El 2017 arranca cargado de luchas, con un candente estado de ánimo de las masas. A la espera de la pobreza cero, los puestos de trabajo, el fin de la corrupción y los brotes verdes, después de un año del gobierno de Macri, el pueblo solo sufre el brutal ajuste, más de 200 mil despidos. Además vemos como sí hay dinero para beneficiar a los sectores pudientes del país, quitar las retenciones a las mineras, grandes petroleras, a los grandes exportadores de soja, pagar millones a los fondos buitres y las políticas económicas que benefician a los grandes bancos y monopolios extranjeros y su propia familia.
En el plano educativo su política fue similar: el recorte presupuestario hizo temblar el funcionamiento de nuestras universidades movilizando a docentes, no docentes y estudiantes en el primer cuatrimestre de 2016; recorte de la cantidad de becas nacionales; ajuste en el presupuesto para Ciencia y Técnica e Investigación en el presupuesto de 2017; recorte en la cantidad de nuevos investigadores que ingresaran a Conicet; despidos en el área del Ministerio de Educación, el insuficiente presupuesto para las universidades nacionales frente al agravamiento de la situación económica, sumado a la no convocatoria a paritaria nacional docente y la falta de una propuesta salarial acorde a las necesidades de la docencia universitaria complejizan esta situación.
En estos hechos quedó demostrado que Cambiemos vino a atacar directamente a la educación pública, sin embargo quedó en evidencia que los docentes y los estudiantes no vamos a dejar pasar este ajuste. La jornada nacional educativa del 12 de mayo del año pasado, la toma de Conicet y el Ministerio de Educación, las cientos de marchas locales y clases públicas y las jornadas de lucha de los gremios docentes y estudiantiles expresaron que las calles y la unidad docente-estudiantil es la principal herramienta para frenarle la mano al macrismo.
Las consecuencias de definiciones políticas
Los estudiantes estamos en la difícil etapa del año en la cual definimos qué cursar, cuánto cursar -o incluso si continuar estudiando-, no por el paro docente sino como consecuencia de la situación económica. Nuestros padres y nosotros mismos somos víctimas de despidos, o de precarización laboral, por lo cual mantenernos en los estudios es cada vez más difícil, siendo las becas recursos insuficientes para mantenernos estudiando. La deserción en el año 2016 fue muy acentuada, lo notamos en las aulas, en materias que se quedaron sin estudiantes y cursos enteros vacíos. Los recortes al presupuesto comienzan a sentirse. Planes Progresar que no fueron restituidos y becas nacionales que deberían ser actualizados, fueron homogeneizados pero para abajo, lo cual nos perjudica enormemente. Sumado a la situación en cada provincia donde continuamos la lucha por comedores, becas de fotocopias, alquileres y el boleto educativo nacional.
Necesitamos la más amplia unidad docente estudiantil: apoyamos el paro docente
El gobierno lleva a cabo una campaña de desprestigio que busca silenciar la lucha docente y ocultar la política de ajuste y recorte a la educación pública, se intenta deslegitimar la lucha por salarios dignos del conjunto de la docencia Argentina. En este contexto desde la CEPA apoyamos la lucha docente y por más presupuesto y repudiamos que nuestro máximo gremio estudiantil sea utilizado y se preste a los intereses de los gobiernos de turno, como se vio en la carta abierta de la actual presidenta de la Federación Universitaria Argentina -conducida por Franja Morada- en la que exponía su posición ante el conflicto docente. Bajo una falsa solidaridad el objetivo fue desprestigiar la lucha docente. Desde la Secretaría Ejecutiva de la FUA peleamos consensuar entre todas las fuerzas un posicionamiento a favor de la lucha docente y en defensa de la educación pública, discutimos y sacamos una declaración denominada “La FUA apoya a los maestros”, manifestando nuestro enérgico respaldo al reclamo docente, en el contexto de la negociación paritaria. Posición que expresa la opinión de todas las demás fuerzas políticas, contrarías a la carta que publicó la presidenta a título personal, pero que deja en claro la orientación y complicidad política del espacio al cual pertenece, siendo la FM parte del gobierno nacional.
En la Universidad durante el 2016 fueron muchas las que declararon Emergencia Presupuestaria y las consecuencias las vivimos la comunidad educativa en su conjunto. Esta situación la venimos atravesando desde hace muchos años, pero el gobierno debe dar una respuesta.
Desafíos en este 2017
Podemos afirmar que el movimiento estudiantil está en mejores condiciones de organización, después de un año convulsionado y unificando las luchas a nivel nacional, después del histórico 12 de mayo, en unidad con docentes y no docentes, nos preparamos para arrancar el año con todo. Debemos pensar en distintas formas de articulación conjunta para conquistar nuestros derechos. Ya empezaron los ingresos en muchas Universidades, donde el ingreso es libre, peleando porque se garantice el buen funcionamiento de las comisiones de ingreso y donde aun no se avanza con el ingreso libre, presionando para ganarlo. A su vez cada año en muchas provincias nos encuentra movilizados contra los aumentos de boleto escolar y en la lucha por Boleto Educativo Nacional y su correcta implementación. Tenemos por delante una agenda cargada.
Organizar al movimiento estudiantil: desde el ingreso tenemos muy buenas experiencias para compartir y replicar, a través del armado de cuerpos de delegados, en lugares donde somos conducción del Centro de Estudiantes y en lugares donde no lo somos, esta herramienta permite el protagonismo estudiantil y garantiza la organización por problemas específicos de cada carrera, desde el inicio de la vida universitaria.
El paro internacional de mujeres en la Universidad e institutos, lo haremos sentir con diversas iniciativas que incluyen al conjunto de los estudiantes, denunciando la situación que las mujeres vivimos y reclamando los derechos que nos corresponden: jardines maternales, protocolos contra violencia y discriminación, cátedras con contenido de género, etc.
El 24 de Marzo conmemoramos otro aniversario del golpe de Estado más sangriento de la historia Argentina, levantando las banderas de los 30.000 detenidos desaparecidos y luchando por Memoria, Verdad y Justicia.
El 2 de Abril a 35 años de la gesta de Malvinas, reivindicamos la soberanía nacional sobre las Islas Malvinas y en todo el territorio nacional, como fuerza estudiantil antiimperialista repudiamos la penetración de los distintos imperialismos que someten a nuestro pueblo y los dichos de miembros del gobierno, que ponen en riesgo nuestra soberanía.
La lucha que atravesará el año 2017 será por el aumento de presupuesto educativo para: becas, sueldos docentes, comedores, alquiler, etc. Eso marcará el ciclo lectivo y solo la unidad nos permitirá avanzar.
Seguimos luchando por hacer posible lo necesario. Por la universidad pública, libre y gratuita. La universidad del pueblo liberado: científica, democrática y popular.
Edith Liquitay: Coordinadora nacional de la CEPA
