La designación de Martín Lousteau, como futuro ministro de Economía, ha concitado la adhesión de la mayoría de los sectores patronales, tanto de la industria como de las finanzas, e incluso algunos del agro, que lo definen como “productivista” y partidario del dólar alto. También por sectores financieros imperialistas, como los que representa The Wall Street Journal. Y hasta es visto con simpatía por sectores políticos opositores al gobierno de Kirchner, aparentemente tan disímiles como los que se referencian con Elisa Carrió, Roberto Lavagna y Mauricio Macri. ¿A qué se debe esto?
En el caso de los que se referencian con Elisa Carrió, por su relación con Alfonso Prat Gay, de quien fue asesor de la presidencia del Banco Central de la República Argentina (BCRA) durante 2003 y 2004. Para los que se referencian con Lavagna, porque trabajó con el en esa época duhaldista Javier González Fraga y escribió un libro con él (Sin Atajos, Temas Grupo Editorial, 2005) y como él, estudió en la Escuela de Ciencias Económicas y Políticas de Londres. Y para los macristas porque fue coordinador del Equipo de Economía de Grupo Unidos del Sud, del anteriormente menemista y luego duhaldista Francisco de Narváez, y también por su vinculación al Grupo Sophia, del segundo de Mauricio Macri, Horacio Rodríguez Larreta, el ahijado de Rogelio Frigerio.
En fin, un “chico modelo”, licenciado en Economía en la Universidad de San Andrés (Asociación Civil Educativa Escocesa San Andrés) y magistrado en la Escuela de Economía de Londres, que se desempeñó como economista jefe y luego como director en APL Economía, consultora de macroeconomía y política de Prat Gay y Pedro Lacoste. Fue profesor de posgrado en el Instituto Torcuato Di Tella y de grado en San Andrés.
02 de octubre de 2010