo en el 2001 “que se vayan todos”.
Se cumplieron 23 años del Santiagueñazo, la rebelión popular que dejó los tres poderes en llamas el 16 de diciembre del 1993, que concluyó con la consigna del Argentinazo en el 2001 “que se vayan todos”.
Hoy nos encuentra este 16 de diciembre a los santiagueños culminando un año de luchas con marchas multitudinarias de docentes por paritarias y eliminación de siete cifras en negro, que pobló de carpas de la resistencia docente en los pueblos; con marchas de mujeres por el cumplimiento de la Ley Emergencia ante el creciente número de femicidios; con marchas de organizaciones sociales exigiendo trabajo digno; reclamando el derecho de la tierra y luchando contra las cesantías. Marchas y permanente reclamo exigiendo justicia por despidos del supervisor Guzman por acompañar la lucha docente; justicia por el crimen de Raúl Domínguez, un empleado de Rentas que denunció el mal manejo de Rentas de la provincia; justicia y esclarecimiento del vil y brutal asesinato de Marito Salto, que desnudó una trama que involucra a representantes de los poderes del Estado con redes de narcotraficantes.
La multisectorial de las organizaciones políticas, gremiales y sociales que se oponen al despilfarro de la opulencia frente la cruda realidad que nos golpea, luchamos día a día para enfrentar esta impunidad del gobierno provincial de los Zamora, protegido hasta ahora por el gobierno nacional de Macri que negocia los acuerdos en las distintas cámaras a costa de la pobreza estructural de los santiagueños. No bajaremos los brazos, seguiremos levantando nuestras consignas y no nos callarán hasta que nuevamente truene el escarmiento.
